14 Febrero 2015
UNA CIUDAD LOS RESPALDA. Para Mauricio, el acompañamiento es crucial, pero el equipo no debe relajarse pese al 3-0. gentileza jorge díaz
Para llegar a buen puerto es necesario un buen capitán. Y Concepción FC lo tiene. En este barco de proa orientada hacia el ascenso, el hombre al mando es Mauricio Rodrigo Verón. Quién mejor que él: con 37 años, fue protagonista de cinco ascensos que lo han hecho conocedor de casi todas las divisiones. Con Atlético, marcó el gol del triunfo sobre Racing de Córdoba que le, y también dio el presente en el ascenso a Primera. También llegó a la máxima categoría con Quilmes, y de la B Metropolitana y el Argentino C al Nacional B con Tigre y Atlético de Rosario, respectivamente. Solo le falta el ascenso al Federal A, por el que irá mañana.
“En todas las definiciones me fue bien, espero que esta no sea la excepción”, pide su deseo el experimentado líbero, que tiene la marea a favor para coleccionar su sexta chapa tras el 3-0 de la ida sobre Mitre de Salta. Sin embargo, no quiere cantar victoria hasta pisar tierra firme.
“Sería grave pensar que ya hemos ascendido. Nunca nos relajamos y menos ahora. Hay que pensar que vamos 0-0, o perdiendo. Hay que estar concentrados y ordenados, saber cortar la pelota sin hacer faltas tontas. Ellos tienen jugadores peligrosos, como (Cristian) Alfaro y (Gustavo) Barrionuevo. Si llegaron hasta acá es por algo”, advierte el capitán.
El acompañamiento masivo de la gente es otro punto a tener en cuenta. “Tener el respaldo de nuestra familia y de toda una ciudad que se identificó con este equipo es algo muy importante. Pero a las finales las definimos nosotros, los jugadores, y si queremos quedar en la historia del club que nos abrió las puertas, tenemos que jugar nuestro mejor partido”, aseveró Verón, en cuya cabeza ahora no hay lugar para pensar si seguirá siendo “cuervo” en el futuro.
“Primero está la final, así que lo pensaré a partir del lunes. Sería un gusto enorme porque siempre tuvimos el respaldo de la gente y porque se armo un grupo humano muy bueno. Además me siento un tucumano más, desde que llegué hace muchos años a Atlético. Acá conocí a mi señora, Cynthia Alderetes, que está embarazada y si Dios quiere en marzo nacerá Rodrigo (ya tiene a Mauricio, de 15 años). Quiero disfrutarlo al máximo y por eso la idea es jugar en esta provincia o muy cerca”.
“En todas las definiciones me fue bien, espero que esta no sea la excepción”, pide su deseo el experimentado líbero, que tiene la marea a favor para coleccionar su sexta chapa tras el 3-0 de la ida sobre Mitre de Salta. Sin embargo, no quiere cantar victoria hasta pisar tierra firme.
“Sería grave pensar que ya hemos ascendido. Nunca nos relajamos y menos ahora. Hay que pensar que vamos 0-0, o perdiendo. Hay que estar concentrados y ordenados, saber cortar la pelota sin hacer faltas tontas. Ellos tienen jugadores peligrosos, como (Cristian) Alfaro y (Gustavo) Barrionuevo. Si llegaron hasta acá es por algo”, advierte el capitán.
El acompañamiento masivo de la gente es otro punto a tener en cuenta. “Tener el respaldo de nuestra familia y de toda una ciudad que se identificó con este equipo es algo muy importante. Pero a las finales las definimos nosotros, los jugadores, y si queremos quedar en la historia del club que nos abrió las puertas, tenemos que jugar nuestro mejor partido”, aseveró Verón, en cuya cabeza ahora no hay lugar para pensar si seguirá siendo “cuervo” en el futuro.
“Primero está la final, así que lo pensaré a partir del lunes. Sería un gusto enorme porque siempre tuvimos el respaldo de la gente y porque se armo un grupo humano muy bueno. Además me siento un tucumano más, desde que llegué hace muchos años a Atlético. Acá conocí a mi señora, Cynthia Alderetes, que está embarazada y si Dios quiere en marzo nacerá Rodrigo (ya tiene a Mauricio, de 15 años). Quiero disfrutarlo al máximo y por eso la idea es jugar en esta provincia o muy cerca”.
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