Cuatro dependencias integrarán la nueva policía judicial, que dependerá de los fiscales

Si en Tucumán se comete un delito usando medios informáticos, casi con seguridad va a queda impune. “Es evidente el crecimiento de hechos delictivos, no sólo en cuestiones de cantidad, sino también en la complejidad de los mismos”, consideró el ministro Fiscal Edmundo Jiménez, en la resolución en la que creó el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), comúnmente conocido como policía judicial.

Jiménez firmó ayer la creación del nuevo organismo, que colaborará con los fiscales de instrucción en la investigación y en la recolección de las pruebas. “La sociedad evoluciona, los delitos también, y Tucumán se encuentra trabajando en forma arcaica”, se describe en la resolución, que lleva el número 214, y en la que se define que es probable que esos casos no sean esclarecidos.

Organigrama

“Este nuevo organismo se convierte en un complemento indispensable de la función de los fiscales, debido a que garantiza procedimientos más eficientes, mecanismos dinámicos y la consecuente disminución de nulidades”, versa la resolución.

El ECIF tendrá una oficina de Coordinación, de la que dependerán cuatro áreas: el Cuerpo Médico Forense, el Departamento de Investigaciones, el Departamento de Informática Forense y el Departamento Criminalístico.

Funciones

La primera de estas áreas ya existe. El Cuerpo Médico Forense funciona en avenida Independencia y La Rioja, donde se encuentra la Morgue Judicial. Esta dependencia será reestructurada para que además de las autopsias que allí se realizan, se actualicen los servicios de ADN, toxicología, bioquímica forense, rayos X, entre otras especialidades.

Las otras tres dependencias tienen que ser creadas. El departamento de Investigaciones estará conformado por profesionales o expertos en distintas temáticas, como los contadores. “Por ejemplo, si el delito es cometido en una empresa o un negocio o a través de algún sistema financiero, es necesario tener la asistencia de contadores, de técnicos, de personas que tengan en su ciencia la administración de empresas, y que asesoren a los fiscales en la investigación”, explicó Jiménez.

El departamento de Informática Forense se encargará de tratar la evidencia digital, aplicando técnicas científicas y analíticas que permitan identificar, preservar, analizar y presentar datos obtenidos de teléfonos celulares y discos rígidos. En tanto, el departamento Criminalístico asesorará en balística, dactiloscopía, documentología, accidentología, psicología y fotografía.

La policía provincial

Este último departamento choca con tareas que ya lleva adelante la Policía de Tucumán, a través de la Policía Científica, dependiente de la Dirección General de Investigaciones Criminales y Delitos Complejos. Aunque Jiménez reconoció que existirían dos áreas con la misma función que dependen de distintos poderes del Estado, aseguró que serán los fiscales los que definirán a qué organismo recurrir para las investigaciones.

“Esto funciona así: la Policía de la provincia tiene a su cargo la prevención del delito, pero además es un auxiliar de la Justicia en las investigaciones que le encarga el fiscal a sus diferentes equipos”, describió el titular del Ministerio Público.

Los fiscales

Jiménez precisó que la función de los fiscales de Instrucción es recoger todas las causas que se inicien en las comisarías e intervenir en los distintos delitos, ordenando y revisando la prueba que se recolecte para llevarla a un juez de Instrucción, quien es en definitiva el que decide si una persona es procesada o no.

“O sea que nosotros estamos en un lugar intermedio entre la Policía que tiene que evitar que un delito se cometa y que cuando se comete lo presenta al caso ante el fiscal, y el juez que es el que resuelve qué se va a hacer”, manifestó.

El ECIF va a asesorar directamente a los fiscales. “Cuando se encarguen tareas a la Policía, tendrán que llevarla adelante a través de los especialistas de que disponen. Pero quien debe resolver, dentro del sumario, las pruebas y las medidas a tomarse, es el fiscal. Para eso también debe tener un asesoramiento propio, que lo dará esta policía judicial”, aseguró el ministro Fiscal.

Desde 2010

Hubo varios intentos para crear una Policía Judicial en la provincia. En 2010 fue Antonio Estofán, que en ese entonces era presidente de la Corte Suprema de Justicia, el que impulsó la creación a través de una ley de la Legislatura. Pero el proyecto quedó trunco, entre otros motivos por la oposición del gobernador José Alperovich. “Es un tema que tiene sus pros y sus contras”, había declarado el mandatario.

Jiménez retomó la iniciativa cuando asumió en el Ministerio Público Fiscal, en agosto del año pasado. Uno de sus logros fue la sanción de una ley que le otorga la posibilidad de disponer la creación de oficinas y de cargos, así como las normativas internas.

Córdoba cuenta con policía judicial desde 1958. Salta creó en 1984 el Cuerpo de Investigaciones Fiscales (CIF) y en 2008 la Ciudad Autónoma de Buenos Aires impulsó el cuerpo de Investigaciones Judiciales. Las otras provincias que tienen organismos investigativos en el Poder Judicial son La Rioja, Misiones, Catamarca, San Luis, Santa Cruz y Chubut, a las que desde ayer se sumó Tucumán.