04 Agosto 2015
EN EL ESTRADO. González brindó una conferencia en el hotel Sheraton. la gaceta / foto de diego aráoz
En 2013, en su país natal, el ex presidente español Felipe González presentó su libro “En busca de respuestas. El liderazgo en tiempos de crisis”. “La próxima vez que venga a Argentina voy a ver si puedo hacer un debate al respecto”, señaló el referente socialista, en entrevista con LA GACETA. Y ante el gobernador José Alperovich y el vicegobernador Juan Manzur, respondió a la consigna “qué debe tener un líder del futuro”. “Casi lo mismo que los (líderes) del pasado, pero con elementos de la modernidad”, explicó González. Y pasó a detallar cuáles son a su entender los puntos fuertes que debe tener un “conductor”.
“Una cosa que aprecio mucho es la fortaleza emocional de un líder, la capacidad de no perder la centralidad, la serenidad, cuando las cosas van mal y cuando las cosas van bien”, reflexionó el ex presidente socialista. Agregó que le parece muy importante que un líder “se haga cargo del estado de ánimo de la gente”. “Es una cosa que parece obvia, pero no es tan obvia. Si el estado de ánimo de la gente es malo, la única manera de cambiarlo es hacerse cargo, entenderlo, comprenderlo”, destacó. Añadió que la información es un bien “como el aire”, y que la cuestión ahora no radica en la cantidad de información, sino en la capacidad para procesarla. “La sociedad ha cambiado y ha horizontalizado la información”, afirmó el ex presidente.
“Un líder debe tener capacidad de coordinar equipos humanos. El liderazgo no es sólo poder, es poder con autoridad, como cualidad moral. Potestas y auctoritas”, destacó González, citando dos posturas que datan de la Antigua Roma. Y agregó que “un líder que tiene poder, pero no autoridad, es muy difícil que lleve un equipo de gobierno bien”. “Crear solidaridad en un equipo humano sólo se consigue con autoridad moral. En esta sociedad un líder obviamente tiene que decirle a la gente: esta es la realidad en la que vivimos, que no es la interna, nuestro espacio interior; es una realidad abierta al mundo, y tenemos que analizar cuáles son nuestras ventajas y desventajas para insertarnos en esa realidad. Mejoremos y aprovechemos las ventajas, y disminuyamos las desventajas. No hay nada por inventar”, resumió.
Invitados.- El ex presidente español Felipe González arribó a suelo tucumano cerca de las 18. En primer momento, fue recibido por el gobernador José Alperovich, el vicegobernador Juan Manzur y otros funcionarios provinciales en la residencia del mandatario tucumano. Luego, partieron al Hotel Sheraton, donde González brindó la conferencia. Allí lo esperaban diferentes integrantes del gabinete del PE, como Osvaldo Jaldo (ministro del Interior), Pablo Yedlin (de Salud), Silvia Rojkés (de Educación), Jorge Gassenbauer (de Gobierno, Justicia y Seguridad) y Jorge Jiménez (de Economía); la secretaria General de la Gobernación, Carolina Vargas Aignasse; los secretarios y presidentes de entes Marcelo Caponio (de Gobierno y Justicia), Mauricio Guzman (Ente de Cultura), Roberto Jiménez (de Trabajo), Bernardo Racedo Aragón (Turismo) y Julio Saguir (Planeamiento). Se vio además a los legisladores Regino Amado, Alejandro Martínez, José León, Sisto Terán Nougués, Guillermo Gassenbauer, Fernando Juri y al secretario legislativo Juan Antonio Ruiz Olivares. Participaron también la senadora nacional y primera dama Beatriz Rojkés de Alperovich y sus hijas Sara y Mariana; la diputada nacional Miriam Gallardo de Dip, los intendentes Jorge Manuel Yapura Astorga (Tafí del Valle), Luis Campos (Alberdi) y César “Kelo” Dip (Lules). Estuvieron además la rectora de la UNT, Alicia Bardón, y Walter Fabián Soria, decano de la UTN. Como representantes de la Corte Suprema participaron Antonio Estofán y Daniel Posse, y por el Tribunal de Cuentas hicieron lo propio Miguel Chaibén Terraf y Sergio Vidal. Fueron invitados además el juez federal Fernando Poviña y el vocal de la Cámara de Apelaciones en lo Penal de la Justicia Federal local, Ricardo Sanjuán.
