28 Mayo 2014
La recuperación de la historia siempre es bienvenida porque tiene que ver con la identidad, con la raíz de una institución, de una comunidad, y con aquellas personas que con su trabajo las prestigiaron y las engrandecieron. El rescate de diecisiete films que se hallaban en el archivo del viejo Instituto Cinefotográfico de la UNT (Icunt), actualmente Escuela de Cine y Video de la UNT, fueron restaurados y digitalizados. Las cintas datan de una de las etapas del Icunt (1978-1984), en la que estuvo al frente el ingeniero Jorge Wyngaard. Todas ellas fueron dirigidas por él y recorren fragmentos de la labor universitaria, la vida en Tucumán, sus paisajes, personajes y actividades productivas, según se consigna en nuestra edición del lunes.
El Icunt fue fundado el 1 de junio de 1946 por el entonces interventor de la UNT, Horacio Descole. Héctor Peirano fue su director entre 1946 y 1970. La disponibilidad de recursos y la predisposición de las autoridades para tomar las correspondientes decisiones políticas, convirtieron al Icunt en un polo de producción cinematográfica. Comenzando por el documental “Una institución en marcha” (1947), una breve lista de películas incluye: “Tucumán de fiesta”, “Construcción del dique Escaba”, “Seda natural”, “Dramas del rancho” y “En tierras del silencio”. Una vez consolidado, el Instituto realizó el proceso técnico de “El diablo de las vidalas”, al que siguió “Mansedumbre”, dirigida por Pedro Bravo, primer largometraje producido en Tucumán. En 1954 fue devastado por un incendio, pero su existencia no concluyó allí. Cumplió una importante labor en el armado de Canal 10, la televisora universitaria y fue la sede del destacado documentalista Jorge Prelorán.
En 2007, el rector Juan Cerisola dispuso que todo el material de archivo del ex Icunt pasara a la Escuela de Cine, así como el archivo fílmico de Canal 10, para ser catalogado y estabilizado. Muchos de los rollos han sufrido daños por la mala conservación. Un olor a vinagre impregna las tres bóvedas construidas en 2008 en la Escuela, donde ahora está alojado el material producido por el Icunt. Según los responsables, la humedad y los cambios de temperatura son los enemigos de las cintas que no se hallan archivado en las condiciones ambientales óptimas.
El director de la Escuela dijo que intentaron conseguir aportes privados sin éxito, para adquirir equipos de digitalización y estabilización del material. “Es indispensable un equipo para deshumidificar las bóvedas y conservar la temperatura; en esta etapa estamos empantanados hace dos años”, dijo la responsable del departamento de Documentación y Archivo.
Anteriormente a los films de Wyngaard, que se recuperaron por el aporte de su familia, se había digitalizado “Mansedumbre”, todo un acierto. Entre los proyectos, se hallan varios de los trabajos de Prelorán, así como algunas cintas de “Testimonios de Tucumán”, serie de 24 cortometrajes difundidos por Canal 10 de Tucumán, realizada por Gerardo Vallejo entre 1972 y 1974.
Sería importante que las nuevas autoridades de la casa de altos estudios se ocuparan de este asunto. Tal vez podría destinarse parte de las regalías que ingresan a la UNT a través del YMAD, para dotar a la Escuela de Cine de las herramientas indispensables para proseguir con este valioso trabajo de rescate y digitalización, que luego podría proyectarse a través de Canal 10.
El Icunt fue fundado el 1 de junio de 1946 por el entonces interventor de la UNT, Horacio Descole. Héctor Peirano fue su director entre 1946 y 1970. La disponibilidad de recursos y la predisposición de las autoridades para tomar las correspondientes decisiones políticas, convirtieron al Icunt en un polo de producción cinematográfica. Comenzando por el documental “Una institución en marcha” (1947), una breve lista de películas incluye: “Tucumán de fiesta”, “Construcción del dique Escaba”, “Seda natural”, “Dramas del rancho” y “En tierras del silencio”. Una vez consolidado, el Instituto realizó el proceso técnico de “El diablo de las vidalas”, al que siguió “Mansedumbre”, dirigida por Pedro Bravo, primer largometraje producido en Tucumán. En 1954 fue devastado por un incendio, pero su existencia no concluyó allí. Cumplió una importante labor en el armado de Canal 10, la televisora universitaria y fue la sede del destacado documentalista Jorge Prelorán.
En 2007, el rector Juan Cerisola dispuso que todo el material de archivo del ex Icunt pasara a la Escuela de Cine, así como el archivo fílmico de Canal 10, para ser catalogado y estabilizado. Muchos de los rollos han sufrido daños por la mala conservación. Un olor a vinagre impregna las tres bóvedas construidas en 2008 en la Escuela, donde ahora está alojado el material producido por el Icunt. Según los responsables, la humedad y los cambios de temperatura son los enemigos de las cintas que no se hallan archivado en las condiciones ambientales óptimas.
El director de la Escuela dijo que intentaron conseguir aportes privados sin éxito, para adquirir equipos de digitalización y estabilización del material. “Es indispensable un equipo para deshumidificar las bóvedas y conservar la temperatura; en esta etapa estamos empantanados hace dos años”, dijo la responsable del departamento de Documentación y Archivo.
Anteriormente a los films de Wyngaard, que se recuperaron por el aporte de su familia, se había digitalizado “Mansedumbre”, todo un acierto. Entre los proyectos, se hallan varios de los trabajos de Prelorán, así como algunas cintas de “Testimonios de Tucumán”, serie de 24 cortometrajes difundidos por Canal 10 de Tucumán, realizada por Gerardo Vallejo entre 1972 y 1974.
Sería importante que las nuevas autoridades de la casa de altos estudios se ocuparan de este asunto. Tal vez podría destinarse parte de las regalías que ingresan a la UNT a través del YMAD, para dotar a la Escuela de Cine de las herramientas indispensables para proseguir con este valioso trabajo de rescate y digitalización, que luego podría proyectarse a través de Canal 10.
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