21 Octubre 2014
FLAGELO. La quema de cañaverales afecta a las poblaciones rurales. la gaceta / foto de FOTO OSVALDO RIPOLL (archivo)
La Justicia provincial solicitó la detención de una persona sospechada de haber incendiado la semana pasada, en dos oportunidades, una finca cañera ubicada en Aguilares, al sur de la capital tucumana. Fuentes oficiales informaron que, en el marco de una investigación de oficio, el fiscal de Instrucción de la II Nominación, Fabián Rojas, del Centro Judicial de la localidad de Concepción, requirió la detención de uno de los dos presuntos responsables del siniestro que serían los arrendatarios de la finca. Los incendios se registraron en un cañaveral de 10 hectáreas, donde había caña en pie y rastrojos (residuos del cultivo), localizado sobre la ruta provincial 331, a la altura del kilómetro 3, camino a Los Sarmiento.
Las fuentes de la investigación señalaron que los testimonios recogidos y las pericias que llevó a cabo el fiscal Rojas permitieron comprobar que el primer incendio se produjo el 14 de octubre, y que el segundo se registró el viernes pasado. Además, los testigos del siniestro relataron que los bomberos voluntarios de Aguilares acudieron al lugar, y que trabajaron durante tres horas para sofocar llamas de grandes dimensiones.
El humo que derivó del fuego afectó la visibilidad en la ruta 331, así como a los vecinos de las casas ubicadas en las cercanías. Por esta razón, los bomberos de Aguilares asistieron con oxígeno a las familias que residen en la zona.
Todos estos elementos sustentaron la decisión de Rojas para solicitar, en primer lugar, la detención de los sospechosos Hernán Víctor Fadel, de 26 años, y Alfredo Víctor Fadel, de 64. Las fuentes de la investigación indicaron que el segundo de los sospechosos presentó certificados médicos para dar cuenta que padece enfermedades que lo obligan a realizar controles médicos permanentes. Por este motivo, Rojas suspendió su pedido de detención.
Según los testimonios que obtuvo el fiscal, el 14 de octubre una camioneta blanca ingresó al campo. Del vehículo descendieron dos personas que, de acuerdo a la investigación, comenzaron a juntar hojas de caña y les prendieron fuego. Después, en el sector sur de la finca, continuaron con la misma acción.
El informe técnico de la Sub Unidad de Bomberos de Concepción recalcó que la quema de caña había sido programada, ya que en el campo había “caña hachada, apilada y quemada, y que una parte fue levantada por una máquina cargadora”. Además, el reporte señaló que, por efecto del viento, la gran cantidad de humo originado por el incendio del rastrojo y de la maloja se orientó hacia las viviendas que están ubicadas en el sector norte de la finca.
Tras analizar las pruebas recogidas, el fiscal Rojas evaluó que, “como consecuencia del incendio, existió un peligro concreto para la salud de las personas residente en el lugar, ya que un incendio de grandes dimensiones ocasiona, entre otros efectos, humo y cenizas que contaminan el medio ambiente y que repercuten en la salud de la población”.
Las fuentes de la investigación precisaron, además, que el informe pericial de los Bomberos de la Policía de Tucumán indicó que el incendio no fue accidental, y que tiene “directa vinculación con los beneficios económicos que esta práctica (la quema de caña) otorga a los propietarios o a los arrendatarios de las fincas cañeras”. Para solicitar las detenciones, el fiscal también consideró que luego del primer incendio, los presuntos autores regresaron a la finca el viernes pasado y, según la investigación, ejecutaron el mismo procedimiento.
Las fuentes de la investigación explicaron que Rojas actuó de oficio, en cumplimiento de las disposiciones del Ministro Fiscal de la Corte Suprema de Justicia, Edmundo Jiménez, según las cuales “todos los fiscales con competencia penal en la provincia deben asumir la competencia provincial en los hechos de incendios o contra la salud pública, cuando éstos afecten a las personas o al medio ambiente”.
La semana pasada, el juez Juan Francisco Pisa rechazó el pedido de detención del empresario Ricardo Trápani, a quien el fiscal de la X° Nominación, había acusado por la quema de cañas en un predio ubicado en las cercanías de Lomas de Tafí.
Las fuentes de la investigación señalaron que los testimonios recogidos y las pericias que llevó a cabo el fiscal Rojas permitieron comprobar que el primer incendio se produjo el 14 de octubre, y que el segundo se registró el viernes pasado. Además, los testigos del siniestro relataron que los bomberos voluntarios de Aguilares acudieron al lugar, y que trabajaron durante tres horas para sofocar llamas de grandes dimensiones.
El humo que derivó del fuego afectó la visibilidad en la ruta 331, así como a los vecinos de las casas ubicadas en las cercanías. Por esta razón, los bomberos de Aguilares asistieron con oxígeno a las familias que residen en la zona.
Todos estos elementos sustentaron la decisión de Rojas para solicitar, en primer lugar, la detención de los sospechosos Hernán Víctor Fadel, de 26 años, y Alfredo Víctor Fadel, de 64. Las fuentes de la investigación indicaron que el segundo de los sospechosos presentó certificados médicos para dar cuenta que padece enfermedades que lo obligan a realizar controles médicos permanentes. Por este motivo, Rojas suspendió su pedido de detención.
Según los testimonios que obtuvo el fiscal, el 14 de octubre una camioneta blanca ingresó al campo. Del vehículo descendieron dos personas que, de acuerdo a la investigación, comenzaron a juntar hojas de caña y les prendieron fuego. Después, en el sector sur de la finca, continuaron con la misma acción.
El informe técnico de la Sub Unidad de Bomberos de Concepción recalcó que la quema de caña había sido programada, ya que en el campo había “caña hachada, apilada y quemada, y que una parte fue levantada por una máquina cargadora”. Además, el reporte señaló que, por efecto del viento, la gran cantidad de humo originado por el incendio del rastrojo y de la maloja se orientó hacia las viviendas que están ubicadas en el sector norte de la finca.
Tras analizar las pruebas recogidas, el fiscal Rojas evaluó que, “como consecuencia del incendio, existió un peligro concreto para la salud de las personas residente en el lugar, ya que un incendio de grandes dimensiones ocasiona, entre otros efectos, humo y cenizas que contaminan el medio ambiente y que repercuten en la salud de la población”.
Las fuentes de la investigación precisaron, además, que el informe pericial de los Bomberos de la Policía de Tucumán indicó que el incendio no fue accidental, y que tiene “directa vinculación con los beneficios económicos que esta práctica (la quema de caña) otorga a los propietarios o a los arrendatarios de las fincas cañeras”. Para solicitar las detenciones, el fiscal también consideró que luego del primer incendio, los presuntos autores regresaron a la finca el viernes pasado y, según la investigación, ejecutaron el mismo procedimiento.
Las fuentes de la investigación explicaron que Rojas actuó de oficio, en cumplimiento de las disposiciones del Ministro Fiscal de la Corte Suprema de Justicia, Edmundo Jiménez, según las cuales “todos los fiscales con competencia penal en la provincia deben asumir la competencia provincial en los hechos de incendios o contra la salud pública, cuando éstos afecten a las personas o al medio ambiente”.
La semana pasada, el juez Juan Francisco Pisa rechazó el pedido de detención del empresario Ricardo Trápani, a quien el fiscal de la X° Nominación, había acusado por la quema de cañas en un predio ubicado en las cercanías de Lomas de Tafí.
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