“La oposición va a necesitar diálogo tras 2015”

No hay un solo tema para hablar con Graciela Fernández Meijide (83 años). Madre de Pablo, de 17 años, secuestrado y desaparecido durante el terrorismo de Estado, en 1976; miembro de la Conadep y ex ministra de Desarrollo Social de Fernando de la Rúa, la dirigente hace gala permanente de que su memoria está intacta. Protagonista de momentos históricos del país, reflexiona y sienta postura sin esfuerzo alguno. Fernández Meijide estuvo en Tucumán, invitada por la fundación “Federalismo y Libertad”, para presentar la película “El Diálogo (El documental, una...). A continuación, los conceptos que expresó a LA GACETA.

1- El filme. “Se encontrarán con dos personas grandes. En mi caso, tenía 82 cuando se filmó y (ex integrante de Montoneros) Héctor Leis, 70, que transitaron por distintos espacios de acción durante los 70’ y que hablan de esa época. Que pueden hacerlo con respeto y escuchando al otro. Tal vez uno está con una sensación de tanta carencia de diálogo, por lo menos a nivel público. El kirchnerismo-antikirchnerismo ha llegado a atravesar familias. Sólo recuerdo que pasó con el peronismo-antiperonismo. Después del 83’, uno creía que eso estaba zanjado. Desgraciadamente, somos capaces de repetir experiencias embromadas”.

2-El perdón. “No esperábamos que secuestraran a nuestros hijos y entiendo el dolor de todo el mundo. Lo que veo es que de la lucha armada revolucionaria, muchos han salido a revalorizar la vida, a reconocer que no hay muertes buenas ni malas y que, en la política, la confrontación tiene que ser de otra manera. Pero lo que hizo Leis no lo hicieron las cúpulas guerrilleras ni tampoco lo hicieron las Fuerzas Armadas. Videla se murió reivindicando lo que habían hecho. Como si no hubieran tenido nada que ver ni con la tortura, la desaparición, la tirada al agua de los cadáveres o con el robo de bebés. Como si todo eso hubiese estado justificado. Me parece que necesitamos que desde distintos lugares se pida perdón por lo que hicieron sufrir”.

3- El fin del ciclo “K”. “(El kirchnerismo) está saliendo del Gobierno, con pérdida del poder. No hay más que mirar como están avanzando los juicios (contra funcionarios). Espero que la oposición se haga cargo de que para construir después de 2015 va a necesitar mucho diálogo. Y, si no quiere que la sociedad siga creyendo que la corporación que más asegura ganar dinero es la política, van a tener que modificar muchas cosas para hacer política”.

5- UNEN- la Alianza. “(UNEN) tiene distintas posibilidades, por el contexto económico. Para la Alianza fue un momento económico muy difícil y político, por la renuncia del vicepresidente (Carlos Álvarez) que empeoró todo. Hoy, China e India van a querer seguir comiendo cuatro comidas diarias. El desafío es crear agroindustria”.

6- La caída de De la Rúa. “No se pudo probar (en la Justicia que los saqueos hayan estado organizados). Había una debilidad y una imposibilidad de construir mayor compromiso con otras fuerzas. Hubiese sido el momento de llamar a un gobierno de unidad nacional. Y si el peronismo no hubiera aceptado, hubiera sido su responsabilidad. En política, como en física, cuando hay un espacio vacío, algo lo ocupa. No quiere decir que no sea cierto que muchos de los saqueos puedan haber sido estimulados y no sé si por (Eduardo) Duhalde (como acusó De la Rúa) o los intendentes creativos del Conurbano. Lo que sí para mí fue una maniobra de la Policía de la Capital fue la muerte de gente en la avenida de Mayo. Eso era para sacudirse de encima al jefe de la policía, a quien no quería la policía de calle. De civil, mataron gente que ni siquiera estaba en la Casa de Gobierno”.

7-La crisis de 2001 para la política. “Impactó fuertemente. Destrozó partidos y el que más perdió fue el radical, que era centenario. Hay una crisis de partidos por todos lados. Salvo el Partido Socialista, en Santa Fe, el resto está en formación: el de Scioli, el de Massa y el de Macri. Y están los radicales, que aún no saben si quedarán en UNEN o no”.

8-Desafíos para el próximo Gobierno. “Reconstruir un estado que está maltrecho, las instituciones que no están sirviendo y que cuando no sirven, perjudican a los más desvalidos. Habrá también que reconstruir toda la educación, hay que ponerse como objetivo que todos los chicos ingresen a la escuela a los tres años y que las universidades estén pensadas mirando cómo el mundo avanza y de desarrolla. En cuanto a la seguridad, creo que está ligada con el desarrollo económico, con el aumento del empleo y con la redistribución de las ganancias. Cuanta más pobreza hay en un país, también hay más desesperación y menos respeto por las reglas sociales”.