López les enrostró a Manzur y a Amaya su aparato movilizador

Decenas de colectivos estacionados en las adyacencias del club Central Córdoba, una ruidosa murga brasileña, una banda de cuarteto en vivo y cientos de chorizos danzando al a calor de las parrillas. Ese era el panorama anoche en la zona del barrio Ciudadela, como consecuencia de un acto político que organizó el secretario de Obras Públicas de la Nación, José Francisco López. Si bien el funcionario kirchnerista ya había deslizado que tiene intenciones de gobernar la provincia, el de ayer no fue un mitin de lanzamiento de su candidatura. Según coinciden varios sectores del peronismo local, el evento de anoche tuvo un único fin: mostrar al alperovichismo y al amayismo la capacidad de movilización del concepcionense.

Con pantalón azul y camisa celeste, López ingresó al club pasadas las 19.30. Una turba de simpatizantes se le acercó a escoltarlo hasta el escenario principal. Cuando enfilaba hacia las gradas, el kirchnerista cambió de rumbo y se dirigió directamente hacia el centro de la cancha de basquet. “A lo Néstor Kirchner”, López se mezcló para saludar y sacarse fotos con militantes y punteros que llegaron desde varios municipios y comunas del interior de la provincia. “¡Borombombón, Borombombón, Francisco López, gobernadooor!”, cantaba un grupo de seguidores mientras unos ruidosos redoblantes acompañaban el ritmo. En las primeras filas, los militantes de La Cámpora encabezados por los dirigentes Federico Casinelli y Hernán Lobo Murga aplaudían y asentían cada vez que alguien coreaba el nombre del concepcionense.

Cuando subió al escenario, López empezó a narrar hechos de su infancia. Recordó que cuando era estudiante de Ingeniería vivía en una pensión de calle Miguel Lillo y Lavalle. “Este es mi barrio, me siento como en mi casa. ¿Verdad Rubén?, vos lo sabés porque me conocés muy bien”, soltó mientras su mirada apuntaba a Rubén Urueña, dueño del club y amigo personal. En ese instante Urueña se subió al escenario y se fundió en un abrazo con el candidato. Luego, López aprovechó su tiempo para agradecer. Se acordó de monseñor Héctor Luis Villalba, ungido cardenal por el Papa Franciso y valoró que el ex arzobispo de Tucumán sea párroco de la iglesia San Gerardo, situada en avenida Alem y Lavalle. También le agradeció a Jesús. Al de La Cámpora, no al del madero. “Va todo mi agradecimiento para Jesús Salim y Mabel Carrizo. También para José Alperovich y Betty (Rojkés), por haberme permitido formar parte de la lista del PJ”, se sinceró.

Al final de su alocución, los candidatos alperovichistas Juan Manzur y Osvaldo Jaldo también recibieron elogios. Al igual que los intendentes Julio Silman (Aderetes) y Zacarías Khoder (Banda del Río Salí). Según los organizadores, unos 7 mil simpatizantes concurrieron al acto.

Movilizados

Ómnibus para todos y todas.- Si hay algo que caracterizó al gobierno kirchnerista durante los 12 años de gestión fue su poder de movilización. De las 16, casi un centenar de colectivos procedentes de varios puntos de la geografía provincial comenzó a llegar a las inmediaciones del club Central Córdoba, ubicado en calle Bolívar y Avenida Alem. Como en los viejos actos alperovichistas, López contó con el apoyo de punteros y movilizadores que en otros tiempos habían sido incondicionales al alperovichismo. Los primeros ómnibus rentados en llegar lograron ubicarse sobre las calles que circundan al club. Pero a medida que pasaban las horas, los micros tuvieron que ser estacionados por calle Bernabé Aráoz. Una interminable fila de vehículos se podía observar desde avenida Roca hasta calle General Paz (foto superior).

Recorrida por la plaza Urquiza.- El precandidato a gobernador, José López arribó pasadas las 17.30 desde Buenos Aires al aeropuerto Benjamín Matienzo. Desde allí partió en caravana hacia la plaza Urquiza, ubicada en el corazón del barrio Norte. Luego de saludar a los ocasionales transeúntes, el funcionario kirchnerista rumbeó hasta el club Central Córdoba, lugar donde encabezó el multitudinario acto de campaña.

López también tiene su colectivo descapotado.- Como si fueran los últimos días de campaña, el concepcionense se trasladó desde el aeropuerto al club en un colectivo descapotado (foto inferior). De pie y con los brazos levantados, López saludada a todo el mundo. Durante el corto viaje, colaboradores y simpatizantes lo acompañaron agitando banderas que contenían la leyenda: “José López 2015”. “¿Quien dijo que (Domingo) Amaya era el único que tenía una ‘maquinola’ así?”, bromeó un asesor de confianza.

Banda de cuarteto en vivo y murga brasilera.- “Ojaláaa no te hubiera conocido nuncaaaa”, entonaba la banda de cuarteto mientras esperaban el arribo del funcionario kirchnerista. Después de interpretar unos 10 temas bailanteros, los músicos le cedieron el lugar a una murga conformada por tres bailarines (dos mujeres y un varón) que se abrían paso entre la multitud. Detrás de ellos ingresó López, escoltado por simpatizantes.

Apoyo sindical.- Una veintena de gremios nucleados en la Confederación General del Trabajo (CGT) concurrieron al microestadio de CC para apoyar la candidatura del tucumano devenido santacruceño. Banderas de los gremios de Smata y de la Uocra sobresalían entre la multitud. Columnas del gremio de la Asociación Argentina de Trabajadores de las Comunicaciones (Aatrac) y del Sindicato de Peones de Taxis también se hicieron presentes en el club para respaldar al referente kirchnerista.

¿Conformará una alianza con Amaya?- Cuando finalizó el mitin, López dialogó con LA GACETA. ¿Es verdad que piensa conformar una alianza electoral con el intendente Domingo Amaya?, se le consultó. “Para mí, primero tiene que estar el proyecto político. Nosotros tenemos que pensar cómo seguimos avanzando y como superamos esta vara tan alta la presidenta Cristina Kirchner a nivel nacional y José Alperovich a nivel provincial. El gran desafió en la provincia es generar más trabajo y más producción”, se limitó a responder.