26 Marzo 2015
Los médicos del Hospital del Niño Jesús autorizaron a la adolescente de 13 años que había sufrido un abuso sexual en un cañaveral de la comuna de Colombres, a que regrese a su casa. Y ayer a la mañana, la jovencita se retiraba del hospital.
De todas maneras, la adolescente continuará un tratamiento ambulatorio con asistencia médica y psicológica durante 30 días más. “Ya está mejor. Ella quiere volver a la escuela, pero le recomendaron que todavía no, que espere”, comentó su papá.
Respecto a la investigación del hecho, el hombre dijo que no recibió demasiada información porque hay secreto de sumario. “Ahora mi hija tiene que declarar en cámara Gesell, eso tiene que ser mañana (por hoy) o el viernes”, agregó el padre de la adolescente.
El ataque ocurrió hace una semana, el jueves a las 14, cuando la jovencita regresaba de acompañar a su prima a la escuela. El agresor la abordó cuando caminaba junto a una prima de su misma edad y un bebé de dos años, en un callejón rodado por cañaverales.
Según relataron los familiares de la víctima, el hombre los amenazó con un arma de fuego y los obligó a esconderse entre las cañas, donde cometió el ataque sexual.
Una tía de la jovencita contó que el comisario Domingo Pérez se resistió a tomarles la denuncia en ese momento. Esa reacción provocó la furia de los habitantes de Colombres, quienes el lunes incendiaron la comisaría. Como consecuencia, Pérez fue desplazado.
De todas maneras, la adolescente continuará un tratamiento ambulatorio con asistencia médica y psicológica durante 30 días más. “Ya está mejor. Ella quiere volver a la escuela, pero le recomendaron que todavía no, que espere”, comentó su papá.
Respecto a la investigación del hecho, el hombre dijo que no recibió demasiada información porque hay secreto de sumario. “Ahora mi hija tiene que declarar en cámara Gesell, eso tiene que ser mañana (por hoy) o el viernes”, agregó el padre de la adolescente.
El ataque ocurrió hace una semana, el jueves a las 14, cuando la jovencita regresaba de acompañar a su prima a la escuela. El agresor la abordó cuando caminaba junto a una prima de su misma edad y un bebé de dos años, en un callejón rodado por cañaverales.
Según relataron los familiares de la víctima, el hombre los amenazó con un arma de fuego y los obligó a esconderse entre las cañas, donde cometió el ataque sexual.
Una tía de la jovencita contó que el comisario Domingo Pérez se resistió a tomarles la denuncia en ese momento. Esa reacción provocó la furia de los habitantes de Colombres, quienes el lunes incendiaron la comisaría. Como consecuencia, Pérez fue desplazado.
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