21 Agosto 2014
POR DIGNIDAD. El empresario asegura que defiende los derechos de su club al elegir dónde jugará de local. FOTO TOMADA DE TUCUMANSPORTS.COM
"En la vida no es todo plata", explica Marcelo Sáez, presidente de San Jorge, al argumentar por qué decidió recibir a San Martín en el estadio de Atlético y a puertas cerradas. "Este es un torneo corto, de 14 fechas y por lo que no se puede dar ningún tipo de ventaja", agregó.
"Lo único que hicimos es respetar la dignidad de nuestro club. El cuerpo técnico y los jugadores me pidieron jugar en Atlético y se lo aceptamos", comentó.
Sáez que fue duramente cuestionado por Claudio De Camilo, vicepresidente de San Martín, no quiso agrandar aún más la polémica. "Está confundiendo a la gente. Está transformando un partido de fútbol en una guerra. Además, lo que habla no representa el pensamiento del club, sino el suyo. Hay otros pares que no opinan lo mismo", agregó.
El mandamás del "Expreso" dijo además que no hay chances de que se mude el escenario. "Para que quede claro: como local, tengo derecho a elegir dónde jugar el encuentro. En este caso, elegí Atlético porque es el estadio más moderno y sin público visitante por la rivalidad que existe entre el dueño de casa y de San Martín. Este es un caso cerrado y me gustaría que se dejara de confundir a la gente", concluyó.
"Lo único que hicimos es respetar la dignidad de nuestro club. El cuerpo técnico y los jugadores me pidieron jugar en Atlético y se lo aceptamos", comentó.
Sáez que fue duramente cuestionado por Claudio De Camilo, vicepresidente de San Martín, no quiso agrandar aún más la polémica. "Está confundiendo a la gente. Está transformando un partido de fútbol en una guerra. Además, lo que habla no representa el pensamiento del club, sino el suyo. Hay otros pares que no opinan lo mismo", agregó.
El mandamás del "Expreso" dijo además que no hay chances de que se mude el escenario. "Para que quede claro: como local, tengo derecho a elegir dónde jugar el encuentro. En este caso, elegí Atlético porque es el estadio más moderno y sin público visitante por la rivalidad que existe entre el dueño de casa y de San Martín. Este es un caso cerrado y me gustaría que se dejara de confundir a la gente", concluyó.
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