La nuera de Bachelet dice que dividía ganancias con dirigentes de la derecha

SANTIAGO DE CHILE.- Natalia Compagnon, nuera de la presidenta Michelle Bachelet, reveló que su empresa -Caval Limitada- dividía en partes iguales las ganancias obtenidas a partir de la venta de terrenos en la localidad de Machalí, con dos militantes de la derechista Unión Demócrata Independiente (UDI), Patricio Cordero y Juan Díaz, algo desconocido hasta ahora, y diluyó el papel de su esposo en la obtención de un crédito del Banco de Chile con el que se realizó esa operación. También habló de la participación de su marido, e hijo de Bachelet, Sebastián Dávalos, en la cuestionada reunión -por su relación familiar con la mandataria- con el Banco de Chile, entidad que facilitó el crédito para la compra de los terrenos. “Mi esposo no habló, sólo saludó, no intervino ni nunca supo del detalle del proyecto de los terrenos”, describió. Según reveló el diario “La Tercera”, Compagnon aceptó el acuerdo con los militantes de la UDI, aunque según declaró, “le parecía injusto” en sus condiciones. Agregó que fueron ellos quienes le proponen el negocio a su socio en Caval, Mauricio Valero: “Cuando ellos traen el negocio proponen un acuerdo que era: 50% de las utilidades del negocio para Patricio y Juan; el otro 50 para Caval. Ese acuerdo lo realizó Mauricio y yo no participé. Lo acepté aunque me pareció injusto, porque nosotros pusimos la cara y nuestro patrimonio y ellos sólo cooperaron en traer el negocio”, sostuvo. Afirmó desconocer si hay un contrato escrito de ese acuerdo y añadió que “a Juan Díaz se le pasaron dos cheques de Caval como garantía por aproximadamente 800 millones de pesos (U$S 1,3 millón), a fines de febrero o primeros días de marzo, los cuales están a su nombre y fueron firmados por Mauricio, pero yo señalé que no los entregaría porque no teníamos fondos”.

Cordero fue administrador municipal de Joaquín Lavín -ex candidato presidencial de la derecha- mientras éste fue intendente de Santiago y Las Condes; en tanto que Díaz jugó un papel relevante durante el denominado caso Spiniak en 2003, en el cual se involucró a Jovino Novoa, miembro fundador de la UDI, en una red de prostitución infantil. Los terrenos fueron adquiridos a precios mínimos y luego, vendidos a valores exponenciales cuando esas tierras se destinaron a una urbanización.

Con respecto a su esposo, uno de los hijos de la Presidenta de Chile, señaló que “sí trabajó para Caval en algunos proyectos, en todo caso previamente a su cargo como Director Sociocultural del Palacio de La Moneda”. Dávalos declaró durante cuatro horas ante la Justicia chilena, imputado por supuestos ilícitos de tráfico de influencias. Llegó a la Fiscalía de la sureña ciudad de Rancagua en medio de un estricto operativo de seguridad policial y no formuló declaraciones.

Este polémico negocio -habría sido por U$S 15 millones-, otros casos de corrupción de dirigentes políticos le ha costado a Bachelet una caída de su imagen. (Télam-DPA)