Una larga espera

La espera se hizo eterna, pero al final llegó el día que Maximiliano Rodríguez estuvo esperando desde hace más de un años. Lejos en el tiempo quedó aquel 23 de marzo de 2014, cuando en el fatídico encuentro ante Juventud Unida de Gualeguaychú sufrió una grave lesión en la rodilla izquierda que lo marginó del equipo durante 378 días.

Como es un optimista por naturaleza, “Maxi” nunca bajó los brazos y en cada práctica se esmeró al límite para demostrar, el día que vuelva a jugar, que puede aportar lo suyo para que San Martín logre revalidar su chapa de candidato. “La espera me resultó eterna, pero las ganas de volver a jugar oficialmente me permitieron, en cada entrenamiento, avanzar un pasito. Ahora está en mí poder ganarme un lugar en el equipo. Sé que no será nada fácil, pero me sobra confianza para encarar este nuevo desafío que se me presenta en mi carrera”, resaltó el volante nacido hace 26 años, en San Pablo.

No duda en considerar que estar tanto tiempo inactivo es una prueba a la que te pone Dios. “Es demasiado complicado mentalizarte que tenés que estar tanto tiempo sin jugar. En mi caso, el tema se complicó porque ya había sufrido la rotura de ligamentos cruzados de esa rodilla. Eso hizo que se prolongara mi regreso a la actividad. El apoyo incondicional de mi familia y de mis compañeros fueron fundamentales para que hoy pueda volver a jugar”, acotó.

Rodríguez reconoce que esta nueva chance le llega en un momento complicado porque el equipo todavía no logró mostrar el juego que permita ilusionar al hincha “santo”. “Es indudable que no arrancamos el torneo en la forma deseada. Lo sabemos y estamos dispuestos a dar vuelta la página y empezar a cambiar la imagen que dejamos en los encuentros ante Concepción FC y Zapla. Hoy puede ser una excelente ocasión para comenzar a revertir la situación y de este modo empezar a pagar la deuda que tenemos con nuestra gente”, señaló el futbolista que en Salta reemplazará a Cristian Piarrou.

En otro momento de la charla con LG Deportiva, “Maxi” confesó que le resultó un verdadero calvario tener que mirar los partidos desde la platea. “Fue una sensación muy dolorosa no poder colaborar con mis compañeros a conseguir los resultados esperados. Es algo que no le deseo a nadie. Por suerte, desde hoy, esto formará parte de mi pasado”, aseveró quien hoy cumplirá la función de doble 5 junto a Lucas Bossio.

“Tengo una ansiedad tremenda para que el partido empiece. Imagino un regreso victorioso desde Salta”, indicó.

Los tres puntos que esta tarde se jugarán en el “Gigante del Norte” frente a Gimnasia y Tiro, son claves para el futuro y Rodríguez lo sabe perfectamente. “Es natural que el hincha muestre su disgusto por el rendimiento del equipo. No se consiguió cumplir con las expectativas. Este grupo tiene mucha autocrítica, por eso durante la semana se habló bastante sobre el tema y se redobló la apuesta”, acotó.