08 Marzo 2015
Tres intentos le demandó al intendente de Concepción, Osvaldo Morelli, concretar la apertura de sesiones del Concejo Deliberante. Es que finalmente el jefe municipal alperovichista contó con el quorum suficiente por parte de los ediles y pudo cumplir con el acto institucional en la “Perla del Sur”.
El domingo pasado, la ausencia de siete ediles opositores (el cuerpo deliberativo está compuesto por 12 miembros) le había impedido pronunciar su discurso anual. “Fue una forma de protestar ante su falta de respeto a nosotros. Nunca nos escuchó ni dio curso a nuestros proyectos”, había explicado en aquella ocasión el radical Carlos Olarte, uno de los ausentes. De todas maneras, Morelli igualmente continuó esa noche en el Teatro La Estación con la lectura de su rendición de cuentas institucional.
El jueves, el segundo intento de apertura formal de las sesiones en Concepción cayó por denuncias de agresiones y aprietes por parte de concejales opositores. Ese día, antes del inicio formal del acto, Eduardo Carrizo y Estela López quisieron hacer uso de la palabra, pero sus intentos fueron neutralizados por partidarios del intendente, que habían colmado la sala. Los insultos desde la barra motivaron a los ediles Olarte, Carrizo, López, Alfredo Estéfano, Graciela Albarracín, Mario Carrier y Daniel Fúnez a abandonar el recinto. Nuevamente entonces, Morelli se quedó sin quórum para leer el discurso que había preparado.
“Los concejales intentaron hablar cuando no debían y sólo fue un incidente típico de un año electoral”, había dicho el intendente para minimizar el escándalo que derivó en la suspensión del debate.
En la noche del viernes, en tanto, el acto pudo finalmente concretarse con la presencia de ocho de los 12 ediles. Sin embargo, Morelli en esa ocasión no leyó el texto, sino que entregó copias en papel y en CD a los representantes vecinales. En el documento, el jefe municipal se jactó de haber producido “transformaciones urbanas fundamentales” durante su gestión. Anticipó, además, la inauguración para este año de la nueva Terminal de Ómnibus, que se levanta a orillas de la ruta nacional 65, y de la Avenida Urbana (de tres kilómetros) que atraviesa la ciudad.
No es la primera vez que el Concejo Deliberante de Concepción aparece envuelto en una polémica. En enero, por ejemplo, Morelli pretendía que se aprobara una prórroga del Presupuesto 2014 de la Municipalidad, además de una ampliación de $ 58 millones sobre ese mismo cálculo de gastos para el año pasado, estimado en alrededor de $ 202 millones. Sin embargo, el encuentro fracasó porque ediles opositores adujeron que habían sido convocados mediante la red de mensajería WhatsApp.
El domingo pasado, la ausencia de siete ediles opositores (el cuerpo deliberativo está compuesto por 12 miembros) le había impedido pronunciar su discurso anual. “Fue una forma de protestar ante su falta de respeto a nosotros. Nunca nos escuchó ni dio curso a nuestros proyectos”, había explicado en aquella ocasión el radical Carlos Olarte, uno de los ausentes. De todas maneras, Morelli igualmente continuó esa noche en el Teatro La Estación con la lectura de su rendición de cuentas institucional.
El jueves, el segundo intento de apertura formal de las sesiones en Concepción cayó por denuncias de agresiones y aprietes por parte de concejales opositores. Ese día, antes del inicio formal del acto, Eduardo Carrizo y Estela López quisieron hacer uso de la palabra, pero sus intentos fueron neutralizados por partidarios del intendente, que habían colmado la sala. Los insultos desde la barra motivaron a los ediles Olarte, Carrizo, López, Alfredo Estéfano, Graciela Albarracín, Mario Carrier y Daniel Fúnez a abandonar el recinto. Nuevamente entonces, Morelli se quedó sin quórum para leer el discurso que había preparado.
“Los concejales intentaron hablar cuando no debían y sólo fue un incidente típico de un año electoral”, había dicho el intendente para minimizar el escándalo que derivó en la suspensión del debate.
En la noche del viernes, en tanto, el acto pudo finalmente concretarse con la presencia de ocho de los 12 ediles. Sin embargo, Morelli en esa ocasión no leyó el texto, sino que entregó copias en papel y en CD a los representantes vecinales. En el documento, el jefe municipal se jactó de haber producido “transformaciones urbanas fundamentales” durante su gestión. Anticipó, además, la inauguración para este año de la nueva Terminal de Ómnibus, que se levanta a orillas de la ruta nacional 65, y de la Avenida Urbana (de tres kilómetros) que atraviesa la ciudad.
No es la primera vez que el Concejo Deliberante de Concepción aparece envuelto en una polémica. En enero, por ejemplo, Morelli pretendía que se aprobara una prórroga del Presupuesto 2014 de la Municipalidad, además de una ampliación de $ 58 millones sobre ese mismo cálculo de gastos para el año pasado, estimado en alrededor de $ 202 millones. Sin embargo, el encuentro fracasó porque ediles opositores adujeron que habían sido convocados mediante la red de mensajería WhatsApp.
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