26 Agosto 2014
TENSA ESPERA. Boudou denunció que le robaron computadoras del auto, pero el fiscal duda de la historia. dyn (archivo)
BUENOS AIRES.- Agustina Kämpfer, la pareja del vicepresidente, Amado Boudou, fue citada para el próximo jueves, a las 10.30, por el juez federal Julián Ercolini a declarar como testigo en la causa en la que denunció el robo de pertenencias que se encontraban en un auto Audi A4 del funcionario. Como la denuncia de la sustracción la hizo Boudou, la justicia federal se hizo cargo del caso, porque el hecho podría tener relación con el cargo del segundo en la línea de la sucesión presidencial.
Fuentes judiciales informaron que Ercolini convocó a Kämpfer para que declare sobre el contenido de las dos computadoras y el disco rígido que le robaron el 13 de julio, día de la final del Mundial de Fútbol entre Argentina y Alemania.
Para el fiscal de la causa, Germán Moldes, hay dudas de que el robo existió: no hay fotos ni detalles del incidente. Por eso pidió la declaración de Kämpfer.
La Cámara Federal ordenó, la semana pasada, que el juez Ercolini sea quien investigue el hecho hasta determinar si el contenido de lo robado podría estar vinculado con las funciones de Boudou como vicepresidente.
De hecho, el fiscal federal Federico Delgado pidió que Boudou declare como testigo.
La Sala II de la Cámara había ordenado la declaración de Kämpfer para que aporte la información que había prometido sobre las computadoras y el disco rígido, lo que hasta ahora no hizo.
Según la denuncia, Kämpfer dejó estacionado el Audi A4 -propiedad de Boudou- en la calle La Pampa entre Cuba y Vuelta de Obligado, en el barrio porteño de Belgrano, y al volver encontró roto el vidrio de la ventanilla trasera izquierda, de donde robaron un bolso que contenía las computadoras y el disco rígido.
Para Moldes, la causa debe ser investigada ante la posibilidad “de que tales equipos contuvieran información sensible para los intereses del Estado o dirimentes de alguna de las investigaciones en curso ante este fuero, que involucran tanto al vicepresidente como a la denunciante”, en referencia a Kämpfer.
El fiscal espera que la pareja del funcionario amplíe su declaración para conocer el contenido de las computadoras.
Operación dudosa
Además, el robo de las computadoras tuvo incidencia en la investigación por el presunto delito de “dádivas” que investiga a Boudou, en el marco de la causa por la compra de autos de lujo cuando era ministro de Economía.
El fiscal de la causa, Ramiro González ya pidió las declaraciones juradas del vicepresidente de 2008, 2009 y 2010, para saber si es propietario, y desde cuándo, del Audi A4 del que robaron las PC y el disco rígido.
González quiere saber si el modo en que ese auto llegó a manos de Boudou se relaciona con la compra de 19 autos de lujo a una concesionaria Volkswagen, que aprobó el vice, operación que investiga la Justicia.
En diciembre de 2009, Boudou aprobó la adquisición sin licitación de los vehículos, a pesar de que el monto requería de una licitación. La compra se hizo a la concesionaria Guido Guidi, la misma que comercializa en el país la marca Audi. La sospecha que existe es que podría ser una dádiva como retribución a la adquisición directa de la nueva flota de autos para el Ministerio.
La operación incluyó 13 autos Bora, tres Passat y tres Vento por un total de $ 2,1 millones mediante una compra directa.
Además se determinó que “se pagó por cada auto más del que tenía como valor de mercado”, a pesar de lo cual la Sigen (Sindicatura General de la Nación), a cargo de Daniel Reposo, dijo que “los valores eran acordes”. (DyN-www.lanacion.com.ar)
Fuentes judiciales informaron que Ercolini convocó a Kämpfer para que declare sobre el contenido de las dos computadoras y el disco rígido que le robaron el 13 de julio, día de la final del Mundial de Fútbol entre Argentina y Alemania.
Para el fiscal de la causa, Germán Moldes, hay dudas de que el robo existió: no hay fotos ni detalles del incidente. Por eso pidió la declaración de Kämpfer.
La Cámara Federal ordenó, la semana pasada, que el juez Ercolini sea quien investigue el hecho hasta determinar si el contenido de lo robado podría estar vinculado con las funciones de Boudou como vicepresidente.
De hecho, el fiscal federal Federico Delgado pidió que Boudou declare como testigo.
La Sala II de la Cámara había ordenado la declaración de Kämpfer para que aporte la información que había prometido sobre las computadoras y el disco rígido, lo que hasta ahora no hizo.
Según la denuncia, Kämpfer dejó estacionado el Audi A4 -propiedad de Boudou- en la calle La Pampa entre Cuba y Vuelta de Obligado, en el barrio porteño de Belgrano, y al volver encontró roto el vidrio de la ventanilla trasera izquierda, de donde robaron un bolso que contenía las computadoras y el disco rígido.
Para Moldes, la causa debe ser investigada ante la posibilidad “de que tales equipos contuvieran información sensible para los intereses del Estado o dirimentes de alguna de las investigaciones en curso ante este fuero, que involucran tanto al vicepresidente como a la denunciante”, en referencia a Kämpfer.
El fiscal espera que la pareja del funcionario amplíe su declaración para conocer el contenido de las computadoras.
Operación dudosa
Además, el robo de las computadoras tuvo incidencia en la investigación por el presunto delito de “dádivas” que investiga a Boudou, en el marco de la causa por la compra de autos de lujo cuando era ministro de Economía.
El fiscal de la causa, Ramiro González ya pidió las declaraciones juradas del vicepresidente de 2008, 2009 y 2010, para saber si es propietario, y desde cuándo, del Audi A4 del que robaron las PC y el disco rígido.
González quiere saber si el modo en que ese auto llegó a manos de Boudou se relaciona con la compra de 19 autos de lujo a una concesionaria Volkswagen, que aprobó el vice, operación que investiga la Justicia.
En diciembre de 2009, Boudou aprobó la adquisición sin licitación de los vehículos, a pesar de que el monto requería de una licitación. La compra se hizo a la concesionaria Guido Guidi, la misma que comercializa en el país la marca Audi. La sospecha que existe es que podría ser una dádiva como retribución a la adquisición directa de la nueva flota de autos para el Ministerio.
La operación incluyó 13 autos Bora, tres Passat y tres Vento por un total de $ 2,1 millones mediante una compra directa.
Además se determinó que “se pagó por cada auto más del que tenía como valor de mercado”, a pesar de lo cual la Sigen (Sindicatura General de la Nación), a cargo de Daniel Reposo, dijo que “los valores eran acordes”. (DyN-www.lanacion.com.ar)
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