Por Alejandro Klappenbach
03 Marzo 2015
télam
Tras el turbulento proceso de Martín Jaite al frente del equipo de Copa Davis, la Asociación Argentina de Tenis buscó un hombre de perfil bajo y experiencia en una faceta fundamental como es el dobles: Daniel Orsanic. Al margen del sobreentendido objetivo de alcanzar por primera vez la “Ensaladera de Plata”, su arribo obedece a la necesidad de renovar las expectativas y recomponer la relación con Juan Martín del Potro, quien dejó abierta la puerta a su regreso al equipo. Este fin de semana, Orsanic tendrá su debut como capitán en la serie de locales ante Brasil.
- Como pocas veces en los últimos 10 años, Argentina tiene un equipo con integrantes de nivel muy parejo. ¿Tenés definidos los singles del viernes?
- Leo Mayer va a jugar contra Joao Souza. Para enfrentar a Thomaz Belucci me gustan distintas características de mis otros tres jugadores. La elección dependerá de cómo se desarrollen las cosas en estos días, fundamentalmente pensando en quién puede llegar a jugar el eventual quinto punto. Se viene una serie muy pareja. También está la opción de ser más agresivos y buscar la diferencia antes.
- ¿Alguno puede llegar a jugar tres puntos?
- No quisiera. Es polvo de ladrillo, hará calor y los partidos serán desgastantes. Si se puede, es conveniente contar con jugadores frescos. Pero si lo necesitamos, sé que están preparados para jugar tres puntos.
- ¿Creés, como muchos, que el dobles será clave?
- Para mí el viernes es el día más importante de las series de Copa Davis, porque lo que ahí conseguís o no condiciona las decisiones para las otras jornadas. Si ganás 2-0, podés cuidar. Si perdés 2-0 no te quedan opciones. Si quedás 1-1, el tercer punto es vital. Lo que tengo claro es que las decisiones se toman antes de los partidos, sin el resultado puesto, y que casi todo el mundo juzga las decisiones después de conocer los resultados. Así es, guste o no.
- ¿El dobles es el punto más difícil?
- En la previa es el menos parejo. El ranking y los resultados de Marcelo Melo y Bruno Soares así lo indican. Estoy convencido de que se puede pelear. Tampoco tengo decidido quiénes jugarán ese punto. Ellos son los favoritos, pero en ladrillo y en Buenos Aires las cosas debieran emparejarse.
- Recién dijiste que las decisiones se juzgan desde los resultados. ¿Aplica esto a la semana de Mónaco después de quedar fuera de la serie?
- A todos los que estamos en el tenis nos pone muy bien que Juan haya jugado como lo hizo toda la semana, pero el equipo ya estaba decidido antes de comenzar el torneo, para sacarles presión.
- ¿Qué características va a tener la cancha?
- Pretendemos que sea una buena cancha de ladrillo. En ladrillo, es el jugador el que elige el momento de frenar el deslizamiento. En muchas canchas, en cambio, la patinada es hasta que se frena el impulso del cuerpo, porque cuando se hace fuerza hacia abajo, no hay piso firme donde encontrar la resistencia que te detiene. Con todo respeto, San Pablo y Río de Janeiro tienen canchas flojas, que no están al nivel. La semana pasada Ferrer decía que nunca en Brasil tiene la pelota donde la quiere tener. Esa incomodidad no está en el Buenos Aires, y esperamos que tampoco esté en Tecnópolis.
- ¿Percibís ya la dimensión Davis?
- La Copa tiene un clima muy especial, sin dudas. En ese contexto, soy de involucrarme poco. Miro los diarios por arriba, no soy amigo de las redes sociales. Eso sí, vivo con el teléfono, que suena bastante más en estos días. Aunque intento abstraerme de los comentarios, sean buenos o malos, es obvio que ciertas cosas siempre llegan. Esto es así, es una parte del juego. Hay mayor exposición, diría que en algún punto me incomoda. Soy muy respetuoso del trabajo de todos, también del mío. Pongo especial interés en el respeto, porque es la base de la armonía del equipo y estoy convencido de que es clave para un mejor resultado final.
- Siempre se hace hincapié en los jugadores que debutan y pocas veces se piensa en un capitán debutante, como es tu caso. ¿Cómo te sentís?
- Estoy tranquilo, intentando enfocarme en el trabajo. Intercambio información y sensaciones, escucho a todos. Ellos vienen de una semana muy fuerte en lo anímico como es la del ATP de Buenos Aires. Respecto del debut, me gusta que sea en casa, estará mi familia. Hay que intentar valerse de lo bueno de jugar de local, por encima de la presión que eso significa. Depende un poco del grupo y otro poco de cada uno, individualmente. La alegría de ganar acá puede ser un momento inolvidable para la carrera de todos nosotros. Tener más exposición significa que estamos en un lugar más importante. Y si estás en un lugar importante es porque estás haciendo bien las cosas.
