09 Septiembre 2014
BUENOS AIRES.- La presidenta Cristina Fernández de Kirchner se reunió ayer en Casa de Gobierno con los responsables de las principales terminales automotrices, las cámaras que los agrupan (Adefa y Acara) y sindicalistas del gremio Smata. El Gobierno y los empresarios finalizaron la reunión en Casa de Gobierno sin que se pudiera anunciar un acuerdo entre las partes, por lo que se resolvió pasar a un cuarto intermedio hasta mañana, señalaron fuentes empresarias.
Una vez finalizada la reunión, el presidente de Acara, Abel Bomrad, dijo a la prensa que analizaron con Cristina “ los problemas del sector” y agregó que cada empresa “va a hablar con el Gobierno” por separado. Aclaró además que la de hoy “no era una reunión para hacer acuerdos, ya que cada terminal tiene una realidad distinta”, y sostuvo que el plan gubernamental Procreauto “continuará hasta fin de año”. Fuentes sectoriales indicaron que al concluir el encuentro quedó claro que la adhesión de las terminales a la nueva versión del Procreauto será voluntaria. También se acordó que el objetivo es lograr una venta de 40.000 autos para diciembre de este año.
Durante la extensa reunión los funcionarios del Gobierno y los empresarios hicieron un repaso de la situación del sector, números de producción, venta y exportación, y se trazó una perspectiva de la industria en los últimos 10 años.
Acompañaron a la Presidenta el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi; el secretario de Comercio, Augusto Costa; y el presidente del Banco de la Nación Argentina, Juan Ignacio Forlón.
La industria automotriz estuvo representada por Josef Fidelis Senn, de Volskwagen; Enrique Alemañy, de Ford; Cristiano Rattazzi, de Fiat; Thierry Koskas, de Renault; Luis María Ureta Sáenz Peña, de Peugeot; Inda Hideki Kamiyama, de Honda, y Daniel Herrero, de Toyota. También participaron del encuentro, Isela Costantini, de General Motors; Joachim Maier, de Mercedes Benz; Natale Rigano, de Iveco; César Ramírez Rojas, de Scania; Daniel Fernández, de Adefa, y Ricardo Salomé y Alejandro Saubidet, de Acara. Por el gremio Smata estuvieron el dirigente y diputado nacional Oscar Romero, junto a Gustavo Morán y Ricardo De Simone.
La reunión comenzó a las 19.15. El miércoles pasado, la jefa de Estado había calificado a la situación del sector como “fuertemente deficitaria”, ya que la balanza comercial desde 2003 a la fecha arroja un saldo negativo de 33.000 millones de dólares.
En un acto que encabezó en Casa de Gobierno para anunciar la prórroga del Procreauto, la mandataria retomó su reclamo contra los automotrices que “encanutan los autos”. “Algunos comenzaron a boicotear el Procreauto”, aseguró Cristina al reafirmar su certeza de que las empresas no ofrecen a la venta todo su stock y llamó la atención respecto de que “por un lado suspenden gente diciendo que se cae la producción, y por el otro boicotean un programa” destinado a recuperar el dinamismo del sector. Y consideró “increíble que un sector subsidiado por su fuerte déficit ahora plantee estas cosas y boicotee políticas públicas destinadas a levantar suspensiones, a ayudar al sector y a que los argentinos tengan autos cero kilómetro”. (Télam-DyN)
Una vez finalizada la reunión, el presidente de Acara, Abel Bomrad, dijo a la prensa que analizaron con Cristina “ los problemas del sector” y agregó que cada empresa “va a hablar con el Gobierno” por separado. Aclaró además que la de hoy “no era una reunión para hacer acuerdos, ya que cada terminal tiene una realidad distinta”, y sostuvo que el plan gubernamental Procreauto “continuará hasta fin de año”. Fuentes sectoriales indicaron que al concluir el encuentro quedó claro que la adhesión de las terminales a la nueva versión del Procreauto será voluntaria. También se acordó que el objetivo es lograr una venta de 40.000 autos para diciembre de este año.
Durante la extensa reunión los funcionarios del Gobierno y los empresarios hicieron un repaso de la situación del sector, números de producción, venta y exportación, y se trazó una perspectiva de la industria en los últimos 10 años.
Acompañaron a la Presidenta el jefe de Gabinete, Jorge Capitanich; los ministros de Economía, Axel Kicillof, y de Industria, Débora Giorgi; el secretario de Comercio, Augusto Costa; y el presidente del Banco de la Nación Argentina, Juan Ignacio Forlón.
La industria automotriz estuvo representada por Josef Fidelis Senn, de Volskwagen; Enrique Alemañy, de Ford; Cristiano Rattazzi, de Fiat; Thierry Koskas, de Renault; Luis María Ureta Sáenz Peña, de Peugeot; Inda Hideki Kamiyama, de Honda, y Daniel Herrero, de Toyota. También participaron del encuentro, Isela Costantini, de General Motors; Joachim Maier, de Mercedes Benz; Natale Rigano, de Iveco; César Ramírez Rojas, de Scania; Daniel Fernández, de Adefa, y Ricardo Salomé y Alejandro Saubidet, de Acara. Por el gremio Smata estuvieron el dirigente y diputado nacional Oscar Romero, junto a Gustavo Morán y Ricardo De Simone.
La reunión comenzó a las 19.15. El miércoles pasado, la jefa de Estado había calificado a la situación del sector como “fuertemente deficitaria”, ya que la balanza comercial desde 2003 a la fecha arroja un saldo negativo de 33.000 millones de dólares.
En un acto que encabezó en Casa de Gobierno para anunciar la prórroga del Procreauto, la mandataria retomó su reclamo contra los automotrices que “encanutan los autos”. “Algunos comenzaron a boicotear el Procreauto”, aseguró Cristina al reafirmar su certeza de que las empresas no ofrecen a la venta todo su stock y llamó la atención respecto de que “por un lado suspenden gente diciendo que se cae la producción, y por el otro boicotean un programa” destinado a recuperar el dinamismo del sector. Y consideró “increíble que un sector subsidiado por su fuerte déficit ahora plantee estas cosas y boicotee políticas públicas destinadas a levantar suspensiones, a ayudar al sector y a que los argentinos tengan autos cero kilómetro”. (Télam-DyN)