Claro como el agua

El videoanálisis siempre es necesario, aunque en este caso no tanto: todos los jugadores saben perfectamente qué es lo que se hizo mal el sábado, para corregirlo, y qué es lo que se hizo bien, para sostenerlo y profundizarlo. Hasta ahí el plano de lo teórico. La cuestión es llevarlo a los hechos, y para ello el seleccionado se entrenó ayer por la tarde en la sede NOA del Pladar, en Los Tarcos.

Forwards por un lado, tres cuartos por el otro, los integrantes del cuerpo técnico que encabeza Daniel Hourcade dirigieron la sesión, que contó con una buena cantidad de espectadores. Apenas se desarmó la ronda final, muchos de ellos saltaron sobre el campo de juego a la caza del autógrafo, la foto o incluso la selfie.

Los más requeridos, por supuesto, fueron los tucumanos. Al lote de cinco que ya había, se le sumaron dos más: Santiago Iglesias Valdez y Antonio Ahualli, que no fueron a Chaco.

“Hace rato que no terminaba tan golpeado y cansado, aunque eso también es algo lindo de esto”, confiesa Gabriel Ascárate, de gran partido en el debut frente a Irlanda. El centro de Natación estuvo muy participativo en el ataque, y a la hora de defender, lo que menos hizo fue mezquinar los hombros. “Cuando te dan confianza, hay que responder. Creo que superamos las expectativas de la gente y la de nosotros mismos, porque somos un equipo joven y enfrentamos al mejor equipo de Europa. Pero no hay que quedarse con eso, porque ellos seguro que no lo harán”, anticipa Ascárate, quien espera un marco similar al Pumas-Francia de 2012: “Tucumán es una de las mejores plazas para jugar. Podés meter 10 tribunas y se llenan. Hay que aprovecharlo”.

La jornada del plantel se cerró con una charla motivacional programa por Hourcade a cargo de un gran amigo suyo: Diego Elías.

Enyesado

“Lamentablemente, me quedo afuera de la ventana”. Benjamín Macome no dio vueltas al hablar de la fractura que sufrió en el radio del brazo izquierdo durante el partido del sábado. “Por suerte no es expuesta. Tengo que inmobilizar el brazo. Me va a llevar 90 días recuperarme. Trataré de que sea más pronto posible”, aviso el “verdinegro”.

De todos modos, sigue sintiéndose parte, y por eso no se ha sacado al rival de la cabeza. “Ellos tienen un gran equipo. No voy a descubrir nada diciendo esto. Tambien es cierto que nosotros tenemos cosas que mejorar, pero vamos por el buen camino. Tuvimos falencias en los detalles que hace al juego. Detalles que se pueden corregir. Es simple: para ganarles a ellos hay que jugar hasta el último minuto, muy concentrados y sin cometer errores o infracciones que les den el control de la pelota”, explicó.