07 Septiembre 2014
MAL PASO. Este último tramo del kirchnerismo va a sumar dos cuestiones candentes: la situación de Boudou en la Justicia y la recesión económica. dyn
BUENOS AIRES. - El vicepresidente, Amado Boudou, sumó un nuevo escándalo a sus procesamientos judiciales con las denuncias de que habría utilizado direcciones falsas en sus documentos de identidad, una de ellas en un médano en la playa, pero se mantiene firme en el cargo, pese a las críticas de la oposición.
Boudou fue procesado por supuestas negociaciones incompatibles con el cargo por su supuesta influencia cuando era ministro de Economía para levantar la quiebra que pesaba sobre la principal imprenta de billetes del país, Ciccone Calcográfica, y gestionar para que quede en manos de supuestos allegados; y también por presunta falsificación de documentos de un vehículo.
En las últimas horas surgió información de que el vicepresidente de Cristina Fernández habría utilizado en tres ocasiones domicilios presuntamente falsos en sus documentos de identidad.
El concejal del Partido de la Costa, Marcos García denunció ante la fiscalía que Boudou habría hecho figurar en su documento nacional de identidad la dirección Costanera 3365, cuando era funcionario de ese distrito.
Ese lugar, en realidad no existe ya que está sobre la playa, donde no existieron edificaciones habitables. Justo enfrente está la casa del intendente kirchnerista del Partido de la Costa y amigo de Boudou, Juan Pablo de Jesús.
La investigación realizada por el noticiero Telenoche del canal 13 de televisión, crítico del gobierno, surgió después de una investigación por el robo que sufrió hace unas semanas la pareja de Boudou en su vehículo de alta gama. Agustina Kämpfer denunció que le sustrajeron dos computadoras portátiles del auto de lujo.
Un periodista comenzó a investigar el robo al vehículo, que está a nombre de Boudou, y descubrió que el actual vicepresidente lo adquirió en 2008 con un DNI donde consta un cambio de domicilio en el cual según sus dueños nunca habitó Boudou. También habría utilizado un domicilio falso para inscribir otro vehículo años antes, según informó el diario “Clarín”. Antes de conocerse estas informaciones, la oposición volvió a reclamar el miércoles pasado que Boudou tome licencia como presidente del Senado, pero otra vez el proyecto de resolución opositor no consiguió los votos suficientes en la Cámara alta, donde el Frente para la Victoria (FpV) tiene mayoría junto
Los inicios
Boudou inició su carrera con el kirchnerismo en la Administración Nacional de Seguridad Social (AnSES), un organismo clave por los multimillonarios fondos que maneja. En 2009 fue designado ministro de Economía, durante el primer mandato de Fernández de Kirchner, quien lo eligió en 2011 como compañero de fórmula para su segunda presidencia.
Tras este nuevo escándalo con las presuntas direcciones falsas, la diputada Patricia Bullrich solicitó un juicio político a Boudou, al tiempo que se multiplicaron los cuestionamientos de gran parte del arco político opositor.
“Sería bueno que el vicepresidente explicara en el Congreso, por ejemplo, la necesidad de contar con tres domicilios falsos. Esta nueva situación -cuanto menos irregular- que vuelve a configurarse en torno a Boudou robustece aún más nuestra postura y nuestra creencia de que ejerce un mal desempeño de sus funciones, independientemente de los delitos que se le pudieran probar y de que la inhabilidad moral para el ejercicio de su cargo ya estaría demostrada”, sostuvo Bullrich, líder del partido Unión por Todos, en su pedido de juicio político.
“Cristina se equivocó”
El escritor y filósofo José Pablo Feinmann, cercano al gobierno, cuestionó al vicepresidente: “Boudou no tiene condiciones para vice y no las tuvo nunca”, declaró al diario “El Cronista”.
“Creo que Cristina lo puso para dar una imagen joven del Gobierno, pero se equivocó porque eligió a un joven muy revoltoso”, sostuvo el filósofo, quien pidió que el funcionario salga a aclarar su “situación, rápido, frente a la sociedad, claramente y sin demoras”.
El escándalo que envuelve a Boudou parece no preocupar a la jefa de Estado, al menos públicamente, ya que está decidida a sostenerlo por el momento en el cargo.
