07 Julio 2014
Argentina vuelve a estar entre los cuatro primeros de una Copa del Mundo y alegría es lo que les sobra a los argentinos acá en Brasil.
Creo que si hablamos primero del partido que le ganó a Bélgica, fue muy inteligente Alejandro Sabella: metió mano al equipo, hizo que funcionara de manera diferente y un poco mejor de lo que lo venía haciendo en las últimas presentaciones.
Sin jugar como todos pensamos, hizo un muy buen partido. Se despertó Gonzalo Higuaín y el equipo se mostró corto e inteligente. Además, neutralizó a un equipo que venía jugando bien y había aplastado a Estados Unidos en los octavos de final.
En general, todo me dejó muy satisfecho. Ahora, si la semana pasada decíamos que los tiempos comienzan a achicarse para lo físico, lo mental y hasta lo táctico, imagínense ahora: se viene una semifinal de Copa del Mundo.
El rival será Holanda y hay que ganar o ganar, poco importa como se juegue. En lo personal estoy confiado con todo lo que vi. Fue un equipo diferente y con mucha actitud.
Quizás a la vista no fue mucho juego el que entregó, pero hubo actitud y eso me gustó.
Los dejo y ojalá que el próximo miércoles, después de Holanda, estemos hablando de una nueva final del Mundial.
Creo que si hablamos primero del partido que le ganó a Bélgica, fue muy inteligente Alejandro Sabella: metió mano al equipo, hizo que funcionara de manera diferente y un poco mejor de lo que lo venía haciendo en las últimas presentaciones.
Sin jugar como todos pensamos, hizo un muy buen partido. Se despertó Gonzalo Higuaín y el equipo se mostró corto e inteligente. Además, neutralizó a un equipo que venía jugando bien y había aplastado a Estados Unidos en los octavos de final.
En general, todo me dejó muy satisfecho. Ahora, si la semana pasada decíamos que los tiempos comienzan a achicarse para lo físico, lo mental y hasta lo táctico, imagínense ahora: se viene una semifinal de Copa del Mundo.
El rival será Holanda y hay que ganar o ganar, poco importa como se juegue. En lo personal estoy confiado con todo lo que vi. Fue un equipo diferente y con mucha actitud.
Quizás a la vista no fue mucho juego el que entregó, pero hubo actitud y eso me gustó.
Los dejo y ojalá que el próximo miércoles, después de Holanda, estemos hablando de una nueva final del Mundial.