14 Mayo 2014
IMAGEN CLÁSICA. Según los historiadores la nave tenía unos 23 metros de eslora y capacidad para 50 toneladas.
Puede ser el descubrimiento arqueológico submarino más importante de la historia. Un equipo de expertos de Estados Unidos anunció haber encontrado en las profundidades del mar Caribe una de las tres carabelas de Cristóbal Colón, la Santa María. La famosa embarcación, junto con La Niña y la Pinta, habían partido del Puerto de Palos el 3 de agosto de 1492.
La información dada a conocer por la agencia Telam se basa en una entrevista realizada por el diario londinense The Independent, al director de la expedición, el estadounidense Barry Clifford. El artículo señala que la nave fue encontrada en las profundidades del norte del mar de Haití, donde según los diarios de Cristóbal Colón, se hundió hace ya cinco siglos.
El equipo arqueológico cuenta con la ayuda del gobierno haitiano para realizar las investigaciones que podrían echar más luz a un importante capítulo de la historia de la humanidad.
Las hipótesis
“Toda la geografía, la topografía marina y la evidencia arqueológica sugiere fuertemente que el naufragio identificado corresponde a la famosa carabela de Colón, la Santa María”, explicó Clifford al diario británico. El científico norteamericano ha tomado fotografías de los restos del navío y logró agrupar diversas evidencias que lo acercan a confirmar que se trata de la nave española que surcó el océano Atlántico por primera vez.
La más grande de las tres
Según los historiadores, de los tres barcos de Colón, La Santa María, era la más grande de todas. Pero hay quienes afirman que no se trataba de una carabela, como enseñan los libros de historia sino de otro tipo de embarcación, una carraca de tres palos, según los manuales de la época.
La nave encontrada contaba con unos 23 metros de eslora y podía transportar hasta 50 toneladas de peso, según los cálculos actuales. Su origen no está muy claro: algunos autores aseguran que fue construida en Galicia, en Cantabria y otros en el Puerto de Santa María, y que era propiedad de Juan de la Cosa.
“El gobierno de Haití ha colaborado mucho en este hallazgo y ahora tenemos que seguir trabajando con ellos para realizar una excavación arqueológica del barco hundido”, dijo el jefe de la expedición.
El estudio
Hasta hora, el equipo de Clifford ha realizado un análisis superficial del sitio, midiendo y fotografiando esa zona. La identificación de la carabela Santa María fue posible gracias a descubrimientos hechos por separado por otros arqueólogos en 2003. Estos predecesores concluyeron en sus investigaciones que el fuerte de Colón se encontraba cerca de la zona donde fue encontrada la nave. Utilizando esta nueva información sobre el sitio del fuerte, Clifford logró incorporar información de los diarios de Colón para determinar con precisión dónde se encontraban los restos de sus carabelas.
Una expedición, organizada por su equipo hace una década, había encontrado y fotografiado restos de la embarcación, pero entonces desconocían su identidad. Ahora, gracias a la nueva información y evidencia, Clifford logró determinar que se trataría de la Santa María. Al utilizar magnetómetros marinos, equipos de radares sonares y buzos, el equipo de Clifford redujo la zona de búsqueda a una pequeña área donde el barco fue encontrado.
Según evidencia histórica, Colón había hecho construir su primer fuerte en un poblado nativo cercano. Una semana más tarde, dejando a muchos de sus compañeros allí, utilizó las otras dos embarcaciones restantes, la Pinta y la Niña, para regresar a España y reportar su descubrimiento a sus auspiciantes reales, el rey Fernando de Aragón e Isabel de Castilla.
Un cañón de la época
El director del equipo cree que también encontró un cañón de la época en que Colón realizó sus viajes de exploración.
“Hemos informado al gobierno de Haití de nuestro descubrimiento y esperamos trabajar con ellos y con otros colegas haitianos para garantizar que el sitio sea protegido y preservado. Será una oportunidad magnífica para trabajar con las autoridades de Haití y preservar la evidencia y artefactos de este barco que cambió al mundo”, indicó Clifford. El investigador añadió que está “confiado en que una excavación completa de los restos del barco muestre la primera evidencia arqueológica marina del barco que Colón utilizó para descubrir América”.
El experto cree que los restos de la embarcación podrán ser rescatados y expuestos al público en un museo en Haití. “Creemos que, tratada de esta forma, los restos de la carabela tendrían un potencial de jugar un rol central a la hora de desarrollar más la industria turística de Haití en el futuro”, destacó.
