“Lo primero que sentí fue un sacudón”

“No veíamos las horas de llegar”. Así, describió ayer Juan José Saifán la sensación que tenían los estudiantes tucumanos que viajaban en el ómnibus de la empresa “Vía Bariloche” que el jueves chocó contra un camión en Córdoba, cuando regresaban de Bariloche. “Lo primero que sentí fue un sacudón. Algunos de los chicos se despertaron con ese choque, pero después hubo un segundo golpe. Cuando prendieron las luces vimos al camión con el acoplado, que había quedado tirado para el lado de la banquina”, agregó. El chico, que resultó ileso, había llegado el jueves a la noche a Tucumán en uno de los vuelos que trajo a la mayor parte de la comitiva de estudiantes de quinto año del Colegio Santísimo Rosario, de Monteros. Sin embargo, ayer estuvo en el aeropuerto para recibir a sus compañeros de la Escuela Normal de Simoca.

“Venía sentado en los asientos de adelante de la parte de arriba del colectivo. Primero no queríamos avisar nada para que nuestros padres no se preocupen. Pero cuando el choque empezó a salir en la televisión, comenzamos a hablar”, recordó.

Los minutos posteriores al accidente fueron traumáticos. “Buscábamos la manera de salir pero la puerta por donde subimos estaba trabada con el acoplado. Salimos por la puerta del chofer”, continuó.

La noche anterior al choque, Juan José dijo que estuvo sentado al lado de Emerson Cárdenas, el chico fallecido. “Veníamos juntos pero cuando paramos para comer me fui a sentar en mi asiento. Habíamos pasado por un lugar donde dos camiones habían chocado y los coordinadores nos dijeron que todos nos teníamos que sentar en nuestros lugares. Creo que al final Emer se quedó solo”, señaló.

Los estudiantes se enteraron recién en el hotel de la muerte. “Nos dijeron que Emer estaba estable, pero después nos dijeron que estaba grave. En el hotel, un coordinador, una psicóloga y uno de los padres que viajaron con nosotros nos dijeron que había muerto”, recordó.