“Hay que estar en la piel de Jolie para entenderla”

La impactante decisión de la superestrella de Hollywood, Angelina Jolie, de 39 años, de extirparse esta vez los ovarios (hace dos años se sometió a una doble mastectomía) para evitar el cáncer, genera cierta controversia.

Mujeres tucumanas que sufrieron la enfermedad y que siguen luchando para sobrevivir, tienen diferentes opiniones sobre la actitud de la bellísima actriz.

“Angelina lo hizo porque heredó la mutación genética de su abuela, madre y tía que predispone al desarrollo de cáncer, cumplió su sueño de ser madre, tiene fácil acceso a una atención médica de excelencia y porque quiere ver crecer a sus hijos y nietos... Con su decisión se debe sentir liberada para disfrutar de su matrimonio y de su familia. En buena hora. Yo tuve tres episodios de cáncer (tiroides, útero y mama) y debí soportar las terapias porque la anestesia me hace muy mal... Hay que estar en la piel de Angelina para entenderla...”, reflexionó Alicia Castillo, presidenta del grupo Ascenso por la Vida-Tucumán.

Mutilación innecesaria
Su compañera, Ana Selis, a quien hace 10 años le sacaron un tumor de mama, recordó que al recibir el diagnóstico el mundo se le vino abajo. “Sentí que un tsunami arrasaba con mi vida porque la palabra cáncer es sinónimo de muerte. Yo tenía antecedentes familiares. Con la operación superé la enfermedad. Pero tengo una hija de 29 años, que cuando cumpla los 30 le haré hacer los estudios para ver si heredó la predisposición y para que comience con los controles. Creo que un vaciamiento tan grande, como el de Jolie, es una mutilación innecesaria, porque cuando uno se hace los controles de rutina ningún cáncer es imbatible”, insistió convencida.

En cambio, Irma Lizondo, sostiene lo contrario. “Si tuviéramos la posibilidad de hacernos los estudios y las operaciones de Angelina se podrían evitar muchas muertes jóvenes”, apuntó la mujer que tuvo cáncer de útero y de vagina con recidiva. Recordó el caso de una amiga de 40 años, que sufrió un cáncer muy agresivo de mama y de útero, al año de huesos, al año siguiente de estómago y finalmente falleció a los 44 años. “Ella tenía antecedentes familiares: madre, hermana y creo que abuela. Por eso estoy de acuerdo con lo que hizo Angelina Jolie”, expresó.

Una cirugía con límites
Sobre el tema, el ginecólogo Agustín Apás Pérez de Nucci aclaró que el concepto de riesgo familiar cambió mucho, y que hoy puede establecerse con mucha precisión el nivel real del riesgo de desarrollar cáncer.

“Una extirpación de ovarios -indicó- se recomienda sólo como el fruto final de un largo proceso de asesoramiento con un equipo multidisciplinario”. Añadió que las cirugías de disminución de riesgo -este es el nombre correcto- sólo se indican en casos de mutación genética demostrada, y con alto porcentaje de riesgo.

Cuándo se justifica
“La extirpación de ovarios se justifica cuando la carga genética es muy alta, porque el cáncer de ovarios no es detectable sino cuando ya es irremediable, y porque hay casos en los que incluso se extirpan para prevenir el propio cáncer de mama, ya que los ovarios secretan las hormonas que influyen en su desarrollo”. Agregó que hay muchas opciones, y en nuestra provincia funcionan muy buenos equipos especializados (incluso en el sistema público de salud) que brindan el asesoramiento.