08 Abril 2015
EN CONTRA. La carrera docente no sería aprobada por unanimidad hoy. la gaceta / foto de Inés Quinteros Orio (archivo)
La sexta sesión plenaria de la Asamblea Universitaria, que se realizará desde las 8 de hoy en el centro cultural Eugenio Virla de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT), promete ser caldeada. No sólo porque afiliados a la Asociación de Docentes e Investigadores de la UNT (Adiunt) se movilizarán en reclamo por la aprobación de la carrera docente, sino también porque el dictamen de la comisión que debatió este eje, además de ser cuestionado por el gremio, no cuenta con el aval de la totalidad del cuerpo a cargo de la reforma estatutaria.
Los 11 asambleístas estudiantes militantes de la agrupación Franja Morada (FM) presentarán un proyecto que, en síntesis, aconseja mantener, con algunos cambios, la modalidad mediante la cual se vinculan hoy los docentes con la UNT.
La parte resolutiva del texto, que presentarán sobre tablas, recomienda, entre otros: “mantener el actual sistema de acceso, promoción y ascenso docente previsto en el actual estatuto (...). Establecer (...) un sistema de merituación de antecedentes y oposición que deberá ser reglamentado por el (Consejo Superior) (...). Incorporar en el jurado para concurso (...) un estudiante como miembro pleno”.
La carrera docente es un reclamo que los educadores de la UNT enarbolan desde 2007. Uno de los argumentos de los docentes tiene que ver con que son los únicos empleados del Estado que no tienen estabilidad laboral; en otras palabras, arguyen que el docente que pierda un concurso queda en la calle. En su dictamen, los “morados” proponen una solución para salvar esto. “Crear un fondo de desempleo para docentes que, al perder su concurso, se vean obligados a abandonar el vínculo laboral-académico que tenían con la Universidad, cuyo criterio de otorgamiento deberá ser definido y reglamentado por el (Superior)”.
El proyecto de FM también propone que la UNT arbitre los medios para establecer un sistema de posgrados gratuitos para los educadores. Adiunt había reclamado esta cuestión, en especial cuando se conoció que el dictamen de la comisión de Carrera Docente estipula que para acceder a los cargos de profesor titular, asociado o adjunto el aspirante debe contar con formación en posgrado.
Falta de idoneidad
Junto al proyecto, FM emitió un comunicado en el que arremete contra la carrera docente. “La permanencia en un cargo, garantizada por una simple evaluación cada cinco años, sin posibilidad de concurrencia de otros postulantes, congela el statu quo de la planta docente impidiendo su renovación y formando una casta que en vez de estar al servicio de la UNT se sirve de ella”, indicó el titular de la regional, Agustín Del Pero.
El proyecto que la comisión de Carrera Docente elevará al plenario hoy estipula que el ingreso y el ascenso se realizará mediante concursos de antecedentes y de oposición, y prevé una evaluación cada lustro para la permanencia. En caso de que una evaluación resulte negativa, el docente deberá enfrentar otra a los dos años. Si no la supera, se llama a concurso del cargo; pero si, por el contrario, obtiene un resultado satisfactorio, completa el período de cinco años -es decir, se desempeña como docente otros tres- antes de enfrentar una nueva evaluación. “Más grave aún es que un docente que no superó la evaluación siga al frente del aula, formando a los futuros profesionales durante dos años más, cuando ya se ha comprobado su falta de idoneidad”, dijo Del Pero.
Los 11 asambleístas estudiantes militantes de la agrupación Franja Morada (FM) presentarán un proyecto que, en síntesis, aconseja mantener, con algunos cambios, la modalidad mediante la cual se vinculan hoy los docentes con la UNT.
La parte resolutiva del texto, que presentarán sobre tablas, recomienda, entre otros: “mantener el actual sistema de acceso, promoción y ascenso docente previsto en el actual estatuto (...). Establecer (...) un sistema de merituación de antecedentes y oposición que deberá ser reglamentado por el (Consejo Superior) (...). Incorporar en el jurado para concurso (...) un estudiante como miembro pleno”.
La carrera docente es un reclamo que los educadores de la UNT enarbolan desde 2007. Uno de los argumentos de los docentes tiene que ver con que son los únicos empleados del Estado que no tienen estabilidad laboral; en otras palabras, arguyen que el docente que pierda un concurso queda en la calle. En su dictamen, los “morados” proponen una solución para salvar esto. “Crear un fondo de desempleo para docentes que, al perder su concurso, se vean obligados a abandonar el vínculo laboral-académico que tenían con la Universidad, cuyo criterio de otorgamiento deberá ser definido y reglamentado por el (Superior)”.
El proyecto de FM también propone que la UNT arbitre los medios para establecer un sistema de posgrados gratuitos para los educadores. Adiunt había reclamado esta cuestión, en especial cuando se conoció que el dictamen de la comisión de Carrera Docente estipula que para acceder a los cargos de profesor titular, asociado o adjunto el aspirante debe contar con formación en posgrado.
Falta de idoneidad
Junto al proyecto, FM emitió un comunicado en el que arremete contra la carrera docente. “La permanencia en un cargo, garantizada por una simple evaluación cada cinco años, sin posibilidad de concurrencia de otros postulantes, congela el statu quo de la planta docente impidiendo su renovación y formando una casta que en vez de estar al servicio de la UNT se sirve de ella”, indicó el titular de la regional, Agustín Del Pero.
El proyecto que la comisión de Carrera Docente elevará al plenario hoy estipula que el ingreso y el ascenso se realizará mediante concursos de antecedentes y de oposición, y prevé una evaluación cada lustro para la permanencia. En caso de que una evaluación resulte negativa, el docente deberá enfrentar otra a los dos años. Si no la supera, se llama a concurso del cargo; pero si, por el contrario, obtiene un resultado satisfactorio, completa el período de cinco años -es decir, se desempeña como docente otros tres- antes de enfrentar una nueva evaluación. “Más grave aún es que un docente que no superó la evaluación siga al frente del aula, formando a los futuros profesionales durante dos años más, cuando ya se ha comprobado su falta de idoneidad”, dijo Del Pero.
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