Anécdota con Francisco.- “¿Qué opina de la política que lleva adelante el Papa Francisco?”, le preguntó LA GACETA a Felipe González durante la entrevista. Esto dio pie al mandatario español para que contara una anécdota. “No soy demasiado objetivo, me parece bien (la política que lleva adelante). Lo conocí cuando era Jorge Bergoglio, en un momento dramático, en 2001. Hablé con todo el mundo, porque me pidió (el ex presidente Fernando) De la Rúa que viniera a Argentina. En el trayecto de vuelo (el ex mandatario argentino) había dimitido. Le tengo aprecio personal (al radical), me parece un hombre de buena fe, pero me chocó mucho que dimitiera. Comprendo que haya renunciado, pero comprendo menos lo barata que se ha puesto la cabeza del Presidente de la Argentina. No puede entregar la cabeza. La entrevista más interesante, en análisis sensato y sereno de la situación, fue la hora y media que estuve con Bergoglio. Llegué y su secretario me advirtió que era un hombre de pastoral y no político. Cuando llegué le dije a él eso. Le dio un ataque de risa. Acabo de verlo hace tres meses con Daniel Barenboim por la crisis de Medio Oriente. Le pedí hablar de Venezuela, está muy preocupado por Venezuela”, recordó González sobre aquel encuentro con el actual Sumo Pontífice.
Organización.- La conferencia que brindó el ex presidente español Felipe González incluyó todo un despliegue por parte de la organización. A las 20, en el salón 9 de Julio del Hotel Sheraton, inició un musical con cuarteto de cuerdas que amenizó la entrada: “miniempanaditas” de carne y de pollo, y variedad de brusquetas y de “finger-sándwich”. El servicio al plato incluyó roll de ave, y precedió al momento en que subieron al escenario González, el gobernador José Alperovich y el vicegobernador Juan Manzur. Las palabras de bienvenida y de apertura del evento estuvieron a cargo de Oscar Mazza, y todo lo que ocurría en el estrado fue transmitido mediante pantallas auxiliares, gracias a un sistema de circuito cerrado. Pasadas las 22 se sirvió el plato principal: carne braseada acompañada de papa rostí y vegetales, con salsa de champiñones. El postre, brownie con helado de americana y frutos rojos.
Huésped de honor.- Pasadas las 21, la directora de Ceremonial de la Provincia, Patricia Ibazeta de Posse, dio lectura al decreto firmado por el gobernador José Alperovich que declaró Huésped de Honor a Felipe González. El mandatario tucumano entregó además un libro de Tucumán al ex presidente español. Luego, el vicegobernador Juan Manzur le obsequió un poncho.
“Una cosa que aprecio mucho es la fortaleza emocional de un líder, la capacidad de no perder la centralidad, la serenidad, cuando las cosas van mal y cuando las cosas van bien”, reflexionó el ex presidente socialista. Agregó que le parece muy importante que un líder “se haga cargo del estado de ánimo de la gente”. “Es una cosa que parece obvia, pero no es tan obvia. Si el estado de ánimo de la gente es malo, la única manera de cambiarlo es hacerse cargo, entenderlo, comprenderlo”, destacó. Añadió que la información es un bien “como el aire”, y que la cuestión ahora no radica en la cantidad de información, sino en la capacidad para procesarla. “La sociedad ha cambiado y ha horizontalizado la información”, afirmó el ex presidente.
“Un líder debe tener capacidad de coordinar equipos humanos. El liderazgo no es sólo poder, es poder con autoridad, como cualidad moral. Potestas y auctoritas”, destacó González, citando dos posturas que datan de la Antigua Roma. Y agregó que “un líder que tiene poder, pero no autoridad, es muy difícil que lleve un equipo de gobierno bien”. “Crear solidaridad en un equipo humano sólo se consigue con autoridad moral. En esta sociedad un líder obviamente tiene que decirle a la gente: esta es la realidad en la que vivimos, que no es la interna, nuestro espacio interior; es una realidad abierta al mundo, y tenemos que analizar cuáles son nuestras ventajas y desventajas para insertarnos en esa realidad. Mejoremos y aprovechemos las ventajas, y disminuyamos las desventajas. No hay nada por inventar”, resumió.
