Imaginando un nuevo billete
Sería interesante que los lectores observaran este posible nuevo billete de 1.000 pesos. Si bien no solucionaría el pago de la deuda externa, al menos, aliviaría las billeteras de aquellos que tienen, y simplificaría el trabajo de los cajeros. Acerco esta obra de mi autoría, que es simple, pero elocuente en su significado. Los saludo atentamente.
Mario Rubén Díaz
Rondeau 1.020
San Miguel de Tucumán
MÁQUINA DE BARRO
La máquina de arrojar barro tiene desde siempre una sola dirección: la política. Por ejemplo, en Brasil, de ese monstruo que es la corrupción, se muestra una sola pata, la política. ¿Y la pata empresarial? Bien, gracias. Si se habla de codicia y autoritarismo, se pone la mirada en la política. ¡Por favor! Vean los precios en los supermercados; eso sí que es codicia, y además son autoritarios cuando nos obligan a consumir lo que ellos quieren. Sí, por ahí aparece un político que deforesta o contamina, conducta repudiable. Se los identifica, que no está mal. Si el infractor es del sector privado, escudados en tal o cual entidad, no los nombran. Los que tienen el síndrome de la oposición recalcitrante dicen: “La segmentación en retenciones no va a andar; el Ahora 12, tampoco”; precios cuidados, menos. Se oponen a que el fiscal Carlés sea miembro de la Corte Suprema, desearán que asuma como tal el señor Quasimodo de Nueva York. Hasta que la Justicia resuelva el caso del fiscal fallecido, sería interesante hablar de dos fiscales que, como tienen bajos sueldos, “salen a trabajar” como empleados en la seguridad del club xeneize, descuidando así las causas que tienen a su cargo. Del incendio caratulado como intencional en Iron Mountain, donde se quemaron importantes documentos de banqueros y empresarios, lo lamentable es la muerte de ocho hombres y de dos rescatistas. Del Foro internacional Emancipación e Igualdad, es una pena que no hayan participado intelectuales de la talla de los señores Kovadloff y Aguinis o periodistas como J. Lanata o N. Castro. En la cena de la Sociedad Rural, el cubierto costaba $50.000. Un amigo de Macri dijo que lo recaudado sería destinado para los inundados. ¡Qué tal! Espero que los asistentes a esa comida de lujo se presenten ante el próximo gobierno de turno y sin importarle el signo político que tenga digan: “Dicten leyes que favorezcan a ese sector denominado ‘gente’ y nosotros apoyaremos y colaboraremos”. Palabras del papa Francisco respecto de los trabajos mal pagados y no regulados: “esto se llama esclavitud, eso se llama explotación. Eso no es humano, no es cristiano”. Ah, también dijo: “No saquemos el cuero al prójimo”.
Hugo Vallejo
Manuel Estrada 3.850
San Miguel de Tucumán
FÚTBOL PARA TODOS
“Cuando la seca es larga no hay matrero que no caiga”. Frase del Martín Fierro que podría encuadrarse ante las declaraciones del presidente de la Liga Tucumana de Fútbol (LTF) y otros dirigentes (LA GACETA Deportiva del 28/3), respecto de los aportes que reciben o debieran recibir de “Fútbol para todos” los clubes de la distintas categorías y torneos que hace disputar la AFA a lo largo y ancho del país. El reclamo no es nuevo; si nos retrotraemos a comienzos de la década del 60, cuando el diputado santafesino Agustín Rodríguez Araya y el correntino Romero Feris (padre) reclamaron ante la AFA derechos que les correspondían al fútbol del interior. Planteo que volvieron a repetir años más tarde el cordobés Amadeo Nuccitelli y el siempre recordado Natalio Mirkin. En 2011 reactualiza el mismo reclamo el entonces diputado Gerónimo Vargas Aignasse, a quien acompañó en esta encrucijada el mendocino Daniel Vila. Se planteó la necesidad de un trato igualitario y un reparto equitativo de los fondos de Fútbol para Todos para los casi 3.000 clubes nucleados en centenares de ligas del interior afiliadas a la AFA. En esa ocasión, en una vergonzante muestra de sumisión y de obediencia debida a Grondona, declararon que el planteo realizado por el entonces representante del club Sportivo Guzmán era una ocurrencia particular y que de ninguna manera compartían el pedido, tanto la LTF como el resto de clubes afiliados a esta. Resulta que ahora, luego de 36 meses, “descubren” que los números no cierran, para terminar dándole la razón al mismo que desacreditaron sin miramientos y sin siquiera analizar esta cruda realidad que viven las instituciones del fútbol.
