El informe de la Comisión Nacional sobre la Desaparición de
Personas (Conadep), conocido como el "Nunca Más", que recopiló
denuncias sobre violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura
cívico-militar, cumple hoy 30 años desde que fue entregado por el escritor
Ernesto Sábato al entonces presidente Raúl Alfonsín.
El informe probó la existencia de un plan sistemático de
desaparición, tortura y exterminio puesto en práctica en la Argentina a partir
del 24 de marzo de 1976, y por ello fue el documento clave para el Juicio a las
Juntas realizado en 1985.
El 20 de septiembre de 1984, la Comisión llevó ante Alfonsín
el resultado del primer informe sobre delitos de lesa humanidad que se
cometieron durante la dictadura, que se extendió desde el 24 de marzo de 1976
hasta el 10 de diciembre de 1983, cuando asumió el gobierno radical.
La Conadep había sido creada por Alfonsín el 15 de diciembre
de 1983, cinco días después de haber asumido la Presidencia, para investigar
"las gravísimas violaciones a los derechos humanos", recopilar
"denuncias y pruebas" para remitirlas a la Justicia e intentar
determinar "el destino de las personas desaparecidas".
Con 70 mil personas pidiendo justicia en la Plaza de Mayo, el escritor Ernesto Sábato –presidente de la Comisión- ingresó el 20 de
septiembre de 1984 a la Casa Rosada para entregar el informe que se traduciría
en un libro, con el título "Nunca Más".
En el informe se describió con detalles la instrumentación
del terrorismo de Estado, que incluyó secuestros de adultos y niños, torturas,
el entierro de cadáveres sin identificación en fosas comunes y la ubicación de
340 centros clandestinos de detención que funcionaron durante la dictadura.
Según el informe, "hasta la fecha de esta presentación, la Conadep estima en 8.960 el número de personas que continúan en situación de desaparición forzosa, sobre la base de las denuncias recibidas por esta Comisión, compatibilizadas con nóminas elaboradas por organismos nacionales e internacionales de Derechos Humanos".
"Esta cifra no puede considerarse definitiva toda vez
que la Conadep ha comprobado que son muchos los casos de desapariciones que no
fueron denunciados. Asimismo, no se descarta que pudiera estar incluida en la
nómina elaborada alguna persona que no comunicó oportunamente el cese de su
desaparición a los organismos pertinentes", decía el informe en sus
conclusiones.
La comisión presidida por Sábato estuvo integrada por el
jurista Ricardo Colombres, el cardiocirujano René Favaloro, el ingeniero
Hilario Fernández Long, el pastor metodista Carlos Gattinoni, el científico
Gregorio Klimovsky, el rabino norteamericano Marshall Meyer, el obispo Jaime de
Nevares, Eduardo Rabossi y la periodista Magdalena Ruiz Guiñazú.
También tomaron parte en la tarea, Graciela Fernández
Meijide, a cargo de la recepción de denuncias, y Santiago Marcelino López, Hugo
Diógenes Piucill y Horacio Hugo Huarte, en representación de la Cámara de
Diputados de la Nación.
El equipo de trabajo que se abocó a la tarea se completó con los secretarios Daniel Salvador (documentación y procesamiento de datos); Raúl Aragón (procedimientos), Alberto Mansur (asuntos legales) y Leopoldo Silgueira (administrativo). (Télam).