07 Agosto 2014
Las autoridades de la Universidad Nacional de Tucumán (UNT) ya utilizan una parte del Rectorado, aunque, en su mayoría, este continúa tomado por estudiantes. La “recuperación” del sector se dio durante las primeras horas de la mañana de ayer. Según los estudiantes, cuando fueron a hacer la habitual ronda matutina de seguridad se dieron con la novedad.
“Esta mañana (por ayer) nos encontramos con un vallado frente al garage (La Madrid al 800), y lleno de personal de seguridad. Siempre estuvimos abiertos a dejar pasar gente, y nunca se nos informó de que precisaban usar oficinas”, dijo Iris Mecchia, vocera de la toma. Añadió que la secretaria Académica, Marta Juárez de Tuzza, les dijo que querían trabajar en temas urgentes de la UNT, como las áreas de Títulos y de Haberes. “Nunca se nos informó que necesitaban abrir oficinas; le dijimos que si hubiesen avisado, podían haberse acercado a la asamblea y lo debatíamos. Una vez les ofrecimos que nos digan cuánto personal iba a entrar y no había problema”, agregó.
Mauricio Bravo, otro vocero, subrayó que, a criterio de los estudiantes, las autoridades violentaron su medida, y adelantó que se prepararán mejor. “Sabían que la toma seguía. Tomaremos mayores recaudos sobre la seguridad interna, porque sabemos que por La Madrid pueden ingresar a las oficinas e, incluso, al patio central. El temor del desalojo está; a un compañero le preguntaron si había dormido bien anoche, porque ya no iban a dormir más acá”.
Un tercer vocero, Luciano Grupalli, responsabilizó a la rectora, Alicia Bardón, por la seguridad de los estudiantes: “mediante maniobras, buscan infructuosamente que nos dividamos e ilegalizar la huelga docente. Responsabilizamos a la autoridad por cualquier hecho de violencia: durante ocho días sostuvimos una toma pacífica, para que los docentes logren salario digno y estabilidad laboral”.
Bardón descartó que vaya a impulsar medidas violentas contra los estudiantes o un desalojo: “jamás permití una medida de fuerza, con nadie; jamás tuvimos una actitud contenciosa con los alumnos. Y jamás ni esta rectora ni históricamente los rectores de la UNT quisimos que Gendarmería ingrese a la universidad a desalojar estudiantes. Ni lo hicimos ni lo haré”.
Explicó que las autoridades ingresaron por la puerta de calle La Madrid porque estaba liberada. “Los estudiantes abandonaron (ese ingreso), que es por donde nosotros entramos. Pero, ¿cómo es posible que debamos pedir permiso para entrar a nuestro lugar de trabajo?”, dijo. También criticó a los estudiantes que mantienen tomado el Rectorado. “Esas son nuestras oficinas, estamos legítimamente autorizados a usarlas porque ganamos las elecciones. La medida ilegal de tomar un lugar público es de los que están ocupando”, cuestionó.
“Esta mañana (por ayer) nos encontramos con un vallado frente al garage (La Madrid al 800), y lleno de personal de seguridad. Siempre estuvimos abiertos a dejar pasar gente, y nunca se nos informó de que precisaban usar oficinas”, dijo Iris Mecchia, vocera de la toma. Añadió que la secretaria Académica, Marta Juárez de Tuzza, les dijo que querían trabajar en temas urgentes de la UNT, como las áreas de Títulos y de Haberes. “Nunca se nos informó que necesitaban abrir oficinas; le dijimos que si hubiesen avisado, podían haberse acercado a la asamblea y lo debatíamos. Una vez les ofrecimos que nos digan cuánto personal iba a entrar y no había problema”, agregó.
Mauricio Bravo, otro vocero, subrayó que, a criterio de los estudiantes, las autoridades violentaron su medida, y adelantó que se prepararán mejor. “Sabían que la toma seguía. Tomaremos mayores recaudos sobre la seguridad interna, porque sabemos que por La Madrid pueden ingresar a las oficinas e, incluso, al patio central. El temor del desalojo está; a un compañero le preguntaron si había dormido bien anoche, porque ya no iban a dormir más acá”.
Un tercer vocero, Luciano Grupalli, responsabilizó a la rectora, Alicia Bardón, por la seguridad de los estudiantes: “mediante maniobras, buscan infructuosamente que nos dividamos e ilegalizar la huelga docente. Responsabilizamos a la autoridad por cualquier hecho de violencia: durante ocho días sostuvimos una toma pacífica, para que los docentes logren salario digno y estabilidad laboral”.
Bardón descartó que vaya a impulsar medidas violentas contra los estudiantes o un desalojo: “jamás permití una medida de fuerza, con nadie; jamás tuvimos una actitud contenciosa con los alumnos. Y jamás ni esta rectora ni históricamente los rectores de la UNT quisimos que Gendarmería ingrese a la universidad a desalojar estudiantes. Ni lo hicimos ni lo haré”.
Explicó que las autoridades ingresaron por la puerta de calle La Madrid porque estaba liberada. “Los estudiantes abandonaron (ese ingreso), que es por donde nosotros entramos. Pero, ¿cómo es posible que debamos pedir permiso para entrar a nuestro lugar de trabajo?”, dijo. También criticó a los estudiantes que mantienen tomado el Rectorado. “Esas son nuestras oficinas, estamos legítimamente autorizados a usarlas porque ganamos las elecciones. La medida ilegal de tomar un lugar público es de los que están ocupando”, cuestionó.