Los tiempos judiciales parecen sin embargo acelerarse con la nueva audiencia fijada para este mes en la causa Ciccone, que abriría nuevos frentes de tormenta en medio de un clima económico recesivo que complica el último tramo del gobierno kirchnerista.
Boudou fue procesado por supuestas negociaciones incompatibles con el cargo por su supuesta influencia cuando era ministro de Economía para levantar la quiebra que pesaba sobre la principal imprenta de billetes del país, Ciccone Calcográfica, y gestionar para que quede en manos de supuestos allegados; y también por presunta falsificación de documentos de un vehículo.
En las últimas horas surgió información de que el vicepresidente de Cristina Fernández habría utilizado en tres ocasiones domicilios presuntamente falsos en sus documentos de identidad.
El concejal del Partido de la Costa, Marcos García denunció ante la fiscalía que Boudou habría hecho figurar en su documento nacional de identidad la dirección Costanera 3365, cuando era funcionario de ese distrito.
Ese lugar, en realidad no existe ya que está sobre la playa, donde no existieron edificaciones habitables. Justo enfrente está la casa del intendente kirchnerista del Partido de la Costa y amigo de Boudou, Juan Pablo de Jesús.
La investigación realizada por el noticiero Telenoche del canal 13 de televisión, crítico del gobierno, surgió después de una investigación por el robo que sufrió hace unas semanas la pareja de Boudou en su vehículo de alta gama. Agustina Kämpfer denunció que le sustrajeron dos computadoras portátiles del auto de lujo.
Un periodista comenzó a investigar el robo al vehículo, que está a nombre de Boudou, y descubrió que el actual vicepresidente lo adquirió en 2008 con un DNI donde consta un cambio de domicilio en el cual según sus dueños nunca habitó Boudou. También habría utilizado un domicilio falso para inscribir otro vehículo años antes, según informó el diario “Clarín”. Antes de conocerse estas informaciones, la oposición volvió a reclamar el miércoles pasado que Boudou tome licencia como presidente del Senado, pero otra vez el proyecto de resolución opositor no consiguió los votos suficientes en la Cámara alta, donde el Frente para la Victoria (FpV) tiene mayoría junto
Los inicios
Boudou inició su carrera con el kirchnerismo en la Administración Nacional de Seguridad Social (AnSES), un organismo clave por los multimillonarios fondos que maneja. En 2009 fue designado ministro de Economía, durante el primer mandato de Fernández de Kirchner, quien lo eligió en 2011 como compañero de fórmula para su segunda presidencia.
Tras este nuevo escándalo con las presuntas direcciones falsas, la diputada Patricia Bullrich solicitó un juicio político a Boudou, al tiempo que se multiplicaron los cuestionamientos de gran parte del arco político opositor.
“Sería bueno que el vicepresidente explicara en el Congreso, por ejemplo, la necesidad de contar con tres domicilios falsos. Esta nueva situación -cuanto menos irregular- que vuelve a configurarse en torno a Boudou robustece aún más nuestra postura y nuestra creencia de que ejerce un mal desempeño de sus funciones, independientemente de los delitos que se le pudieran probar y de que la inhabilidad moral para el ejercicio de su cargo ya estaría demostrada”, sostuvo Bullrich, líder del partido Unión por Todos, en su pedido de juicio político.
“Cristina se equivocó”
El escritor y filósofo José Pablo Feinmann, cercano al gobierno, cuestionó al vicepresidente: “Boudou no tiene condiciones para vice y no las tuvo nunca”, declaró al diario “El Cronista”.
“Creo que Cristina lo puso para dar una imagen joven del Gobierno, pero se equivocó porque eligió a un joven muy revoltoso”, sostuvo el filósofo, quien pidió que el funcionario salga a aclarar su “situación, rápido, frente a la sociedad, claramente y sin demoras”.
El escándalo que envuelve a Boudou parece no preocupar a la jefa de Estado, al menos públicamente, ya que está decidida a sostenerlo por el momento en el cargo.
Los tiempos judiciales parecen sin embargo acelerarse con la nueva audiencia fijada para este mes en la causa Ciccone, que abriría nuevos frentes de tormenta en medio de un clima económico recesivo que complica el último tramo del gobierno kirchnerista.
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