28 Febrero 2015
REUTERS
CIUDAD DEL VATICANO.- El papa Francisco criticó la explotación laboral, en un mensaje a cooperativistas reunidos en el Vaticano. "Hay quien ofrece 11 horas de trabajo al día por 600 euros al mes. Y si no te gusta, te dicen que te vayas a casa. Esto es lo que pasa en este mundo, donde si no aceptás otro lo hará. El hambre hace que se acepten también trabajos en negro, como todo el personal doméstico", sostuvo.
Instó hoy a que “los hombres manden al capital y no el capital a los hombres”, ante los representantes de la Conferederación de Cooperativas Italianas. También pidió que encuentren "formas, métodos e instrumentos para combatir esta cultura del descarte, cultivada por los poderes que manejan las políticas económicas-financieras del mundo globalizado", informó la agencia Télam.
Aconsejó a las cooperativas a que se conviertan "en el motor que levanta y desarrolla la parte más débil de nuestras comunidades locales y de la sociedad civil" y que piensen especialmente en los jóvenes y tantas mujeres que necesitan entrar en el mundo del trabajo, o a los adultos que pierden el empleo.
El Papa también se refirió a la economía y su relación con la justicia social, y con la dignidad de las personas y fue crítico al sostener. "Hay un cierto liberalismo que cree que sea necesario primero producir riqueza, no importa cómo, para después promover alguna política redistributiva por parte del Estado".
Jorge Bergoglio cerró sus palabras aseverando que "el dinero es el estiércol del diablo, mientras que en una cooperativa auténtica, verdadera, no manda el capital sobre los hombres, sino los hombres sobre el capital".