Nadie vio a los “escruchantes” de Barrio Sur

Nadie vio a los “escruchantes” de Barrio Sur

Un grupo de asaltantes “reventó” las puertas de dos departamentos para llevarse joyas y dinero; no se conoce el monto de la pérdida El asalto ocurrió alrededor de las 16.30 en un edificio ubicado en 9 de Julio al 300. Todavía no hay sospechosos identificados

SIN LÍMITES. Los asaltantes destrozaron a golpes las puertas de los departamentos sin preocuparse por el ruido.   SIN LÍMITES. Los asaltantes destrozaron a golpes las puertas de los departamentos sin preocuparse por el ruido.
28 Septiembre 2014
Temor. Eso es lo que se veía anoche en las caras de los vecinos que viven en un edificio ubicado en 9 de Julio al 300. Tienen portero durante todo el día y moran a sólo dos cuadras de la Seccional 2ª, pero la seguridad no es un bien del cual puedan jactarse. Es que allí ayer ingresaron asaltantes, según sospechan los vecinos, alrededor de las 16.30. “A esa hora se escucharon algunos ruidos, pero como se suelen hacer reparaciones nadie pensó que se podía tratar de un robo”, dijo uno de los propietarios que prefirió reservar su nombre.

Los ruidos provenían del sexto piso en donde un grupo de asaltantes “reventó” las puertas de dos departamentos para apoderarse de dinero y joyas. La preocupación invadía cada comentario de los vecinos hasta que uno de ellos dijo: “estos tipos estaban informados y conocían el movimiento del edificio”.

Silvia García vive en Concepción, pero sus tres hijas (de 18, 20 y 24 años) viven en la capital porque son estudiantes universitarias. “Ellas salieron al mediodía del edificio porque tenían que rendir y después se fueron a Monteros. Destrozaron todo el departamento y no dejaron nada en su lugar. Se ve que estaban buscando plata porque dejaron las computadoras y el televisor”, explicó.

La puerta de madera del departamento estaba partida a la altura de la cerradura. Al parecer, le dieron un golpe para poder romperla. “No sé qué estaban buscando. Ya no sabemos dónde vamos a vivir porque esto es un edificio cerrado, pero igual pudieron entrar”, se lamentó García. Las universitarias viven en el departamento desde hace casi dos años y esta es la primera vez que son víctimas de este tipo de robo. “Tuvieron tiempo para dar vuelta todo. Lo que no entiendo es que ni siquiera se llevaron las tablets de mis hijas”, concluyó la mujer.

Sin sospechosos
Su cuñado, Luciano Aráoz, fue el primero en llegar al departamento y acompañó al personal de la Policía Científica que recolectó pruebas para intentar identificar a los asaltantes. “Sacaron huellas dactilares y nos dijeron que fuéramos a hacer la denuncia en la comisaría. No se sabe cómo hicieron para entrar al edificio porque justo en ese horario no estaba el portero. Vinieron acá y como no encontraron nada, se fueron al otro”, explicó.

En el departamento de al lado, en el mismo piso, tampoco había nadie cuando los asaltantes destrozaron la puerta. Y, según contaron los vecinos, sólo revolvieron una habitación en la que habrían encontrado dinero y joyas. Pero, de igual modo que en la casa de las universitarias, no se llevaron ninguno de los artefactos de valor que había en el lugar.

El dueño del otro departamento que fue asaltado dijo temer miedo por su familia y se excusó cuando se le preguntó el nombre. Aún así, cuando se le preguntó si estaba sorprendido por las características del robo, destacó: “esto no es nada raro. Se sabe que en Barrio Sur ya se hicieron marchas de protesta por la inseguridad. Y en este edificio, hace dos años, le robaron al portero que vive en el séptimo piso”.

Varias reparticiones de la Policía intervinieron en el caso. Según dijeron los vecinos, al lugar fueron efectivos del 911, de la Seccional 2ª y de Criminalística. La investigación se enviará a la Fiscalía I, a cargo de Marta Rivadeneira. El temor y la inseguridad siguen creciendo en Barrio Sur.

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