La madre de Vanina cambió su declaración y dijo que el novio la mató tras una discusión

Antes de que la lleven a su casa para la reconstrucción del crimen de su hija Vanina Bellier, Alicia López pidió al fiscal Washington Navarro Dávila poder ampliar la declaración que había brindado. Ayer al mediodía, la mujer le dijo al representante del Ministerio Público que el disparo mortal fue realizado por Jesús Lizárraga, que ella presenció toda la escena, y que había callado porque estaba amenazada, contaron fuentes tribunalicias.

Durante la tarde, y por dos horas y media, el fiscal realizó la reconstrucción del crimen de Vanina en la casa de la víctima, ubicada en un pasaje sin nombre de Banda del Río Salí. Navarro Dávila hizo que los cuatro detenidos describieran, alternativamente, su versión del homicidio para tratar de esclarecer cómo mataron a la joven estudiante de enfermería, el jueves 3 de julio a la noche.

Tanto el abogado de Lizárraga, Juan Luis Hermosa, como Carlos Posse (es el defensor de López, de su hijo Matías Alejandro Bellier y de su sobrino Walter Enrique Pereyra) dijeron al finalizar la medida judicial que había sido favorable para sus representados. El fiscal, en tanto, se amparó en el secreto de sumario que decretó por 10 días y no adelantó cuál fue su conclusión de la reconstrucción del crimen.

Las versiones

La primera descripción del homicidio que había llegado al fiscal Diego López Ávila (que estuvo a cargo de la investigación hasta que comenzó la feria judicial, y que retomará la causa el lunes 21 de julio), es que se había tratado de un intento de robo. De acuerdo con esa versión, a Vanina la habían herido cuando iba en la moto con su novio, Lizárraga, y al esquivar a los ladrones les dispararon.

Una bala ingresó por la espalda de la joven, quien falleció en el Centro de Salud a las 23.45 (el supuesto robo, le dijeron al fiscal, había ocurrido a las 22.30 aproximadamente).

Esa coartada, sin embargo, se cayó. López Ávila le tomó declaración a Alicia López el sábado a la noche, y la mujer le dijo que el autor del disparo había sido su yerno. El muchacho fue detenido, acusado por el homicidio. La madre de Vanina dijo en esa oportunidad que salía del baño cuando escuchó un disparo, y que cuando entró a la habitación de su hija la vio cuando caía herida, y que ella le pidió que dijera que había sido un accidente. Por eso, había asegurado, sostuvo la versión del robo.

Lizárraga, en cambio, manifestó que se había tratado de un accidente, y que cuando se disparó el arma estaba presente López y un hijo discapacitado de la mujer.

Cuando Navarro Dávila se hizo cargo de la investigación del crimen, pidió la detención de la madre, del hermano y del primo de la víctima. “A los varones los detiene porque estaban dentro de la casa y ellos aseguran que no escucharon el disparo. Estaban en otra habitación escuchando música, no presenciaron el hecho”, aseguró el abogado Posse.

Ayer al mediodía, Alicia López cambió su versión y declaró que estaba en su cama cuando la pareja ingresó discutiendo, comentaron fuentes judiciales. Vanina le habría dicho a su novio que se marchara, y él le habría respondido, según esta versión, que no se iría y que la mataría.

López afirmó que, en medio de la discusión, Lizárraga sacó el arma y le disparó en la espalda a Vanina. Luego le apuntó a su suegra, de acuerdo con la declaración de la detenida, y la amenazó para que dijera que los habían querido asaltar. Además, afirmó que el padre y el hermano de Lizárraga también la intimidaron.

“La autopsia dice que el disparo fue a caño tocante, lo que coincide con lo que declaró López”, afirmó Posse.

El abogado Hermosa, por su parte, destacó que la madre de Vanina volvió a cambiar su declaración, contradiciéndose. “Dice ahora que estaba en el lugar, y antes decía que estaba en el baño. La versión que ha dado Lizárraga se ha corroborado en la reconstrucción, no se por qué esta mujer sigue sosteniendo otra cosa. Se trató de un accidente”, aseguró el letrado.

Hermosa dijo que el novio de Vanina nunca sostuvo que había ocurrido un intento de asalto, sino que esa versión fue introducida por la madre de la víctima. “Lizárraga declaró una sola vez ante López Ávila y le dijo toda la verdad. Ahora inventan que hubo amenazas para poder justificarse. Está a disposición de la Justicia toda la familia para que vaya a declarar”, agregó el defensor del principal acusado.

La próxima medida de prueba será la pericia balística al arma que secuestró la división Homicidios, a cargo del comisario Marcelo Sallas, en la casa de Lizárraga. El revólver calibre 32 será comparado con la bala que extrajeron del cuerpo de la víctima, para determinar si se trata del arma homicida.

El único testigo del crimen que podría tener la verdad para dilucidar el crimen, no puede declarar. Se trata del hermano discapacitado de Vanina, quien según ambas versiones vio todo lo que pasó. “Estaba despierto, pero no puede hablar nada. Vio todo. Tiene cuadriplejia espástica y retraso mental. Los familiares me contaron que está muy agresivo”, dijo Posse.