Por Carlos Páez de la Torre H
10 Marzo 2015
En 1915, la Universidad de Tucumán editó los capítulos referidos a nuestra región del afamado libro de viajes del capitán Joseph Andrews, aparecido en Londres en 1827. Lo tituló “Las Provincias del Norte en 1825”.
A poco de aparecer el tomo, una conocida personalidad de Santiago del Estero, don Baltasar Olaechea y Alcorta, envió una indignada carta a LA GACETA. Expresaba que el capítulo referido a Santiago del Estero contenía “impresiones reveladoras de un temperamento y de un criterio extraviados”. Esto porque Andrews, “al juzgar de las cosas y de la sociedad de Santiago, lo hace en los términos más torpes y descomedidos, impropios en un hombre que se tenía por educado y capaz”.
Daba ejemplos. El capitán narraba una tertulia donde se bailó “La Mariquita”, y la describía como “el tango más lascivo e insolente que nunca se bailó sino en los candombes de La Habana”. Afirmó que esto jamás fue costumbre en Santiago. Además, atribuía “hábitos peligrosamente demostrativos”, en las reuniones, a las “damas de la primera sociedad”. Le parecía que lo que narraba pudo haber ocurrido en las comilonas “de orilleros beodos”, pero nunca en una “sociedad educada, a la que caracterizó su sencilla y amable cultura”.
Para Olaechea y Alcorta, era de lamentar “que la Universidad de Tucumán no haya encontrado otros escritos realmente dignos de la reproducción, para solaz y aprovechamiento para los que, en general, se dedican a este género de estudios e investigaciones”. Lamentaba que la casa reprodujera, “a título de elemento ilustrativo, esas páginas cuajadas de falsedades y saturadas de pedantería”.
Lo más popular