07 Abril 2015
BUENOS AIRES.- El abogado Alejandro Vandenbroele se presentó ayer en la Justicia pero se negó a contestar preguntas en un caso por evasión. El nombrado por su ex mujer como supuesto testaferro de Amado Boudou en el caso de la ex imprenta Ciccone Calcográfica, presentó un escrito ante el juez penal tributario Javier López Biscayart.
A Vandenbroele se lo investiga por la supuesta apropiación indebida de cargas sociales de empleados de la ex Ciccone.
En el escrito que presentó ante el juez, aseguró que él no se encargaba del pago de sueldos “y de dichas cuestiones”, según informó el portal Infobae.
Vandenbroele resaltó que él trabajaba en las oficinas de The Old Fund, la sociedad que se quedó con la imprenta, y que quien gestionaba la planta era Máximo Lanusse, ex gerente de la firma, quien presentó su descargo el martes pasado. Ambos están imputados por el mismo delito: el no pago de aportes provisionales de más de 1,5 millón de pesos.
Lanusse planteó la supuesta incompetencia del juez López Biscayart porque el domicilio fiscal de la imprenta es en la provincia de Buenos Aires. De ser favorable al planteo de Lanusse, la causa recaería en el juzgado federal de San Isidro, a cargo de la magistrada Sandra Arroyo Salgado, ex esposa del fiscal Alberto Nisman, quien apareció muerto el 18 de enero, luego de denunciar a la presidenta, Cristina Fernández, por encubrimiento en la causa AMIA.
Vandenbroele logró hace una semana y media posponer la indagatoria tras alegar que no había podido interiorizarse del expediente por los 26 días que pasó en prisión, en Mendoza.
Vestido de sport, llegó pasadas las 11 al juzgado de la calle Sarmiento, a metros del Obelisco. Su abogado, Germán Soria, había llegado temprano. Ambos se retiraron apenas pasado el mediodía.
Vandenbroele tiene otra cita con la Justicia este jueves: será ante el juez Sebastián Casanello por la reestructuración de la deuda de Formosa, donde The Old Fund cobró una comisión de $ 7,6 millones de parte del gobierno provincial de Gildo Insfrán. (Infobae.com)
A Vandenbroele se lo investiga por la supuesta apropiación indebida de cargas sociales de empleados de la ex Ciccone.
En el escrito que presentó ante el juez, aseguró que él no se encargaba del pago de sueldos “y de dichas cuestiones”, según informó el portal Infobae.
Vandenbroele resaltó que él trabajaba en las oficinas de The Old Fund, la sociedad que se quedó con la imprenta, y que quien gestionaba la planta era Máximo Lanusse, ex gerente de la firma, quien presentó su descargo el martes pasado. Ambos están imputados por el mismo delito: el no pago de aportes provisionales de más de 1,5 millón de pesos.
Lanusse planteó la supuesta incompetencia del juez López Biscayart porque el domicilio fiscal de la imprenta es en la provincia de Buenos Aires. De ser favorable al planteo de Lanusse, la causa recaería en el juzgado federal de San Isidro, a cargo de la magistrada Sandra Arroyo Salgado, ex esposa del fiscal Alberto Nisman, quien apareció muerto el 18 de enero, luego de denunciar a la presidenta, Cristina Fernández, por encubrimiento en la causa AMIA.
Vandenbroele logró hace una semana y media posponer la indagatoria tras alegar que no había podido interiorizarse del expediente por los 26 días que pasó en prisión, en Mendoza.
Vestido de sport, llegó pasadas las 11 al juzgado de la calle Sarmiento, a metros del Obelisco. Su abogado, Germán Soria, había llegado temprano. Ambos se retiraron apenas pasado el mediodía.
Vandenbroele tiene otra cita con la Justicia este jueves: será ante el juez Sebastián Casanello por la reestructuración de la deuda de Formosa, donde The Old Fund cobró una comisión de $ 7,6 millones de parte del gobierno provincial de Gildo Insfrán. (Infobae.com)
Lo más popular