Ysmael Díaz
Mario Bravo 247
Banda del Río Salí
Sin ayuda
Nací y me crié en Finca Sayago, departamento de Lules. Padecí todas las inundaciones y nunca me ayudaron. Los políticos hacen política, no me ofrecieron siquiera agua y eso que todos sabían que estaba en mi casa. Todas las donaciones llegaban hasta las vías del ferrocarril Belgrano; usurpadores cortaron el camino y me impidieron salir con mi vehículo a comprar alimentos. Hice la denuncia en el 911, me ignoraron en la comisaría de Lules.
Ángela Aurora Gramajo
Finca Sayago
Lules
Inseguridad
No es para nada extraño que quienes viven en la calle Moreno, desde su inicio en la 24 de Septiembre hasta su prolongación más allá de la avenida Roca, sufran robos -como el que les ocurrió a los comerciantes que fueron desvalijados en Semana Santa- y arrebatos de todo tipo. Casi a diario, los delincuentes tienen su festín. Son incontables las sustracciones de los estéreos de los autos que sus dueños dejan estacionados a lo largo de esa arteria. A lo que hay que agregarles los arrebatos que sufren los ciudadanos de a pie que se atreven a caminar por la zona. Los ladrones se llevan de todo: celulares, bolsos, mochilas, bicicletas, motos, etcétera. Muchos de estos casos, desgraciadamente, no son denunciados. Y es cada vez más firme la certeza de quienes habitan esta calle, de que se trata, literalmente, de una zona liberada, ya que las tropelías se producen a cualquier hora del día. La policía, ausente sin aviso. Hemos visto que la Municipalidad colocó semáforos en las esquinas de Moreno y San Lorenzo y en la intersección de aquella con Las Piedras. Sería importantísimo que las autoridades instalaran cámaras de seguridad en esos aparatos de control vial. Si bien esto no va a impedir la acción de los delincuentes, servirían para, en cualquier caso, identificarlos y que, con esas imágenes, la Policía encarara una investigación más certera. La calle Moreno, sostienen los vecinos que hace muchos años viven en el lugar, era tranquila. Pero es tierra de nadie desde que los ladrones que “trabajaban” en el parque 9 de Julio, se “trasladaron” a esta arteria tras la intensificación de los controles policiales en el paseo más importante de la ciudad. La ausencia o la casi inexistente vigilancia de los agentes del orden habilitó a los delincuentes a seguir robando y amenazando impunemente a la vecindad.
Marcelino Alberto Jugo
ÁNGEL PAGANELLI
Hace unos días escuché al concejal Avignone decir que había presentado un proyecto para que un sector de una avenida llevara el nombre del fiscal Strassera, quien sólo cumplió con su deber. De quien debería acordarse es de una persona que sí está ligada a la historia de Tucumán. Se trata de mi bisabuelo, el fotógrafo Ángel Paganelli, gracias a cuyas fotografías podemos conocer el pasado de nuestra ciudad. Además, gracias a su fotografía de la Casa Histórica se pudo la reconstruir después de haber sido prácticamente destruida. Como homenaje a su memoria, alguna calle o plaza debería llevar su nombre.
Jorge Miguel Wolters
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BACHES
Después de las últimas lluvias, las calles se asemejan a una postal de la Franja de Gaza. Si esquiva un pozo entra en otro y si está con agua no sabemos si tiene 10 cm, 15 o un metro y medio. Hoy, con las cubiertas de perfil bajo eso le cuesta aproximadamente $ 3.000 (si no rompe algo más). En países de avanzada este costo lo absorbe la municipalidad, el condado, el distrito o como se llame, pero aquí sería como pedirle manzanas a un cocotero. Estos días un lector hizo alusión al tema sobre la ineficiencia de los trabajos de bacheo por la impericia de los operarios que los realizan. Cada cuadrilla debería tener un responsable capacitado y los resultados serían otros, porque cuando el director es bueno la orquesta toca bien.
Alberto Antonio Segulja
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LA PLAZA DE YERBA BUENA
El martes 7 del corriente, fui a caminar por la plaza principal de Yerba Buena, la que se encuentra frente la iglesia Nuestra Señora del Valle, mientras caminaba disfrutando de una bella mañana soleada, observé con desagrado el estado de abandono en que se encuentra dicha plaza. Habían desmalezado, pero al césped lo dejaron tirado sobre la vereda o sea que yo caminaba sobre un colchón de pasto seco. Los tachos para residuos que se encuentran en cada esquina estaban colmados de basura, daban un aspecto desagradable y se sentía por momentos olores nauseabundos; mientras continuaba mi caminata comencé a sentir una sensación de amargura al ver tanto abandono a mi alrededor, para sumarle al mal aspecto de este paisaje desolador observé con desagrado un basurero importante en la esquina que rodea la comisaría, Cariola y San Martín (dicho de paso esta basura está en forma permanente) y para darle la última pincelada a este cuadro tan desagradable están las chatarras de los autos chocados, estacionados frente a la plaza sobre calle San Martín, brindando un aspecto deprimente y desolador. Con todo respeto le pregunto al intendente Toledo, si no tiene gente disponible para mantener como corresponde la limpieza de la plaza. ¿La gente del plan Trabajar qué tarea cumple, ya que no se la ve por ningún lado? ¿No se le ocurre ponerlos a trabajar de placeros, por ejemplo, así como también a limpiar los basurales que se encuentran alrededor? Y por último, le pido, por favor, que haga mejorar el predio de la comisaría, que es bastante deprimente y como lamentablemente se encuentra frente a la plaza, nos contamina el paisaje.
