Respalda a soldados y piensa en dedicatorias

Respalda a soldados y piensa en dedicatorias

Bernasconi confía en su equipo para regalar el triunfo a Mirkin y a De Camilo

UN TRIUNFO LE DARÁ AIRE. Bernasconi sólo piensa en ganar mañana para, aunque tardío, permitir el despegue del equipo. UN TRIUNFO LE DARÁ AIRE. Bernasconi sólo piensa en ganar mañana para, aunque tardío, permitir el despegue del equipo.
27 Septiembre 2014
Piensa en lo que pasó y en lo que viene. Osvaldo Bernasconi está como en un momento de transición, donde debe ocuparse de que el equipo consiga ganar de una vez (ante Central Córdoba), pero sin dejar de agradecer a aquellos que de nuevo le dieron la chance de reivindicarse. “Hoy me debo a Oscar Mirkin y a Claudio De Camilo, de alguna forma tengo que retribuirles... Lo que más quiero es ganar mañana para regalarles el triunfo a estas dos grandes personas, porque si hoy estoy en el cargo es pura y exclusivamente por ellos, que me pidieron que me quede”, dijo el DT.

Bernasconi contó que en los malos momentos como estos las charlas con sus jugadores son reiteradas. Por eso banca a sus soldados. “Sobre todo hablo con los defensores, porque pierden un solo mano a mano ante un rival que no hace daño y luego todo se viene abajo. Pero al ser un error nuestro, es algo que se puede corregir porque tienen experiencia y se brindan por completo”, analizó el DT que aún no pensó cambios (más que los obligados) para jugar en Santiago del Estero.

Pese a que, antes que nada, están sus ganas de volver a sumar de a tres, Bernasconi también quiso aclarar otra situación. “Nunca exigí plata y no soy de exigir; el que me conoce sabe que soy una persona de bien. Al decir esas cosas me están haciendo daño, y a mi familia también. Por eso quiero reiterar que no hay una cuestión de plata acá, sólo que me debo a Mirkin y De Camilo. Ellos tienen que decir qué va a ser de mí. Si gano o si tengo en mente irme y ellos me piden quedarme, me debo tanto a ellos, que me tengo que quedar…”, entendió.

Pero Bernasconi no hace oídos sordos a las explicaciones que piden los hinchas y también tuvo palabras para ellos: “Uno se siente en deuda con ellos. Siente vergüenza y muchas cosas... Pero la procesión va por dentro. No vine a robar. Tengo un sentimiento por el club y lo quiero. Que la gente se quede tranquila, que cuando tenga que dar un paso al costado lo va a dar, porque soy hombre de bien”.

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