24 Enero 2015
BUENOS AIRES.- El canciller Héctor Timerman negó “absolutamente” que el Gobierno haya estado vinculado a la muerte de Alberto Nisman y aseguró que “nadie” más que la presidenta Cristina Fernández y él estaban interesados en que el fiscal “viviera” y explicara la denuncia de encubrimiento de Irán en el atentado a la AMIA que formuló contra ambos.
“No, absolutamente no. El Gobierno de Argentina no estuvo involucrado. Además, nadie quería más que el señor Nisman viviera y contestara las preguntas que la Presidenta y yo”, respondió Timerman, consultado por la cadena internacional CNN sobre si la Casa Rosada estaba relacionada con la muerte del fiscal.
El ministro de Relaciones Exteriores formuló breves declaraciones a CNN, difundidas en el marco de un informe especial que ese medio internacional elaboró tras el fallecimiento de Nisman el domingo pasado en su departamento del barrio porteño de Puerto Madero.
Cinco días antes de morir, el fiscal había denunciado públicamente a la jefa de Estado, a su canciller y a otros militantes kirchneristas de integrar un “plan criminal” para encubrir la responsabilidad de Irán en el atentado a la mutual judía ocurrido en 1994.
El lunes pasado, en las únicas declaraciones que había formulado hasta ahora, y en medio de la conmoción general por el hallazgo sin vida del cuerpo de Nisman, Timerman dijo lamentar “la muerte de un ser humano”.
En esa oportunidad, al arribar al aeropuerto estadounidense John Fitzgerald Kennedy, de la ciudad de Nueva York, se excusó de no poder ampliar su concepto: “Acabo de bajar de un avión”, argumentó.
En tal sentido, consultado por el canal de cable TN sobre cómo se había enterado del fallecimiento de Nisman, respondió en ese momento: “por un mensaje de texto”.
Timerman recibió criticas ya que en medio de la actual crisis, se reunió con el nuevo embajador de Estados Unidos, Noah Mamet, quien fue confirmado en ese cargo a principios de diciembre.
La reunión se produjo mientras Timerman es cuestionado por la oposición en el marco de la investigación de la muerte del fiscal Nisman. La reacción de Estados Unidos sobre ese hecho fue la expresión, entre el lunes y el martes, de “un profundo pesar” y las “más sinceras condolencias” a los familiares del fiscal, cuya figura exaltó como la de quien “dedicó gran parte de su vida profesional” a perseguir a los autores del “horrendo atentado” contra la mutual judía.
El diplomático estadounidense arribó el viernes a Buenos Aires y ese mismo día presentó una copia de las cartas credenciales ante la Cancillería argentina, y se reunió con Timerman. (DyN)
“No, absolutamente no. El Gobierno de Argentina no estuvo involucrado. Además, nadie quería más que el señor Nisman viviera y contestara las preguntas que la Presidenta y yo”, respondió Timerman, consultado por la cadena internacional CNN sobre si la Casa Rosada estaba relacionada con la muerte del fiscal.
El ministro de Relaciones Exteriores formuló breves declaraciones a CNN, difundidas en el marco de un informe especial que ese medio internacional elaboró tras el fallecimiento de Nisman el domingo pasado en su departamento del barrio porteño de Puerto Madero.
Cinco días antes de morir, el fiscal había denunciado públicamente a la jefa de Estado, a su canciller y a otros militantes kirchneristas de integrar un “plan criminal” para encubrir la responsabilidad de Irán en el atentado a la mutual judía ocurrido en 1994.
El lunes pasado, en las únicas declaraciones que había formulado hasta ahora, y en medio de la conmoción general por el hallazgo sin vida del cuerpo de Nisman, Timerman dijo lamentar “la muerte de un ser humano”.
En esa oportunidad, al arribar al aeropuerto estadounidense John Fitzgerald Kennedy, de la ciudad de Nueva York, se excusó de no poder ampliar su concepto: “Acabo de bajar de un avión”, argumentó.
En tal sentido, consultado por el canal de cable TN sobre cómo se había enterado del fallecimiento de Nisman, respondió en ese momento: “por un mensaje de texto”.
Timerman recibió criticas ya que en medio de la actual crisis, se reunió con el nuevo embajador de Estados Unidos, Noah Mamet, quien fue confirmado en ese cargo a principios de diciembre.
La reunión se produjo mientras Timerman es cuestionado por la oposición en el marco de la investigación de la muerte del fiscal Nisman. La reacción de Estados Unidos sobre ese hecho fue la expresión, entre el lunes y el martes, de “un profundo pesar” y las “más sinceras condolencias” a los familiares del fiscal, cuya figura exaltó como la de quien “dedicó gran parte de su vida profesional” a perseguir a los autores del “horrendo atentado” contra la mutual judía.
El diplomático estadounidense arribó el viernes a Buenos Aires y ese mismo día presentó una copia de las cartas credenciales ante la Cancillería argentina, y se reunió con Timerman. (DyN)
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