La juventud no está perdida

RESISTENCIA. Antes de agarrarse la cabeza por otro resultado adverso de Los Pumas, conviene contextualizar el asunto, aclarando las condiciones de partida. Por un lado estuvo un plantel argentino muy joven, lleno de ganas pero también de inexperiencia, que Daniel Hourcade mandó al campo justamente para ganar cicatrices en un desafío de clase A. Por el otro, Irlanda, luciendo su flamante corona de Europa. El mayor ritmo de competencia que arrastraba por causa del Seis Naciones, y el nivel de conexión entre sus jugadores (la gran mayoría juega en su país) le permitió al “Trébol” ganarle al seleccionado argentino 29 a 17, en el primero de los dos choques de la serie.

Hombre mesurado si los hay, “Huevo” no exigió a sus jugadores un triunfo que hubiera sido casi utópico. Ni siquiera como regalo por su cumpleaños 56, que pasó trabajando en el Bicentenario de Chaco, lejos de la mesa familiar. El entrenador quería que sus muchachos estuvieran a la altura, y lo hicieron. Más allá del resultado, Los Pumas tuvieron muy buenos momentos y llegaron a acorralar durante 20 minutos del segundo tiempo a un adversario que acostumbra a jugar en campo contrario.

Pero claro, las mañas que da la experiencia no se compran en el súper ni se entrenan en los Pladares: se adquieren acumulando minutos en la cancha. Y fue ese plus el que le faltó a Argentina para llevar ese dominio territorial al terreno de lo concreto. Casi que el try de Tomás de la Vega llegó más como un acto de justicia a lo hecho en los 38 minutos previos, que como una acción aislada.

Es cierto, en el primer tiempo, Los Pumas prácticamente vieron pasar la pelota y se dedicaron casi todo el tiempo a defender. Aunque lo hicieron bien, eso siempre termina pasando factura en el segundo tiempo. Por algo Irlanda llegó tres veces al ingoal argentino en el complemento, aunque Tomás Cubelli evitó que una de ellas fuera try con un tackle providencial.

El próximo sábado habrá revancha en Tucumán, y aunque quedan cuestiones por mejorar (la obtención y la disciplina, principalmente), el panorama es alentador. Para destacar: las actuaciones de Gabriel Ascárate, Benjamín Macome y Tomás Lavanini.