Graciela Marangoni
SIN SERVICIO DE TV
Hace 17 días, luego de que cayera la última tormenta se suspendió el servicio de DirecTV. Hablamos a un 0800, donde siempre nos atendió gente muy amable y respetuosa para dejar sentado el reclamo, siempre con la promesa de que dentro de las 72 horas el servicio técnico de Tucumán se pondría en contacto. Hasta el día de la fecha, el servicio técnico brilla por su ausencia. Es increíble que después de haber sido socio durante seis años, con un abono que no es de los más baratos, no haya tenido una explicación ni una disculpa. Realmente una vergüenza.
Daniel Lamagni
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INDOLENCIA
La indignación y el reclamo legítimo se ven pisoteados cuando hacemos silencio ante las injusticias, la desvergüenza y la pedantería de algunos funcionarios del gobierno, y aceptamos los “adornos” impuestos que son nada más que las muestras de incongruencia que impiden que salgan a la luz todas las dimensiones de los padecimientos por los que nos quejamos. Una lacerante apatía de funcionarios abocados a la tarea de promocionarse para ser elegidos en las próximas elecciones ocupan su tiempo en maquillarse y entrenar sonrisas para salir en costosos carteles. Olvidaron ya el sufrimiento de las personas que perdieron todo en el pasado desastre de las inundaciones que no deja de latir todavía en medio del barro, la desesperanza y el maltrato. La espera prometida para alcanzar el alivio se va haciendo larga para mitigar el dolor, agravado por la falta de contención y el soportar algunos humillantes comentarios desubicados, desnudaron aún más la ilusión de los damnificados. Quizás podrían pensar que lo más conveniente, ahora, sería dejar el discurso atrás y enterrar la necedad, la soberbia y la ineptitud destructiva, y la búsqueda de soluciones que eluden responsabilidades. Cuando el discurso deje de ser la frontera para demostrar que hay coherencia entre nuestras palabras y nuestros pasos, como hasta ahora no ha pasado, no hará falta de gastar tanto en cosméticos para resultar simpáticos y confiables. “De tanto ver triunfar las nulidades, de tanto ver prosperar la deshonra, de tanto ver agigantarse los poderes en manos de los malos, el hombre llega a desanimarse de la virtud, a reírse de la honra, a tener vergüenza de ser honesto”, decía Ruy Barbosa de Oliveira.
Pablo José Giunta
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LA SAT
De los trabajos de la SAT, realizados hace un mes en la cuadra de Jujuy al 1.200, pareciera que soy la única damnificada, pues la vereda está destruida, hay escombros, y la tierra que sacaron para colocar el medidor de agua la pusieron donde debe entrar el auto. El caos reinante hace que gente inescrupulosa, cuando el semáforo de avenida Independencia y Jujuy está en rojo, suba a la vereda. Rompieron y hundieron donde está colocado el medidor. El martes llegué a mi domicilio cuando ya estaba oscuro, trastabillé y me torcí el pie al entrar a casa. La falta de interés por el prójimo, la desidia, la falta de apego al trabajo acarrean estas consecuencias, para mí nefastas porque soy jubilada docente y pago mis impuestos al día. Mientras no tengamos conciencia de que para tener calidad de vida se necesita cumplir con el deber, vivir de la mejor forma posible, respetándonos, así como comenzar y terminar un trabajo y no destruir y abandonar, seguiremos en esta sociedad lamentándonos y sin lograr un mundo mejor. ¿Cuánto más debo esperar para tener en paz mi alma y que no me tenga que lamentar que haya un accidente? Muchos ya se acostumbraron a tener de a gotas el agua y que esta no sea potable, a que se desborden las cloacas (el líquido llegaba hasta media calzada oeste por Jujuy. Los tucumanos merecemos cuidar del agua y vivir con dignidad y no como lo estamos haciendo hasta ahora.
Delia Nora Arias
aniagus_ [email protected]