25 Septiembre 2014
La investigación judicial de los más de 15 robos que fueron perpetrados en los negocios del comerciante Marcelo Carmena en el último año y medio sumó esta semana un nuevo avance procesal.
El lunes, la fiscala Adriana Giannoni requirió la prisión preventiva para Germán “El Mocho” Zamudio que sería uno de los autores del robo cometido -el 8 de agosto pasado- en un centro de pago ubicado en Jujuy al 100 y ayer se informó que durante un allanamiento realizado en un barrio del Gran San Miguel de Tucumán se recuperaron unos $ 10.000 de los $ 30.000 que otros dos asaltantes le habían robado a un empleado de Carmena el 29 de ese mismo mes en la esquina de Monteagudo y España.
Los asaltantes que se hicieron pasar por policías para robarle los $ 30.000 de la recaudación de ese día a Franklin Campos, el empleado de Carmena que fue víctima del robo, dejaron la motocicleta en la que circulaban (una Honda Falcon) y un handy en el lugar del hecho cuando emprendieron su huida. Y esas, fueron las pruebas que utilizaron los investigadores de la división Delitos Contra la Propiedad, que comanda el comisario Hugo Cabezas para llegar a la casa que uno de los presuntos autores de este delito tiene en el barrio Soeme, en Las Talitas.
“La moto que dejaron los asaltantes en la esquina de España y Monteagudo no era un vehículo robado sino que tuvo varios propietarios. Y la última persona que la tuvo en su poder es el dueño de la casa en la que se realizó el allanamiento”, explicó Cabezas. En esa vivienda, según habían confirmado fuentes de la investigación, se recuperaron los $ 10.000 que serían parte del botín que se llevaron los asaltantes. Además del dinero, la Policía se incautó de documentación que, se piensa, será útil para la pesquisa. Sin embargo, el sospechoso no estaba en la vivienda cuando se realizó el procedimiento por lo que todavía continúa prófugo de la Justicia. En este marco se informó que el cómplice del fugitivo pudo ser identificado y que también está siendo buscado por los uniformados.
Por otra parte, se informó que esta motocicleta también habría sido utilizada en un robo que se cometió el año pasado en el sur de la provincia. Por lo que ahora se intenta determinar si el sujeto al que se buscó en el barrio Soeme también está vinculado con ese delito. Esa pesquisa está a cargo de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional Sur.
A su vez, Carmena dijo estar conforme con el avance de la investigación. “Es increíble que muchas de las causas no hayan sido enviadas a tribunales. Antes ni siquiera había una investigación pero ahora se están superando mis expectativas. El trabajo que vienen haciendo la Policía y la fiscal es impecable”, concluyó el comerciante.
El lunes, la fiscala Adriana Giannoni requirió la prisión preventiva para Germán “El Mocho” Zamudio que sería uno de los autores del robo cometido -el 8 de agosto pasado- en un centro de pago ubicado en Jujuy al 100 y ayer se informó que durante un allanamiento realizado en un barrio del Gran San Miguel de Tucumán se recuperaron unos $ 10.000 de los $ 30.000 que otros dos asaltantes le habían robado a un empleado de Carmena el 29 de ese mismo mes en la esquina de Monteagudo y España.
Los asaltantes que se hicieron pasar por policías para robarle los $ 30.000 de la recaudación de ese día a Franklin Campos, el empleado de Carmena que fue víctima del robo, dejaron la motocicleta en la que circulaban (una Honda Falcon) y un handy en el lugar del hecho cuando emprendieron su huida. Y esas, fueron las pruebas que utilizaron los investigadores de la división Delitos Contra la Propiedad, que comanda el comisario Hugo Cabezas para llegar a la casa que uno de los presuntos autores de este delito tiene en el barrio Soeme, en Las Talitas.
“La moto que dejaron los asaltantes en la esquina de España y Monteagudo no era un vehículo robado sino que tuvo varios propietarios. Y la última persona que la tuvo en su poder es el dueño de la casa en la que se realizó el allanamiento”, explicó Cabezas. En esa vivienda, según habían confirmado fuentes de la investigación, se recuperaron los $ 10.000 que serían parte del botín que se llevaron los asaltantes. Además del dinero, la Policía se incautó de documentación que, se piensa, será útil para la pesquisa. Sin embargo, el sospechoso no estaba en la vivienda cuando se realizó el procedimiento por lo que todavía continúa prófugo de la Justicia. En este marco se informó que el cómplice del fugitivo pudo ser identificado y que también está siendo buscado por los uniformados.
Por otra parte, se informó que esta motocicleta también habría sido utilizada en un robo que se cometió el año pasado en el sur de la provincia. Por lo que ahora se intenta determinar si el sujeto al que se buscó en el barrio Soeme también está vinculado con ese delito. Esa pesquisa está a cargo de la Brigada de Investigaciones de la Unidad Regional Sur.
A su vez, Carmena dijo estar conforme con el avance de la investigación. “Es increíble que muchas de las causas no hayan sido enviadas a tribunales. Antes ni siquiera había una investigación pero ahora se están superando mis expectativas. El trabajo que vienen haciendo la Policía y la fiscal es impecable”, concluyó el comerciante.
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