BUENOS AIRES.- River llegó a la final de la Copa Libertadores después de 19 años y no tardaron en aparecer las cargadas en forma de memes y afiches para el eterno rival. Y en Boca, los distintos estamentos que componen la vida de cualquier club se lo tomaron de distinta manera.
El presidente "Xeneize", Daniel Angelici, no digiere aún aquella eliminación de una noche negra para el fútbol argentino en La Bombonera, cuando hinchas del local arrojaron gas pimienta a los jugadores del "Millonario".
"Se le dieron las cosas. El fútbol es así y tiene esas cosas que no están dentro de la lógica. Ganó los partidos que tenía que ganar, habiendo clasificado por milagro. Como hincha de Boca, hubiera preferido que River no llegue a la Final", se sinceró el dirigente.
El entrenador Rodolfo Arruabarrena, en cambio, tiene otro discurso y dice: "son las cargadas típicas, los festejos son los festejos, no soy de preocuparme por si un jugador grita o no, es fútbol y se vive de cargadas, mientras se mantenga un respeto. Los de River dirán que Boca abandonó y los de Boca, que River abandonó. Para nosotros no cambia nada el presente de River, sería estúpido de nuestra parte preocuparnos por ellos. Están ahí por mérito propio y punto, nosotros tenemos que ver nuestros objetivos". (Especial)