El investigador se puso en contacto inmediatamente con el presidente haitiano, Michel Martelly, para ponerlo al tanto del hallazgo.
Clifford había hallado en 1984 el barco pirata Whydah, y recientemente descubrió el galeón del Capitán Kidd, en las costas de Madagascar.
La información dada a conocer por la agencia Telam se basa en una entrevista realizada por el diario londinense The Independent, al director de la expedición, el estadounidense Barry Clifford. El artículo señala que la nave fue encontrada en las profundidades del norte del mar de Haití, donde según los diarios de Cristóbal Colón, se hundió hace ya cinco siglos.
El equipo arqueológico cuenta con la ayuda del gobierno haitiano para realizar las investigaciones que podrían echar más luz a un importante capítulo de la historia de la humanidad.
Las hipótesis
“Toda la geografía, la topografía marina y la evidencia arqueológica sugiere fuertemente que el naufragio identificado corresponde a la famosa carabela de Colón, la Santa María”, explicó Clifford al diario británico. El científico norteamericano ha tomado fotografías de los restos del navío y logró agrupar diversas evidencias que lo acercan a confirmar que se trata de la nave española que surcó el océano Atlántico por primera vez.
La más grande de las tres
Según los historiadores, de los tres barcos de Colón, La Santa María, era la más grande de todas. Pero hay quienes afirman que no se trataba de una carabela, como enseñan los libros de historia sino de otro tipo de embarcación, una carraca de tres palos, según los manuales de la época.
La nave encontrada contaba con unos 23 metros de eslora y podía transportar hasta 50 toneladas de peso, según los cálculos actuales. Su origen no está muy claro: algunos autores aseguran que fue construida en Galicia, en Cantabria y otros en el Puerto de Santa María, y que era propiedad de Juan de la Cosa.
“El gobierno de Haití ha colaborado mucho en este hallazgo y ahora tenemos que seguir trabajando con ellos para realizar una excavación arqueológica del barco hundido”, dijo el jefe de la expedición.
El estudio
Hasta hora, el equipo de Clifford ha realizado un análisis superficial del sitio, midiendo y fotografiando esa zona. La identificación de la carabela Santa María fue posible gracias a descubrimientos hechos por separado por otros arqueólogos en 2003. Estos predecesores concluyeron en sus investigaciones que el fuerte de Colón se encontraba cerca de la zona donde fue encontrada la nave. Utilizando esta nueva información sobre el sitio del fuerte, Clifford logró incorporar información de los diarios de Colón para determinar con precisión dónde se encontraban los restos de sus carabelas.
Una expedición, organizada por su equipo hace una década, había encontrado y fotografiado restos de la embarcación, pero entonces desconocían su identidad. Ahora, gracias a la nueva información y evidencia, Clifford logró determinar que se trataría de la Santa María. Al utilizar magnetómetros marinos, equipos de radares sonares y buzos, el equipo de Clifford redujo la zona de búsqueda a una pequeña área donde el barco fue encontrado.
Según evidencia histórica, Colón había hecho construir su primer fuerte en un poblado nativo cercano. Una semana más tarde, dejando a muchos de sus compañeros allí, utilizó las otras dos embarcaciones restantes, la Pinta y la Niña, para regresar a España y reportar su descubrimiento a sus auspiciantes reales, el rey Fernando de Aragón e Isabel de Castilla.
Un cañón de la época
El director del equipo cree que también encontró un cañón de la época en que Colón realizó sus viajes de exploración.
“Hemos informado al gobierno de Haití de nuestro descubrimiento y esperamos trabajar con ellos y con otros colegas haitianos para garantizar que el sitio sea protegido y preservado. Será una oportunidad magnífica para trabajar con las autoridades de Haití y preservar la evidencia y artefactos de este barco que cambió al mundo”, indicó Clifford. El investigador añadió que está “confiado en que una excavación completa de los restos del barco muestre la primera evidencia arqueológica marina del barco que Colón utilizó para descubrir América”.
El experto cree que los restos de la embarcación podrán ser rescatados y expuestos al público en un museo en Haití. “Creemos que, tratada de esta forma, los restos de la carabela tendrían un potencial de jugar un rol central a la hora de desarrollar más la industria turística de Haití en el futuro”, destacó.
El investigador se puso en contacto inmediatamente con el presidente haitiano, Michel Martelly, para ponerlo al tanto del hallazgo.
Clifford había hallado en 1984 el barco pirata Whydah, y recientemente descubrió el galeón del Capitán Kidd, en las costas de Madagascar.