JUJUY.- Un proyecto para convertir uno de los desechos más contaminantes de la producción de alcohol va tomando forma en Jujuy. A partir de la convocatoria que el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación Productiva de la Nación lleva adelante desde 2007, los ingenios Ledesma, Tabacal y San Isidro, después de un trabajo conjunto con la Fundación Jujuy 3000, trabajan en un biodigestor anaeróbico a escala piloto para tratamiento de la vinaza, publicó el portal "Jujuy al Momento".
La vinaza es el subproducto líquido de la destilación del mosto en la fermentación del etanol; en general contiene una gran cantidad de materia orgánica y nutrientes como nitrógeno, azufre y fósforo, también una gran cantidad de potasio. Entre los compuestos orgánicos más importantes, están los alcoholes, ácidos orgánicos y aldehídos. Además, también contiene compuestos fenólicos recalcitrantes, que son sustancias ácidas.
Este líquido de color marrón y olor dulce se obtiene de la caña de azúcar, constituye el desecho de mayor importancia en las destilerías de alcohol. Si no se somete a ningún tratamiento y se vierte directamente a las fuentes de agua, consume el oxígeno, mata a los peces y afecta seriamente el ecosistema.
Por cada litro de etanol se producen, en promedio, 13 litros de vinaza, por lo que es muy importante darle el tratamiento adecuado a este residuo. En la etapa de tratamiento del efluente, la vinaza debe ser sometida a algún procedimiento que permita disponerla adecuadamente para ser arrojada a una fuente de agua adecuada, ya que de lo contrario representa un riesgo ambiental.
Este proyecto científico se está llevando adelante con recursos del Estado, y una de las condiciones es que los actores muestren los resultados a otros, que en este caso fueron otros ingenios, e instituciones de investigación y desarrollo.
Los primeros resultados fueron expuestos en una jornada científica en la que participaron representantes de ingenios de Tucumán, Salta y Jujuy, y técnicos del INTA, de la Estación Experimental Obispo Colombres de Tucumán y de la Universidad Nacional de Jujuy, además de representantes de Fundación Jujuy 3000, institución que funcionó como Unidad de Vinculación Tecnológica entre el Ministerio y las empresas.