12 Julio 2014
El edificio de calle Muñecas 754 estaba deshabitado ayer a la mañana, después de que un departamento del 9° piso ardiera en llamas el jueves a la siesta. Todos los vecinos habían sido obligados a pasar la noche anterior fuera de ese lugar a modo de prevención. Antes de permitir que regresaran, personal de Bomberos, de EDET y Gasnor realizaron una minuciosa inspección para evitar inconvenientes.
“El edificio está clausurado, se están haciendo las pericias correspondientes para determinar cuál ha sido el origen del siniestro”, explicó Dolores Campopiano, la administradora del lugar. “Recién vino gente de EDET y habilitó la luz, ahora está trabajando personal de Gasnor porque nos obligaron a hacer una revisión interna de todo el edificio por una cuestión de seguridad”, agregó la mujer.
Un televisor
Todo indica que fue la explosión de un televisor LED lo que ocasionó el incendio. “Aparentemente el televisor levantó temperatura, explotó e hizo contacto con el acolchado y, como son pisos de parqué, se prendió todo”, contó Campopiano luego de hablar con los bomberos. Según dijo, la dueña de casa tuvo la intención de apagar las llamas, pero no pudo levantar el matafuegos.
La administradora remarcó que todas las instalaciones funcionaban a la perfección en el edificio, por eso se pudo combatir el fuego rápidamente. “También quiero destacar el trabajo de los bomberos y del personal de Defensa Civil, que actuaron a tiempo”, resaltó Campopiano.
Cuando volvieron a funcionar con normalidad los servicios de luz y gas, los vecinos tuvieron la oportunidad de regresar a sus departamentos aunque bajo la condición de mantener todos los ambientes ventilados.
Además, Campopiano explicó que había quedado agua -que alcanzaba el metro de altura- en el hueco del ascensor por lo que solo podían utilizarse las escaleras. “Hay vecinos que vinieron, ventilaron todo y volvieron a irse; otros directamente prefirieron no volver todavía”, indicó la administradora.
Para evitar cualquier inconveniente, Campopiano solicitó a la Policía que le enviara personal para reforzar la seguridad mientras los departamentos estén deshabitados.
El jueves a las 16, cuando se desató el fuego, debieron desalojar ese edificio y el que se encuentra al lado (al 772) por prevención. Las llamas y el humo eran visibles desde la calle, lo que alarmó a vecinos y transeúntes. Cerca de 30 bomberos, a cargo del comisario Néstor Osores, ayudaron a combatir el incendio.
“El edificio está clausurado, se están haciendo las pericias correspondientes para determinar cuál ha sido el origen del siniestro”, explicó Dolores Campopiano, la administradora del lugar. “Recién vino gente de EDET y habilitó la luz, ahora está trabajando personal de Gasnor porque nos obligaron a hacer una revisión interna de todo el edificio por una cuestión de seguridad”, agregó la mujer.
Un televisor
Todo indica que fue la explosión de un televisor LED lo que ocasionó el incendio. “Aparentemente el televisor levantó temperatura, explotó e hizo contacto con el acolchado y, como son pisos de parqué, se prendió todo”, contó Campopiano luego de hablar con los bomberos. Según dijo, la dueña de casa tuvo la intención de apagar las llamas, pero no pudo levantar el matafuegos.
La administradora remarcó que todas las instalaciones funcionaban a la perfección en el edificio, por eso se pudo combatir el fuego rápidamente. “También quiero destacar el trabajo de los bomberos y del personal de Defensa Civil, que actuaron a tiempo”, resaltó Campopiano.
Cuando volvieron a funcionar con normalidad los servicios de luz y gas, los vecinos tuvieron la oportunidad de regresar a sus departamentos aunque bajo la condición de mantener todos los ambientes ventilados.
Además, Campopiano explicó que había quedado agua -que alcanzaba el metro de altura- en el hueco del ascensor por lo que solo podían utilizarse las escaleras. “Hay vecinos que vinieron, ventilaron todo y volvieron a irse; otros directamente prefirieron no volver todavía”, indicó la administradora.
Para evitar cualquier inconveniente, Campopiano solicitó a la Policía que le enviara personal para reforzar la seguridad mientras los departamentos estén deshabitados.
El jueves a las 16, cuando se desató el fuego, debieron desalojar ese edificio y el que se encuentra al lado (al 772) por prevención. Las llamas y el humo eran visibles desde la calle, lo que alarmó a vecinos y transeúntes. Cerca de 30 bomberos, a cargo del comisario Néstor Osores, ayudaron a combatir el incendio.
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