31 Julio 2014
MOMENTO ÚNICO. Grondona, acompañado por su abogado Ricardo Falú, y el ex juez federal Manlio Martínez cuando se presentó ante la Justicia en 1983.
Tucumán no fue tierra desconocida para Julio Grondona. Este suelo del norte, el que “Don Julio” bien tenía como uno de los más futboleros del país, lo recibió tres veces desde que asumió la conducción del máximo organismo de fútbol nacional. Y claro, en cada una de aquellas visitas fue noticia.
- El 24 de septiembre de 1979: Grondona llegó invitado por Natalio Mirkin, entonces presidente de San Martín y con quien se enfrentó años más tarde. En su breve estadía, Grondona tocó varios temas, los mismos que comenzaba a atender como máximo directivo. La puja del interior con Buenos Aires, el éxito de la Selección juvenil y las derrotas de la mayor en manos de Yugoslavia y Alemania post Mundial conseguido, más otros temas candentes del momento quedaron registrados en boca de Grondona en su primer paso por la provincia.
- El 6 y 7 de abril de 1983 en marzo de 1983 AFA suspendió por siete fechas el estadio de San Martín debido a una agresión sufrida por el árbitro Juan Carlos Lousteau luego de dirigir al “santo” contra Argentinos, por el viejo Nacional. Pero Mirkin consideró excesivo el castigo, por lo que presentó un recurso de amparo ante la Justicia Federal, que finalmente le dio la razón.
Manlio Martínez, juez federal de aquel entonces, dispuso el procesamiento de Grondona acusado de desobediencia judicial, lo que obligó a “Don Julio” presentarse ante la Justicia para prestar declaración indagatoria. El hecho no pasó desapercibido puesto que nunca antes (ni después) Grondona vivió algo parecido. El conflicto se resolvió puesto que el club desistió luego de la acción judicial tras una audiencia de conciliación convocada por Martínez, a la que suscribieron ambos directivos.
“Aquel conflicto por un tema deportivo lo recuerdo como una anécdota más tanto de mi padre como de Grondona. El mismo fue producto de la pasión que ambos dirigentes tenían, y su impronta particular para dirigir uno AFA y el otro San Martín”, sostuvo Oscar Mirkin, hijo de Natalio y actual presidente “santo”, que el martes se reunió con Don Julio.
“El mismo Grondona me dijo antes de ayer: a pesar de las diferencias, si hay algo que valoré mucho de su padre era que podíamos, como dirigentes de gran envergadura y de convicciones, poder discutir y disentir en el marco de defender ideas y un compromiso de trabajo”, contó Mirkin, haciendo hincapié en la lucha de ideas que mantuvo su padre con Grondona, pero recordando con dolor al directivo fallecido.
Incluso, pese a las diferencias de aquel momento, Mirkin contó que Grondona valoró a Natalio. “Me dijo: ‘ojalá hubiera muchos dirigentes como su padre’, lo que habla del costado humano de él como directivo”, contó.
“Reconozco que fue un dirigente que se supo anticipar a los hechos”, fueron las palabras de Grondona para el hijo de Natalio. “Es que los torneos que hoy se organizan fueron impulsados en aquella época. La génesis de estos torneos estuvieron en sus cabezas, lo que muestra que a lo largo del tiempo los extremos se unen, ¿no?”, dijo Mirkin.
La última visita
- El 27 de septiembre de 1986: Grondona volvió a la provincia para participar del noveno aniversario de la Liga Tucumana de Fútbol y, como en la primera visita, se tomó el tiempo para hablar de las polémicas del momento. En ese entonces, el dirigente contó que sólo podía tomar como bromas las acusaciones de Daniel Passarella en su contra, sobre que él formaba la Selección Argentina en el Mundial de México ‘86 y presionaba al por entonces DT, Carlos Bilardo, para poner y sacar jugadores.
Pese a que nunca más volvió, a lo largo de los últimos años los dirigentes tucumanos también tuvieron llegada a Grondona. Claro que el caso más próximo fue la reunión que el mismo Oscar Mirkin mantuvo con el directivo en su vivienda de Puerto Madero. “Fue una charla amena, no de amigos. El hecho de que me haya invitado a su casa me hizo ver un lado humano del dirigente, de mucha sensibilidad. También hablamos del nuevo torneo y me dijo que era una de las últimas cosas que quería hacer. Ya no tenía muchas ganas, pero sentía que esto era importante, que el fútbol sea más federal”, contó Mirkin de aquella extensa charla.
Otros presidentes “santos” que fueron recibidos por Don Julio fueron Rubén Ale (la barra de San Martín hasta le dedicó una bandera luego de que el equipo fuera invitado por AFA a jugar en el Argentino B en 2006) y Jorge Garber, este último como representante del Argentino A en el Consejo Federal.
Atlético también tuvo llegada. Mario Leito fue atendido en más de una oportunidad por Grondona. El titular “decano” rescató la ayuda que recibía para solucionar los problemas de su club y el hecho de que siempre lo alentara a ocupar cargos en el comité ejecutivo.
