04 Julio 2014
EN SHUAFAT. Palestinos arrojan piedras a la policía israelí, en una nueva jornada de enfrentamientos callejeros. reuters
TEL AVIV.- La tensión en Cercano Oriente va en aumento. Mientras Israel desplaza tropas terrestres en dirección sur hacia la zona fronteriza con la Franja de Gaza, el brazo militar de la organización radical palestina Hamas amenazó con ataques contra “nuevos blancos” israelíes. Un número limitado de reservistas han sido movilizados, confirmó el Ejército. Se trata de tropas terrestres y vehículos blindados. Entretanto, los ataques con cohetes desde la Franja de Gaza continuaron anoche.
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), Peter Lerner, llamó a Hamas a frenar los lanzamientos de cohetes para evitar una escalada del conflicto y dijo que su país no quiere una ofensiva en la Franja de Gaza. Por su parte, un portavoz enmascarado de Hamas advirtió al Estado israelí de no realizar nuevos ataques en la Franja. En caso de que Israel dé “pasos estúpidos”, sus ciudades se convertirán en blancos, dijo el portavoz de la milicia ante periodistas en Gaza. “No solamente sus ciudades, sino también nuevos blancos”. “Hamas tiene un Ejército difícil de quebrantar”, expresó.
Ante la escalada, la cúpula de la organización radical mantuvo un encuentro de urgencia con representantes de otras facciones palestinas. También el gabinete de seguridad israelí se reunió anoche para deliberar sobre los pasos a seguir. En el lapso de 24 horas, milicianos palestinos dispararon más de 30 cohetes y tres de ellos impactaron en tres viviendas de la ciudad fronteriza de Sderot. En el pasado, Hamas ha intentado contener a otras facciones palestinas en sus combates contra Israel, pero igualmente se la acusa de participar en los ataques con cohetes.
El líder de Hamas en el exilio, Jaled Mashaal, dijo que su organización cumple los acuerdos de alto el fuego alcanzados tras la ola de violencia en noviembre de 2012 bajo mediación egipcia.
La aviación israelí bombardeó objetivos de Gaza, ayer antes del amanecer, en respuesta a una intensificación del lanzamiento de cohetes por parte de los palestinos. Fueron atacados más de una docena de blancos de Hamas. El Ejército israelí detuvo además a 13 palestinos en Cisjordania, en el marco de la búsqueda de los asesinos de los tres jóvenes israelíes secuestrados que aparecieron muertos. Las fuerzas de seguridad creen que los asesinos de Gilad Shaar, Naftali Frankel y Eyal Yifrah son miembros de Hamas. Los tres jóvenes, que estaban desaparecidos desde el 12 de junio, fueron encontrados muertos el lunes por la noche. Pero, tras la muerte el miércoles de un adolescente palestino hubo disturbios en el sector este de Jerusalén. Palestinos enmascarados le tiraron piedras y petardos a la policía. El cadáver de Mohammed Abu Khdair, de 16 años, fue hallado en un bosque cerca de Jerusalén. Medios de Tel Aviv se refirieron a una posible venganza de israelíes de derecha por la muerte de los tres jóvenes israelíes, pero tampoco los investigadores descartan un hecho criminal. La agudización de la crisis puso en alerta en Occidente. La jefa de derechos humanos de la ONU, Navi Pillay, condenó tanto a israelíes como a palestinos por el brote de violencia. (DPA-Reuters)
El portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF), Peter Lerner, llamó a Hamas a frenar los lanzamientos de cohetes para evitar una escalada del conflicto y dijo que su país no quiere una ofensiva en la Franja de Gaza. Por su parte, un portavoz enmascarado de Hamas advirtió al Estado israelí de no realizar nuevos ataques en la Franja. En caso de que Israel dé “pasos estúpidos”, sus ciudades se convertirán en blancos, dijo el portavoz de la milicia ante periodistas en Gaza. “No solamente sus ciudades, sino también nuevos blancos”. “Hamas tiene un Ejército difícil de quebrantar”, expresó.
Ante la escalada, la cúpula de la organización radical mantuvo un encuentro de urgencia con representantes de otras facciones palestinas. También el gabinete de seguridad israelí se reunió anoche para deliberar sobre los pasos a seguir. En el lapso de 24 horas, milicianos palestinos dispararon más de 30 cohetes y tres de ellos impactaron en tres viviendas de la ciudad fronteriza de Sderot. En el pasado, Hamas ha intentado contener a otras facciones palestinas en sus combates contra Israel, pero igualmente se la acusa de participar en los ataques con cohetes.
El líder de Hamas en el exilio, Jaled Mashaal, dijo que su organización cumple los acuerdos de alto el fuego alcanzados tras la ola de violencia en noviembre de 2012 bajo mediación egipcia.
La aviación israelí bombardeó objetivos de Gaza, ayer antes del amanecer, en respuesta a una intensificación del lanzamiento de cohetes por parte de los palestinos. Fueron atacados más de una docena de blancos de Hamas. El Ejército israelí detuvo además a 13 palestinos en Cisjordania, en el marco de la búsqueda de los asesinos de los tres jóvenes israelíes secuestrados que aparecieron muertos. Las fuerzas de seguridad creen que los asesinos de Gilad Shaar, Naftali Frankel y Eyal Yifrah son miembros de Hamas. Los tres jóvenes, que estaban desaparecidos desde el 12 de junio, fueron encontrados muertos el lunes por la noche. Pero, tras la muerte el miércoles de un adolescente palestino hubo disturbios en el sector este de Jerusalén. Palestinos enmascarados le tiraron piedras y petardos a la policía. El cadáver de Mohammed Abu Khdair, de 16 años, fue hallado en un bosque cerca de Jerusalén. Medios de Tel Aviv se refirieron a una posible venganza de israelíes de derecha por la muerte de los tres jóvenes israelíes, pero tampoco los investigadores descartan un hecho criminal. La agudización de la crisis puso en alerta en Occidente. La jefa de derechos humanos de la ONU, Navi Pillay, condenó tanto a israelíes como a palestinos por el brote de violencia. (DPA-Reuters)