15 Marzo 2015
EL ABRAZO ESPERADO. Los jugadores del “decano” tucumano celebraron el gol de Menéndez para empatar el partido con Atlético Paraná y para seguir siendo líderes. foto de javier escobar (especial para la gaceta)
PARANÁ (De nuestro enviado especial, Nicolás Iriarte).- Atlético puede estar tranquilo sabiendo que con el manual de las costumbres futboleras más efectivas bajo el brazo, el balance del 1-1 con su homónimo de Paraná es positivo.
La regla es simple y dice que cuando no se puede ganar lo mejor es no perder, mucho más si se juega de visitante. Y el “decano” lo hizo, porque volvió a sumar afuera, tras haber ganado el duelo pasado en el Monumental. “Está claro que de visitante siempre hay que sumar y lo bueno es que lo hicimos” remarcó con voz propia Emanuel Molina.
El volante, que fue uno de los pocos que habló a la salida, entendió que por momentos Atlético fue superar a un local que igual le robó minutos para complicarlo. “En un partido parejo como el que se dio, porque por momentos jugamos bien y por momentos ellos nos dominaron, lo más justo era el empate”, analizó el hombre satisfecho con la producción pero pidiendo seguir por el buen camino.
Con el sabor de al menos haber sumado, Molina tuvo un deseo para el final, pensando en lo que viene, que es mucho. “Ahora hay que hacer valer este punto”, sentenció.
La regla es simple y dice que cuando no se puede ganar lo mejor es no perder, mucho más si se juega de visitante. Y el “decano” lo hizo, porque volvió a sumar afuera, tras haber ganado el duelo pasado en el Monumental. “Está claro que de visitante siempre hay que sumar y lo bueno es que lo hicimos” remarcó con voz propia Emanuel Molina.
El volante, que fue uno de los pocos que habló a la salida, entendió que por momentos Atlético fue superar a un local que igual le robó minutos para complicarlo. “En un partido parejo como el que se dio, porque por momentos jugamos bien y por momentos ellos nos dominaron, lo más justo era el empate”, analizó el hombre satisfecho con la producción pero pidiendo seguir por el buen camino.
Con el sabor de al menos haber sumado, Molina tuvo un deseo para el final, pensando en lo que viene, que es mucho. “Ahora hay que hacer valer este punto”, sentenció.
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