Viaje en busca del sol

Esta travesía por el norte recorre sitios de belleza agreste. A Molinos se llega desde Cafayate (a 116 kilómetros) por la ruta 40, que no está pavimentada. Durante el recorrido se puede hacer un alto en el Monumento natural Quebrada de las Flechas, ubicado sobre la ruta Es un hermoso punto panorámico para hacer unas fotos. Una vez en el pueblo (declarado Lugar Histórico Nacional) se destaca la iglesia construida en 1639. Además posee el primer criadero de vicuñas en semi cautividad. Aquí hay hosterías donde dormir y comer.

La localidad de Seclantás (foto del medio) pertenece al departamento Molinos y se encuentra camino a Cachi (a 34 kilómetros). Se accede desde la ruta 40 por la provincial 55. “Estos días no hace frío y siempre sale el sol, sobre todo por la mañana”, explica Fernanda Funes de la hostería La Rueda. Una habitación doble con baño privado y desayuno cuesta $350 y $300 con baño compartido. Una single con baño privado y desayuno, $200. Fernanda recomienda la visita al pueblo y a la laguna Brealito (foto de abajo) ubicada a 17 kilómetros de allí. Es un sitio muy pintoresco para pasar la tarde. “También se puede hacer el camino de los artesanos, que son 7 kilómetros de recorrido por las casas de quienes tejen y venden sus productos”. Si te gustan las caminatas hay salidas hacia las Cuevas de Acsibi (también conocido como Valle de las Cuevas), una caminata de 4 horas que recorre paisaje únicos. Desde Seclantás se llega a Cachi. Es un apacible pueblo serrano con una variada oferta gastronómica y de alojamientos. Una habitación doble ronda los $ 940 con desayuno y cochera incluidos. Una triple, $ 1.060. Se puede almorzar y cenar a la carta. Por ejemplo, una empanada de carne cuesta $8; una humita, $15; y un plato de pastas, $60. Se pueden visitar bodegas y vinotecas, probar una tabla de quesos y degustar un vino de altura. Hay que conocer la iglesia, declarada Monumento Histórico Nacional (foto de arriba a la izquierda). 

Para llegar a Salta capital desde Cachi se toma por la ruta 33 que se atraviesa la Cuesta del Obispo. En este camino se encuentra la famosa recta del Tin Tin. Son 18 kilómetros pavimentados, rodeados de un paisaje de cactus. Desde allí hay que circular por la ruta 9 hasta la 34 y luego empalmar con la 66 y retomar la ruta 9 que nos llevará hasta San Salvador de Jujuy. Para llegar a Purmamarca hay que seguir por la ruta 9. 

Se encuentra en el departamento de Tumbaya y su nombre significa “Pueblo de tierra virgen”. Hay alojamientos de todas las categorías. Una habitación doble-suite ronda los $ 2700; una doble común, los $ 1700, y una family-casa, los $ 2800. Una cabaña para cuatro personas vale $ 2100. “Aquí recomendamos visitar el paseo de los Colorados, la iglesia de Santa Rosa y el mercado artesanal”, explica Cecilia Álvarez, del hotel Casa de Adobe. En el Rincón de Claudia Vilte se puede degustar un lomo de llama con papas andinas y queso de cabra por $ 99, una cazuela de cabrito por $ 75 o un filet de llama con papas andinas y salsa cerafina (cebolla, queso de cabra, morrón y maicena) por $ 110. De postre, un budín de quinoa (el ingrediente de moda) a $ 30 o quesillo con dulce de cayote y nueces por $ 45. “Estos días estuvieron soleados y no hace frío”, cuenta Marcos Alancay, que atiende ese lugar.

Si ya estás en Purmamarca, entonces, tenés que conocer las Salinas Grandes a las que se llega por la ruta 52 (unos 126 kilómetros) por la Cuesta de Lipán. Para continuar hasta Barrancas hay que retomar la ruta 52 y luego agarra la 75 y recorrer 25 kilómetros. Es un sitio de paso ya que no posee infraestructura hotelera, pero es posible dormir y comer allí para lo cual hay que llegar hasta la sede de la comisión municipal. El atractivo son las pinturas  y grabados rupestres que se encuentran en ese accidente geográfico. Después de admirar esta belleza que se ha mantenido en el tiempo, una opción es seguir hasta Susques para pasar la noche. En Hostal Andino el precio por persona es de $ 150 (con baño privado). “Lo más destacado para visitar es la capilla de la Virgen de Belén, que es la más antigua del país porque tiene 500 años”, recomienda Walter Salazar, encargado del hostal. Aquí también se pueden comprar tejidos en lana de llama y oveja. Es una época ideal para visitar el lugar porque aún no arrancó el frío. La temperatura puede bajar hasta los 15 grados bajo cero en invierno.  

La localidad es salteña, pero se llega por Jujuy. Hay que pasar Humahuaca por la ruta 9 y luego tomar la 13. Una habitación doble en un hostal ronda los $ 550 y $ 400 la triple. La gastronomía se caracteriza por platos elaborados con quinoa y carnes de cordero. Casas de adobe, calles empedradas y angostas hacen de este un sitio encantador. Se recomienda la visita a la iglesia del pueblo.