30 Agosto 2014
MADRID.- España ya no quiere más derrotas honrosas ante Estados Unidos. Tras perder las dos últimas finales olímpicas, el Mundial en casa que comienza hoy (debutan ante Irán, en Granada) parece ser la gran oportunidad.
La imagen de LeBron James y Kobe Bryant, ambos ausentes en esta cita, felicitando a Pau Gasol tras la final de Londres 2012 fue el reconocimiento a un conjunto español capaz de desafiar a las grandes estrellas pero víctima siempre: en Atenas 2004, en Pekín 2008 y en la capital británica.
“Nosotros tenemos un equipo hecho”, comparó Gasol antes de un evento ideado para que los dos favoritos no se vean las caras hasta una hipotética final. No falta nadie en el plantel español, que recupera a Gasol, Juan Carlos Navarro, Felipe Reyes y a Serge Ibaka.
“No podemos obsesionarnos con Estados Unidos”, pidió Gasol, consciente, sin embargo, de que la versión Mundial es más accesible que el “Dream Team” olímpico. Tras las numerosas deserciones, el técnico estadounidense, Mike Krzyzewski, tuvo que conformar un plantel joven, pero repleto de talento. “Otros equipos tienen ventaja porque han estado juntos durante años. Nosotros, en cambio, apenas unos días”, alertó Krzyzewski, que sólo tuvo una derrota como seleccionador, en las semifinales del Mundial de 2006. España espera infligirle la segunda y sacarse una espina. (DPA)
La imagen de LeBron James y Kobe Bryant, ambos ausentes en esta cita, felicitando a Pau Gasol tras la final de Londres 2012 fue el reconocimiento a un conjunto español capaz de desafiar a las grandes estrellas pero víctima siempre: en Atenas 2004, en Pekín 2008 y en la capital británica.
“Nosotros tenemos un equipo hecho”, comparó Gasol antes de un evento ideado para que los dos favoritos no se vean las caras hasta una hipotética final. No falta nadie en el plantel español, que recupera a Gasol, Juan Carlos Navarro, Felipe Reyes y a Serge Ibaka.
“No podemos obsesionarnos con Estados Unidos”, pidió Gasol, consciente, sin embargo, de que la versión Mundial es más accesible que el “Dream Team” olímpico. Tras las numerosas deserciones, el técnico estadounidense, Mike Krzyzewski, tuvo que conformar un plantel joven, pero repleto de talento. “Otros equipos tienen ventaja porque han estado juntos durante años. Nosotros, en cambio, apenas unos días”, alertó Krzyzewski, que sólo tuvo una derrota como seleccionador, en las semifinales del Mundial de 2006. España espera infligirle la segunda y sacarse una espina. (DPA)
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