31 Julio 2015
PURA ALEGRÍA. Funes Mori, Martínez y Kranevitter se saludan una vez que terminara el encuentro en tierra mexicana. fotos de reuters
BUENOS AIRES.- Dio el primer paso y ahora va por más. Pero no en el campo, sino en el vestuario, puertas adentro y a los cuatro vientos. Después de haber empatado 0 a 0 contra Tigres en México, comenzó el operativo para levantar el ánimo aún más al plantel “millonario. “Este equipo está muy cerca de que quedar en la historia del club. Ahora deberán soportar nuestra presión en el Monumental”, no se cansó de repetir el técnico Marcelo Gallardo.
Y el “Muñeco” no paró con la lluvia de flores hacia sus dirigidos. “Los jugadores saben que no pueden dejar esta posibilidad, lograron sobreponerse a un partido muy duro en el que el calor y el clima en general iban a configurar un contexto muy adverso. Sin embargo, lo resolvieron jugando un gran encuentro por momentos”, afirmó.
Consultado por el partido desquite, Gallardo prometió que River intentará que todo el sacrificio que se hizo se pueda reflejar en cosas positivas en la revancha. También confió en que sus jugadores se recuperarán bien y estarán en condiciones de hace un buen partido. “Tigres es un equipo muy duro, creo que ellos esperaban sacar una diferencia para ir más tranquilos al Monumental, sabiendo que la situación va a cambiar en relación al juego”, intuyó.
Enzo Francescoli, director deportivo de los “millonarios”, fue otro de los que habló. “Si hace cuatro días me decían que íbamos a empatar en Monterrey quedaba feliz. Traer ese resultado fue bueno, especialmente después de un viaje tan largo, con el calor que hubo que sufrir y ante uno de los mejores equipos de la Copa”, entendió.
Para reforzar su idea, Francescoli evocó su experiencia como jugador en la final con América de Cali en 1996, que los “millonarios” también comenzaron de visitante. “Cuando fuimos a Colombia estábamos convencidos de que debíamos empatar y hasta perder por un gol, porque sabíamos que de local podíamos hacer la diferencia”, recordó.
Francescoli prefirió no hablar de que el “millo” no jugó un buen partido. “Nadie quema las naves cuando hay otro partido a una semana del que se disputó. Tigres quiso ganarlo, pero River lo controló sabiendo que aún tiene la revancha en casa”, concluyó. (Télam)
Y el “Muñeco” no paró con la lluvia de flores hacia sus dirigidos. “Los jugadores saben que no pueden dejar esta posibilidad, lograron sobreponerse a un partido muy duro en el que el calor y el clima en general iban a configurar un contexto muy adverso. Sin embargo, lo resolvieron jugando un gran encuentro por momentos”, afirmó.
Consultado por el partido desquite, Gallardo prometió que River intentará que todo el sacrificio que se hizo se pueda reflejar en cosas positivas en la revancha. También confió en que sus jugadores se recuperarán bien y estarán en condiciones de hace un buen partido. “Tigres es un equipo muy duro, creo que ellos esperaban sacar una diferencia para ir más tranquilos al Monumental, sabiendo que la situación va a cambiar en relación al juego”, intuyó.
Enzo Francescoli, director deportivo de los “millonarios”, fue otro de los que habló. “Si hace cuatro días me decían que íbamos a empatar en Monterrey quedaba feliz. Traer ese resultado fue bueno, especialmente después de un viaje tan largo, con el calor que hubo que sufrir y ante uno de los mejores equipos de la Copa”, entendió.
Para reforzar su idea, Francescoli evocó su experiencia como jugador en la final con América de Cali en 1996, que los “millonarios” también comenzaron de visitante. “Cuando fuimos a Colombia estábamos convencidos de que debíamos empatar y hasta perder por un gol, porque sabíamos que de local podíamos hacer la diferencia”, recordó.
Francescoli prefirió no hablar de que el “millo” no jugó un buen partido. “Nadie quema las naves cuando hay otro partido a una semana del que se disputó. Tigres quiso ganarlo, pero River lo controló sabiendo que aún tiene la revancha en casa”, concluyó. (Télam)