05 Julio 2014
CON EL PREMIO EN LAS MANOS. María Inés Galván y Stella Maris Giménez muestran los cheques. la gaceta / foto de Inés Quinteros Orio
La búsqueda de salud se ha vuelto una prioridad en la vida de estas dos mujeres. Pero lejos de deprimirse, ellas sonríen permanentemente. Y califican el premio de LA GACETA como una bendición. Stella Maris Giménez y María Inés Galván se repartieron el pozo acumulado de $70.000. Y coincidieron en que utilizarán parte de los $35.000 que les correspondieron a cada una para saldar las deudas que les generaron los tratamientos médicos.
Stella Maris vive en un extremo de la provincia y trabaja en el otro. Esta concepcionense es maestra de alta montaña y se desempeña en la escuela de El Brete, en Trancas (como no hay caminos directos hasta este establecimiento educativo, ella debe cruzar el límite con Salta por la ruta 9 y regresar a la provincia por caminos vecinales y precarios).
“Mi papá participó del entretenimiento durante muchos años. Y yo le heredé la costumbre. Él nunca ganó, pero siempre pensó que algún día el premio iba a ser suyo. Falleció el año pasado y siento que me dio una mano para ganar, esté donde esté”, dijo emocionada. Stella Maris tuvo que someterse a varias operaciones en los últimos meses. Y eso le generó grandes deudas.”Voy a usar parte del premio para pagar lo que debo y quedarme tranquila”, adelantó.
María Inés, vecina de Banda del Río Salí, vivió un calvario con la enfermedad de su esposo. La situación fue tan grave que él no pudo trabajar más y sus cuatro hijos los ayudaron a subsistir. “Al premio lo voy a usar para saldar deudas y para ahorrar. Quiero que, ahora que mi esposo está mejor, mis hijos se desentiendan de mantenernos”, explicó. María Inés contó que este domingo se reunirá con ellos y con sus seis nietos para celebrar el premio. “¡Los chicos me piden que los lleve al Mundial!”, contó entre risas. Stella Maris todavía no sabe qué hará para festejar, pero no descartó la posibilidad de hacer un buen asado.
Stella Maris vive en un extremo de la provincia y trabaja en el otro. Esta concepcionense es maestra de alta montaña y se desempeña en la escuela de El Brete, en Trancas (como no hay caminos directos hasta este establecimiento educativo, ella debe cruzar el límite con Salta por la ruta 9 y regresar a la provincia por caminos vecinales y precarios).
“Mi papá participó del entretenimiento durante muchos años. Y yo le heredé la costumbre. Él nunca ganó, pero siempre pensó que algún día el premio iba a ser suyo. Falleció el año pasado y siento que me dio una mano para ganar, esté donde esté”, dijo emocionada. Stella Maris tuvo que someterse a varias operaciones en los últimos meses. Y eso le generó grandes deudas.”Voy a usar parte del premio para pagar lo que debo y quedarme tranquila”, adelantó.
María Inés, vecina de Banda del Río Salí, vivió un calvario con la enfermedad de su esposo. La situación fue tan grave que él no pudo trabajar más y sus cuatro hijos los ayudaron a subsistir. “Al premio lo voy a usar para saldar deudas y para ahorrar. Quiero que, ahora que mi esposo está mejor, mis hijos se desentiendan de mantenernos”, explicó. María Inés contó que este domingo se reunirá con ellos y con sus seis nietos para celebrar el premio. “¡Los chicos me piden que los lleve al Mundial!”, contó entre risas. Stella Maris todavía no sabe qué hará para festejar, pero no descartó la posibilidad de hacer un buen asado.
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