Grondona conoció Tucumán mucho antes de ser presidente de la AFA. Según reveló en una nota reciente, pasó su luna de miel en la provincia. “Por eso le tengo tanto afecto”, confesó.
- El 24 de septiembre de 1979: Grondona llegó invitado por Natalio Mirkin, entonces presidente de San Martín y con quien se enfrentó años más tarde. En su breve estadía, Grondona tocó varios temas, los mismos que comenzaba a atender como máximo directivo. La puja del interior con Buenos Aires, el éxito de la Selección juvenil y las derrotas de la mayor en manos de Yugoslavia y Alemania post Mundial conseguido, más otros temas candentes del momento quedaron registrados en boca de Grondona en su primer paso por la provincia.
- El 6 y 7 de abril de 1983 en marzo de 1983 AFA suspendió por siete fechas el estadio de San Martín debido a una agresión sufrida por el árbitro Juan Carlos Lousteau luego de dirigir al “santo” contra Argentinos, por el viejo Nacional. Pero Mirkin consideró excesivo el castigo, por lo que presentó un recurso de amparo ante la Justicia Federal, que finalmente le dio la razón.
Manlio Martínez, juez federal de aquel entonces, dispuso el procesamiento de Grondona acusado de desobediencia judicial, lo que obligó a “Don Julio” presentarse ante la Justicia para prestar declaración indagatoria. El hecho no pasó desapercibido puesto que nunca antes (ni después) Grondona vivió algo parecido. El conflicto se resolvió puesto que el club desistió luego de la acción judicial tras una audiencia de conciliación convocada por Martínez, a la que suscribieron ambos directivos.
“Aquel conflicto por un tema deportivo lo recuerdo como una anécdota más tanto de mi padre como de Grondona. El mismo fue producto de la pasión que ambos dirigentes tenían, y su impronta particular para dirigir uno AFA y el otro San Martín”, sostuvo Oscar Mirkin, hijo de Natalio y actual presidente “santo”, que el martes se reunió con Don Julio.
“El mismo Grondona me dijo antes de ayer: a pesar de las diferencias, si hay algo que valoré mucho de su padre era que podíamos, como dirigentes de gran envergadura y de convicciones, poder discutir y disentir en el marco de defender ideas y un compromiso de trabajo”, contó Mirkin, haciendo hincapié en la lucha de ideas que mantuvo su padre con Grondona, pero recordando con dolor al directivo fallecido.
Incluso, pese a las diferencias de aquel momento, Mirkin contó que Grondona valoró a Natalio. “Me dijo: ‘ojalá hubiera muchos dirigentes como su padre’, lo que habla del costado humano de él como directivo”, contó.
“Reconozco que fue un dirigente que se supo anticipar a los hechos”, fueron las palabras de Grondona para el hijo de Natalio. “Es que los torneos que hoy se organizan fueron impulsados en aquella época. La génesis de estos torneos estuvieron en sus cabezas, lo que muestra que a lo largo del tiempo los extremos se unen, ¿no?”, dijo Mirkin.
La última visita
- El 27 de septiembre de 1986: Grondona volvió a la provincia para participar del noveno aniversario de la Liga Tucumana de Fútbol y, como en la primera visita, se tomó el tiempo para hablar de las polémicas del momento. En ese entonces, el dirigente contó que sólo podía tomar como bromas las acusaciones de Daniel Passarella en su contra, sobre que él formaba la Selección Argentina en el Mundial de México ‘86 y presionaba al por entonces DT, Carlos Bilardo, para poner y sacar jugadores.
Pese a que nunca más volvió, a lo largo de los últimos años los dirigentes tucumanos también tuvieron llegada a Grondona. Claro que el caso más próximo fue la reunión que el mismo Oscar Mirkin mantuvo con el directivo en su vivienda de Puerto Madero. “Fue una charla amena, no de amigos. El hecho de que me haya invitado a su casa me hizo ver un lado humano del dirigente, de mucha sensibilidad. También hablamos del nuevo torneo y me dijo que era una de las últimas cosas que quería hacer. Ya no tenía muchas ganas, pero sentía que esto era importante, que el fútbol sea más federal”, contó Mirkin de aquella extensa charla.
Otros presidentes “santos” que fueron recibidos por Don Julio fueron Rubén Ale (la barra de San Martín hasta le dedicó una bandera luego de que el equipo fuera invitado por AFA a jugar en el Argentino B en 2006) y Jorge Garber, este último como representante del Argentino A en el Consejo Federal.
Atlético también tuvo llegada. Mario Leito fue atendido en más de una oportunidad por Grondona. El titular “decano” rescató la ayuda que recibía para solucionar los problemas de su club y el hecho de que siempre lo alentara a ocupar cargos en el comité ejecutivo.
Grondona conoció Tucumán mucho antes de ser presidente de la AFA. Según reveló en una nota reciente, pasó su luna de miel en la provincia. “Por eso le tengo tanto afecto”, confesó.
Lo más popular