10 Marzo 2015
Nunca es tarde para ser feliz y ayer Braian Resch lo comprobó. “No dudé un minuto en decir que sí para venir a Tucumán”, cuenta el rubio nuevo lateral por izquierda de San Martín. Es el refuerzo número 13 con miras al inminente Federal A.
Hacía días, cuando el plantel ya estaba armado, Darío Tempesta había declarado la necesidad de contar con otro lateral. Apenas le dieron el “ok” se contactó personalmente con Resch para tentarlo con la nueva propuesta. “Estaba en Formosa, jugando en Sportivo Patria, pero no arreglé para firmar contrato y gracias a Dios, recién hace una semana, me surgió esta oportunidad. No la quiero desaprovechar”, reconoce el jugador de 24 años que se inició en las inferiores de Vélez.
Allí, en Liniers, Resch compartió pensión con Ángel Viotti, otro hijo del “Fortín” que lo recibió con los brazos abiertos durante la práctica de ayer. “Había leído que él estaba por acá y me alegré mucho. Espero que también le vaya bien”, dice Resch, esperanzado con poder compartir nuevos buenos momentos.
“En realidad todo el grupo me recibió muy bien, por eso estoy contento, esperando ya para poder aportar lo mío”, explica el lateral que ayer participó de la sesión de fútbol jugando en el equipo suplente.
El destino más reconocido
Sportivo Belgrano, Atlanta y Ferro de General Pico (La Pampa) también figuran en su curriculum, pero Resch afirma que ninguno lo tentó como San Martín. “Dije que sí en seguida porque creo que a cualquiera le gustaría jugar acá”, explica hablando de la fama del fútbol tucumano. “A la provincia no la conocía, sólo vine alguna vez a jugar. Pero se que el fútbol se vive de una manera distinta que en otros lados. Eso también me motivó a venir”, cuenta sincero.
La misma popularidad del equipo de La Ciudadela es la que le destacó su familia de Coronel Suárez, al sur de Buenos Aires, cuando se enteró de que sería un “santo” más. “Sin duda se pusieron muy contentos cuando llegué porque conocen que el fútbol de acá es muy reconocido a nivel país. Así que están felices”, dice el rubio igual de chocho.
Con las clásicas características de un “3” (aquellas que Tempesta tuvo que esperar hasta último momento), Resch -que ya hizo la pretemporada en Formosa- deberá pelear su lugar en el primer equipo con Albaro Jiménez. Pero no se desespera.
“Tenía muchas ganas de estar acá y lo hice. El DT me dio la bienvenida y aunque no pude charlar mucho, nos quedan los próximos días para ir conociéndonos”, destaca, paciente y comprometido en su nueva casa.
Hacía días, cuando el plantel ya estaba armado, Darío Tempesta había declarado la necesidad de contar con otro lateral. Apenas le dieron el “ok” se contactó personalmente con Resch para tentarlo con la nueva propuesta. “Estaba en Formosa, jugando en Sportivo Patria, pero no arreglé para firmar contrato y gracias a Dios, recién hace una semana, me surgió esta oportunidad. No la quiero desaprovechar”, reconoce el jugador de 24 años que se inició en las inferiores de Vélez.
Allí, en Liniers, Resch compartió pensión con Ángel Viotti, otro hijo del “Fortín” que lo recibió con los brazos abiertos durante la práctica de ayer. “Había leído que él estaba por acá y me alegré mucho. Espero que también le vaya bien”, dice Resch, esperanzado con poder compartir nuevos buenos momentos.
“En realidad todo el grupo me recibió muy bien, por eso estoy contento, esperando ya para poder aportar lo mío”, explica el lateral que ayer participó de la sesión de fútbol jugando en el equipo suplente.
El destino más reconocido
Sportivo Belgrano, Atlanta y Ferro de General Pico (La Pampa) también figuran en su curriculum, pero Resch afirma que ninguno lo tentó como San Martín. “Dije que sí en seguida porque creo que a cualquiera le gustaría jugar acá”, explica hablando de la fama del fútbol tucumano. “A la provincia no la conocía, sólo vine alguna vez a jugar. Pero se que el fútbol se vive de una manera distinta que en otros lados. Eso también me motivó a venir”, cuenta sincero.
La misma popularidad del equipo de La Ciudadela es la que le destacó su familia de Coronel Suárez, al sur de Buenos Aires, cuando se enteró de que sería un “santo” más. “Sin duda se pusieron muy contentos cuando llegué porque conocen que el fútbol de acá es muy reconocido a nivel país. Así que están felices”, dice el rubio igual de chocho.
Con las clásicas características de un “3” (aquellas que Tempesta tuvo que esperar hasta último momento), Resch -que ya hizo la pretemporada en Formosa- deberá pelear su lugar en el primer equipo con Albaro Jiménez. Pero no se desespera.
“Tenía muchas ganas de estar acá y lo hice. El DT me dio la bienvenida y aunque no pude charlar mucho, nos quedan los próximos días para ir conociéndonos”, destaca, paciente y comprometido en su nueva casa.
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