Invitados.- El ex presidente español Felipe González arribó a suelo tucumano cerca de las 18. En primer momento, fue recibido por el gobernador José Alperovich, el vicegobernador Juan Manzur y otros funcionarios provinciales en la residencia del mandatario tucumano. Luego, partieron al Hotel Sheraton, donde González brindó la conferencia. Allí lo esperaban diferentes integrantes del gabinete del PE, como Osvaldo Jaldo (ministro del Interior), Pablo Yedlin (de Salud), Silvia Rojkés (de Educación), Jorge Gassenbauer (de Gobierno, Justicia y Seguridad) y Jorge Jiménez (de Economía); la secretaria General de la Gobernación, Carolina Vargas Aignasse; los secretarios y presidentes de entes Marcelo Caponio (de Gobierno y Justicia), Mauricio Guzman (Ente de Cultura), Roberto Jiménez (de Trabajo), Bernardo Racedo Aragón (Turismo) y Julio Saguir (Planeamiento). Se vio además a los legisladores Regino Amado, Alejandro Martínez, José León, Sisto Terán Nougués, Guillermo Gassenbauer, Fernando Juri y al secretario legislativo Juan Antonio Ruiz Olivares. Participaron también la senadora nacional y primera dama Beatriz Rojkés de Alperovich y sus hijas Sara y Mariana; la diputada nacional Miriam Gallardo de Dip, los intendentes Jorge Manuel Yapura Astorga (Tafí del Valle), Luis Campos (Alberdi) y César “Kelo” Dip (Lules). Estuvieron además la rectora de la UNT, Alicia Bardón, y Walter Fabián Soria, decano de la UTN. Como representantes de la Corte Suprema participaron Antonio Estofán y Daniel Posse, y por el Tribunal de Cuentas hicieron lo propio Miguel Chaibén Terraf y Sergio Vidal. Fueron invitados además el juez federal Fernando Poviña y el vocal de la Cámara de Apelaciones en lo Penal de la Justicia Federal local, Ricardo Sanjuán.
Anécdota con Francisco.- “¿Qué opina de la política que lleva adelante el Papa Francisco?”, le preguntó LA GACETA a Felipe González durante la entrevista. Esto dio pie al mandatario español para que contara una anécdota. “No soy demasiado objetivo, me parece bien (la política que lleva adelante). Lo conocí cuando era Jorge Bergoglio, en un momento dramático, en 2001. Hablé con todo el mundo, porque me pidió (el ex presidente Fernando) De la Rúa que viniera a Argentina. En el trayecto de vuelo (el ex mandatario argentino) había dimitido. Le tengo aprecio personal (al radical), me parece un hombre de buena fe, pero me chocó mucho que dimitiera. Comprendo que haya renunciado, pero comprendo menos lo barata que se ha puesto la cabeza del Presidente de la Argentina. No puede entregar la cabeza. La entrevista más interesante, en análisis sensato y sereno de la situación, fue la hora y media que estuve con Bergoglio. Llegué y su secretario me advirtió que era un hombre de pastoral y no político. Cuando llegué le dije a él eso. Le dio un ataque de risa. Acabo de verlo hace tres meses con Daniel Barenboim por la crisis de Medio Oriente. Le pedí hablar de Venezuela, está muy preocupado por Venezuela”, recordó González sobre aquel encuentro con el actual Sumo Pontífice.
Organización.- La conferencia que brindó el ex presidente español Felipe González incluyó todo un despliegue por parte de la organización. A las 20, en el salón 9 de Julio del Hotel Sheraton, inició un musical con cuarteto de cuerdas que amenizó la entrada: “miniempanaditas” de carne y de pollo, y variedad de brusquetas y de “finger-sándwich”. El servicio al plato incluyó roll de ave, y precedió al momento en que subieron al escenario González, el gobernador José Alperovich y el vicegobernador Juan Manzur. Las palabras de bienvenida y de apertura del evento estuvieron a cargo de Oscar Mazza, y todo lo que ocurría en el estrado fue transmitido mediante pantallas auxiliares, gracias a un sistema de circuito cerrado. Pasadas las 22 se sirvió el plato principal: carne braseada acompañada de papa rostí y vegetales, con salsa de champiñones. El postre, brownie con helado de americana y frutos rojos.
Huésped de honor.- Pasadas las 21, la directora de Ceremonial de la Provincia, Patricia Ibazeta de Posse, dio lectura al decreto firmado por el gobernador José Alperovich que declaró Huésped de Honor a Felipe González. El mandatario tucumano entregó además un libro de Tucumán al ex presidente español. Luego, el vicegobernador Juan Manzur le obsequió un poncho.
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