11 Julio 2014
El fiscal de Feria Washington Navarro Dávila decidió realizar la reconstrucción del crimen de Vanina Bellier. Fuentes judiciales contaron que la medida judicial se llevará a cabo hoy a las 16 en la casa ubicada en el pasaje sin nombre (a 50 metros de la esquina del pasaje Ibatín y avenida Avellaneda) de Banda del Río Salí, donde habría ocurrido el homicidio.
Vanina falleció el jueves de la semana pasada, luego de recibir un disparo a la altura del abdomen. Las distintas versiones de cómo habría ocurrido la muerte de la joven de 24 años habría sido lo que llevó al fiscal a ordenar la reconstrucción, para tratar de traer claridad al caso.
La estudiante de enfermería fue trasladada al Centro de Salud el jueves alrededor de las 22.30 (murió a las 23.45). Su novio Jesús Lizárraga dijo que habían sido víctimas de un intento de asalto cuando iban a la casa de Vanina en su moto. El muchacho relató que había acelerado para esquivar a los ladrones, y que les dispararon.
El fiscal de Instrucción Diego López Avila dudó de esa versión, ya que no había pruebas que la avalaran. El sábado a la noche, luego de que el cuerpo de Vanina fuera enterrado, fue hasta la casa de la víctima y habló con su madre, Alicia López. La mujer reconoció que su hija había sido herida mortalmente por su novio, y que ella ingresó a la habitación cuando escuchó el disparo. Antes de morir, aseguró López, su hija le pidió que dijera que se había tratado de un accidente.
Lizárraga fue detenido inmediatamente, y al día siguiente declaró ante López Ávila y reconoció que la versión del asalto era mentira, pero aclaró que el tiro que mató a su novia se le había escapado durante un juego. Además, dijo que López estaba presente cuando ocurrió el hecho.
El lunes, cuando Navarro Dávila asumió la investigación de la causa al comenzar la feria judicial, se pidió la detención de López, de su hijo Matías Alejandro Bellier y de su sobrino Walter Enrique Pereyra, acusándolos por el encubrimiento del crimen.
Ayer, el defensor de los familiares de Vanina, Carlos Posse, dijo que ponía en duda que el crimen haya ocurrido en la vivienda de la joven. “Fui hasta la casa y he visto el dormitorio. Son personas muy humildes, no me cierra que haya sido ahí el hecho por las dimensiones de la habitación. Además cuando se hizo el disparo tiene que haberse escuchado al menos a media cuadra de la casa, y nadie escuchó nada”, afirmó el letrado.
Con la reconstrucción que se realizará hoy, el fiscal quiere saber exactamente dónde estaba ubicada cada una de las personas, según las distintas versiones, para tratar de saber cuál es la verídica.
Vanina falleció el jueves de la semana pasada, luego de recibir un disparo a la altura del abdomen. Las distintas versiones de cómo habría ocurrido la muerte de la joven de 24 años habría sido lo que llevó al fiscal a ordenar la reconstrucción, para tratar de traer claridad al caso.
La estudiante de enfermería fue trasladada al Centro de Salud el jueves alrededor de las 22.30 (murió a las 23.45). Su novio Jesús Lizárraga dijo que habían sido víctimas de un intento de asalto cuando iban a la casa de Vanina en su moto. El muchacho relató que había acelerado para esquivar a los ladrones, y que les dispararon.
El fiscal de Instrucción Diego López Avila dudó de esa versión, ya que no había pruebas que la avalaran. El sábado a la noche, luego de que el cuerpo de Vanina fuera enterrado, fue hasta la casa de la víctima y habló con su madre, Alicia López. La mujer reconoció que su hija había sido herida mortalmente por su novio, y que ella ingresó a la habitación cuando escuchó el disparo. Antes de morir, aseguró López, su hija le pidió que dijera que se había tratado de un accidente.
Lizárraga fue detenido inmediatamente, y al día siguiente declaró ante López Ávila y reconoció que la versión del asalto era mentira, pero aclaró que el tiro que mató a su novia se le había escapado durante un juego. Además, dijo que López estaba presente cuando ocurrió el hecho.
El lunes, cuando Navarro Dávila asumió la investigación de la causa al comenzar la feria judicial, se pidió la detención de López, de su hijo Matías Alejandro Bellier y de su sobrino Walter Enrique Pereyra, acusándolos por el encubrimiento del crimen.
Ayer, el defensor de los familiares de Vanina, Carlos Posse, dijo que ponía en duda que el crimen haya ocurrido en la vivienda de la joven. “Fui hasta la casa y he visto el dormitorio. Son personas muy humildes, no me cierra que haya sido ahí el hecho por las dimensiones de la habitación. Además cuando se hizo el disparo tiene que haberse escuchado al menos a media cuadra de la casa, y nadie escuchó nada”, afirmó el letrado.
Con la reconstrucción que se realizará hoy, el fiscal quiere saber exactamente dónde estaba ubicada cada una de las personas, según las distintas versiones, para tratar de saber cuál es la verídica.
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