Por Alejandro Klappenbach
10 Marzo 2015
MUY ATENTO. Delbonis, tras un comienzo con dudas, retomó toda la concentración que había mostrado en el primer set del día anterior. Así selló la victoria. reuters
El día después del single más largo de siempre en la Davis fue un lunes que, también, quedará en la historia. La victoria de Federico Delbonis sobre Thomaz Bellucci por 6-3, 3-6, 6-2 y 7-5 decretó el triunfo de Argentina sobre Brasil y clasificó al equipo para un atrapante cruce por cuartos de final contra la Serbia de Novak Djokovic, del 17 al 19 de julio, otra vez en Tecnópolis.
La continuidad del quinto punto (el domingo había sido suspendido por falta de luz natural con el triunfo parcial del argentino por 6-3) marcó un vuelco importante. Los zurdos invirtieron roles y fue el brasileño quien se apoderó de la iniciativa y consiguió llevar esa ventaja al marcador. El set cayó de su lado, también por 6-3.
En el cuarto, el de Azul retomó su ritmo dominante. Primeros servicios hirientes y enseguida ese drive que conmueve a cualquiera, fue la fórmula para apoyarse en sus games de saque y ser agresivo en la devolución. El plan se cumplió a la perfección, el 6-2 reflejó una clara superioridad y pudo asomarse al abismo del cuarto set con la tranquilidad de tener margen. Quien no lo tenía era Bellucci: primero dejó pasar un quiebre de ventaja y cuando debió mantener el saque para forzar el tie-break, se equivocó y cedió el set. Con eso el partido. Con eso la serie.
La imagen que siguió hace pensar que la victoria puede tener una profunda onda expansiva. Al abrazo de jugador (Delbonis) y capitán (Daniel Orsanic) llegaron compañeros. Y también llegó el líder, la piedra fundacional de este nuevo ciclo, Juan Martín Del Potro. Después de varias temporadas de evasivas, la Copa Davis está en su radar. Y él, que cambió los pasajes que anoche debieron llevarlo a Indian Wells porque no quería dejar al equipo con la serie aún abierta, es uno de los grandes ganadores de estos días. Como tantas veces, un triunfo sirve para calmar dolores, anestesiar cuestionamientos y, agreguemos en este caso, para despejar dudas e ir confirmando el potencial de las segundas opciones. Con Del Potro apto, Leonardo Mayer es un lujo de segundo singlista. Con Del Potro apto, Carlos Berlocq, Delbonis y Diego Schwartzman, son tres lujos. Con Del Potro apto, Argentina vuelve a ser potencia y candidata en cualquier instancia, ciudad o superficie.
La continuidad del quinto punto (el domingo había sido suspendido por falta de luz natural con el triunfo parcial del argentino por 6-3) marcó un vuelco importante. Los zurdos invirtieron roles y fue el brasileño quien se apoderó de la iniciativa y consiguió llevar esa ventaja al marcador. El set cayó de su lado, también por 6-3.
En el cuarto, el de Azul retomó su ritmo dominante. Primeros servicios hirientes y enseguida ese drive que conmueve a cualquiera, fue la fórmula para apoyarse en sus games de saque y ser agresivo en la devolución. El plan se cumplió a la perfección, el 6-2 reflejó una clara superioridad y pudo asomarse al abismo del cuarto set con la tranquilidad de tener margen. Quien no lo tenía era Bellucci: primero dejó pasar un quiebre de ventaja y cuando debió mantener el saque para forzar el tie-break, se equivocó y cedió el set. Con eso el partido. Con eso la serie.
La imagen que siguió hace pensar que la victoria puede tener una profunda onda expansiva. Al abrazo de jugador (Delbonis) y capitán (Daniel Orsanic) llegaron compañeros. Y también llegó el líder, la piedra fundacional de este nuevo ciclo, Juan Martín Del Potro. Después de varias temporadas de evasivas, la Copa Davis está en su radar. Y él, que cambió los pasajes que anoche debieron llevarlo a Indian Wells porque no quería dejar al equipo con la serie aún abierta, es uno de los grandes ganadores de estos días. Como tantas veces, un triunfo sirve para calmar dolores, anestesiar cuestionamientos y, agreguemos en este caso, para despejar dudas e ir confirmando el potencial de las segundas opciones. Con Del Potro apto, Leonardo Mayer es un lujo de segundo singlista. Con Del Potro apto, Carlos Berlocq, Delbonis y Diego Schwartzman, son tres lujos. Con Del Potro apto, Argentina vuelve a ser potencia y candidata en cualquier instancia, ciudad o superficie.
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