- Por último, Del Potro va a estar con el equipo…
- Juan Martín se mostró a disposición para ayudar y colaborar. Su experiencia será muy valiosa, tenga la forma que tenga. Seguramente aparecerá en entrenamientos y estará cerca durante los partidos. Pero si alguna de estas cosas no ocurre no será porque hubo problemas o algo se dio vuelta. Repito: no quedamos en nada específico que él tenga que cumplir.
- Como pocas veces en los últimos 10 años, Argentina tiene un equipo con integrantes de nivel muy parejo. ¿Tenés definidos los singles del viernes?
- Leo Mayer va a jugar contra Joao Souza. Para enfrentar a Thomaz Belucci me gustan distintas características de mis otros tres jugadores. La elección dependerá de cómo se desarrollen las cosas en estos días, fundamentalmente pensando en quién puede llegar a jugar el eventual quinto punto. Se viene una serie muy pareja. También está la opción de ser más agresivos y buscar la diferencia antes.
- ¿Alguno puede llegar a jugar tres puntos?
- No quisiera. Es polvo de ladrillo, hará calor y los partidos serán desgastantes. Si se puede, es conveniente contar con jugadores frescos. Pero si lo necesitamos, sé que están preparados para jugar tres puntos.
- ¿Creés, como muchos, que el dobles será clave?
- Para mí el viernes es el día más importante de las series de Copa Davis, porque lo que ahí conseguís o no condiciona las decisiones para las otras jornadas. Si ganás 2-0, podés cuidar. Si perdés 2-0 no te quedan opciones. Si quedás 1-1, el tercer punto es vital. Lo que tengo claro es que las decisiones se toman antes de los partidos, sin el resultado puesto, y que casi todo el mundo juzga las decisiones después de conocer los resultados. Así es, guste o no.
- ¿El dobles es el punto más difícil?
- En la previa es el menos parejo. El ranking y los resultados de Marcelo Melo y Bruno Soares así lo indican. Estoy convencido de que se puede pelear. Tampoco tengo decidido quiénes jugarán ese punto. Ellos son los favoritos, pero en ladrillo y en Buenos Aires las cosas debieran emparejarse.
- Recién dijiste que las decisiones se juzgan desde los resultados. ¿Aplica esto a la semana de Mónaco después de quedar fuera de la serie?
- A todos los que estamos en el tenis nos pone muy bien que Juan haya jugado como lo hizo toda la semana, pero el equipo ya estaba decidido antes de comenzar el torneo, para sacarles presión.
- ¿Qué características va a tener la cancha?
- Pretendemos que sea una buena cancha de ladrillo. En ladrillo, es el jugador el que elige el momento de frenar el deslizamiento. En muchas canchas, en cambio, la patinada es hasta que se frena el impulso del cuerpo, porque cuando se hace fuerza hacia abajo, no hay piso firme donde encontrar la resistencia que te detiene. Con todo respeto, San Pablo y Río de Janeiro tienen canchas flojas, que no están al nivel. La semana pasada Ferrer decía que nunca en Brasil tiene la pelota donde la quiere tener. Esa incomodidad no está en el Buenos Aires, y esperamos que tampoco esté en Tecnópolis.
- ¿Percibís ya la dimensión Davis?
- La Copa tiene un clima muy especial, sin dudas. En ese contexto, soy de involucrarme poco. Miro los diarios por arriba, no soy amigo de las redes sociales. Eso sí, vivo con el teléfono, que suena bastante más en estos días. Aunque intento abstraerme de los comentarios, sean buenos o malos, es obvio que ciertas cosas siempre llegan. Esto es así, es una parte del juego. Hay mayor exposición, diría que en algún punto me incomoda. Soy muy respetuoso del trabajo de todos, también del mío. Pongo especial interés en el respeto, porque es la base de la armonía del equipo y estoy convencido de que es clave para un mejor resultado final.
- Siempre se hace hincapié en los jugadores que debutan y pocas veces se piensa en un capitán debutante, como es tu caso. ¿Cómo te sentís?
- Estoy tranquilo, intentando enfocarme en el trabajo. Intercambio información y sensaciones, escucho a todos. Ellos vienen de una semana muy fuerte en lo anímico como es la del ATP de Buenos Aires. Respecto del debut, me gusta que sea en casa, estará mi familia. Hay que intentar valerse de lo bueno de jugar de local, por encima de la presión que eso significa. Depende un poco del grupo y otro poco de cada uno, individualmente. La alegría de ganar acá puede ser un momento inolvidable para la carrera de todos nosotros. Tener más exposición significa que estamos en un lugar más importante. Y si estás en un lugar importante es porque estás haciendo bien las cosas.
- Por último, Del Potro va a estar con el equipo…
- Juan Martín se mostró a disposición para ayudar y colaborar. Su experiencia será muy valiosa, tenga la forma que tenga. Seguramente aparecerá en entrenamientos y estará cerca durante los partidos. Pero si alguna de estas cosas no ocurre no será porque hubo problemas o algo se dio vuelta. Repito: no quedamos en nada específico que él tenga que cumplir.
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