06 Julio 2014
Cristina suma críticas por culpa de Boudou
Dirigentes de la oposición afirman, por un lado, que la jefa de Estado no pudo estar ajena al caso y, por otro, que debió “soltar” al vice Gil Lavedra sostuvo que la situación judicial del vicepresidente se irá agravando y que el descrédito social le impedirá ejercer la función pública. El juicio político
COMPLICADOS. La situación del vicepresidente le genera problemas a Cristina. El 16 ella debe viajar a Brasilia y él está citado a declarar ante el juez. télam (archivo)
BUENOS AIRES.- Un grupo de dirigentes de la Unión Cívica Radical (UCR) consideró que la presidenta, Cristina Fernández de Kirchner, no puede estar ajena a la situación judicial de su vicepresidente, Amado Boudou, procesado presuntos delitos de corrupción.
“La Presidenta de ninguna manera puede estar ajena a lo que significó la causa Ciccone”, expresó el diputado nacional por Tucumán José Cano, en referencia a la investigación que busca dilucidar la participación del vicepresidente argentino en una supuesta maniobra que salvó de la quiebra a la imprenta de billetes Ciccone Calcográfica durante su gestión como ministro de Economía (2009-2011).
En el procesamiento dictado contra Boudou hace ocho días, el juez federal Ariel Lijo explicó que el funcionario intervino en la operación para dejar la compañía en manos de supuestos allegados suyos.
La situación judicial de Boudou va a ir agravándose con el tiempo, aseguró el dirigente radical Ricardo Gil Lavedra, para quien la difusión de otras causas judiciales abiertas contra el vicepresidente le generará en la sociedad un descrédito total y la imposibilidad de poder ejercer su función pública.
“La decisión del Gobierno de mantenerlo a toda costa es un error, esto cada vez va a ser peor. Van a tener que esconder al vice permanentemente. ¿Qué va a hacer la Presidenta? ¿Ya no va a poder salir nunca del país para no dejarle la conducción del país?”, se preguntó Gil Lavedra.
El dirigente opositor señaló que en el último tiempo se dieron a conocer tal cantidad de expedientes judiciales contra el vicepresidente que van a seguir su marcha en forma indefectible, por lo que la discusión acerca de la situación judicial del vicepresidente -consideró- llegó para quedarse.
“Hasta en el propio oficialismo tienen la certeza de que Boudou no actuó con idoneidad”, sostuvo el diputado nacional de la UCR Ricardo Alfonsín, hijo del fallecido presidente argentino Raúl Alfonsín (1983-1989).
Rechazo parlamentario
La Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados de Argentina rechazó este jueves seis pedidos de enjuiciamiento presentados por bloques de la oposición contra el vicepresidente, el primero en la historia del país en ser procesado durante el ejercicio de su cargo por la Justicia.
Legisladores del gobernante Frente para la Victoria (FpV), que representan la mayoría de los integrantes de la Comisión, argumentaron que la causa en la que se investiga a Boudou aún se está tramitando y que todavía no hay sentencia alguna.
El vicepresidente argentino está acusado de los delitos de “cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública”. Además de esta situación, debe afrontar un embargo por $ 200.000 que le trabó el juez Lijo.
Hasta el momento Fernández de Kirchner eludió hablar del tema, aunque distintos funcionarios del Gobierno nacional y legisladores oficialistas compararon la situación de Boudou con la del jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el opositor Mauricio Macri, que sigue en su cargo pese a estar procesado en una causa por presuntas escuchas ilegales.
Boudou, que se declaró ajeno a cualquier acto de corrupción, es también investigado en otra causa por ser el propietario de un automóvil con presunta documentación falsa. En esta investigación, el juez federal Claudio Bonadío lo citó para que preste declaración indagatoria el miércoles 16 de julio.
Ese día la jefa de Estado tiene previsto participar en Brasilia de la VI Cumbre de presidentes del Grupo Brics, que integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
En ese caso, la mandataria deberá dejar el destino del país en manos de Boudou. La semana que pasó, la Presidenta debía viajar al exterior, pero no lo hizo por una infección en las vías respiratorias. Ello evitó que la Jefatura de Estado debiera recaer en el cuestionado vicepresidente. (DPA-DyN)
“La Presidenta de ninguna manera puede estar ajena a lo que significó la causa Ciccone”, expresó el diputado nacional por Tucumán José Cano, en referencia a la investigación que busca dilucidar la participación del vicepresidente argentino en una supuesta maniobra que salvó de la quiebra a la imprenta de billetes Ciccone Calcográfica durante su gestión como ministro de Economía (2009-2011).
En el procesamiento dictado contra Boudou hace ocho días, el juez federal Ariel Lijo explicó que el funcionario intervino en la operación para dejar la compañía en manos de supuestos allegados suyos.
La situación judicial de Boudou va a ir agravándose con el tiempo, aseguró el dirigente radical Ricardo Gil Lavedra, para quien la difusión de otras causas judiciales abiertas contra el vicepresidente le generará en la sociedad un descrédito total y la imposibilidad de poder ejercer su función pública.
“La decisión del Gobierno de mantenerlo a toda costa es un error, esto cada vez va a ser peor. Van a tener que esconder al vice permanentemente. ¿Qué va a hacer la Presidenta? ¿Ya no va a poder salir nunca del país para no dejarle la conducción del país?”, se preguntó Gil Lavedra.
El dirigente opositor señaló que en el último tiempo se dieron a conocer tal cantidad de expedientes judiciales contra el vicepresidente que van a seguir su marcha en forma indefectible, por lo que la discusión acerca de la situación judicial del vicepresidente -consideró- llegó para quedarse.
“Hasta en el propio oficialismo tienen la certeza de que Boudou no actuó con idoneidad”, sostuvo el diputado nacional de la UCR Ricardo Alfonsín, hijo del fallecido presidente argentino Raúl Alfonsín (1983-1989).
Rechazo parlamentario
La Comisión de Juicio Político de la Cámara de Diputados de Argentina rechazó este jueves seis pedidos de enjuiciamiento presentados por bloques de la oposición contra el vicepresidente, el primero en la historia del país en ser procesado durante el ejercicio de su cargo por la Justicia.
Legisladores del gobernante Frente para la Victoria (FpV), que representan la mayoría de los integrantes de la Comisión, argumentaron que la causa en la que se investiga a Boudou aún se está tramitando y que todavía no hay sentencia alguna.
El vicepresidente argentino está acusado de los delitos de “cohecho y negociaciones incompatibles con la función pública”. Además de esta situación, debe afrontar un embargo por $ 200.000 que le trabó el juez Lijo.
Hasta el momento Fernández de Kirchner eludió hablar del tema, aunque distintos funcionarios del Gobierno nacional y legisladores oficialistas compararon la situación de Boudou con la del jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el opositor Mauricio Macri, que sigue en su cargo pese a estar procesado en una causa por presuntas escuchas ilegales.
Boudou, que se declaró ajeno a cualquier acto de corrupción, es también investigado en otra causa por ser el propietario de un automóvil con presunta documentación falsa. En esta investigación, el juez federal Claudio Bonadío lo citó para que preste declaración indagatoria el miércoles 16 de julio.
Ese día la jefa de Estado tiene previsto participar en Brasilia de la VI Cumbre de presidentes del Grupo Brics, que integran Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica.
En ese caso, la mandataria deberá dejar el destino del país en manos de Boudou. La semana que pasó, la Presidenta debía viajar al exterior, pero no lo hizo por una infección en las vías respiratorias. Ello evitó que la Jefatura de Estado debiera recaer en el cuestionado vicepresidente. (DPA-DyN)
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