14 Mayo 2014
EN PLENO ARREGLO. El frente del Espacio Cultural Don Bosco lucirá mejoras el viernes, en su apertura.
Fue un teatro en sus comienzos, hace unos 75 años, y volverá a serlo desde el viernes. En el medio, en el predio funcionó la parroquia Don Bosco, hasta la construcción del templo que hoy la cobija. En su nueva etapa, el nombre se mantendrá pero pasará a llamarse Espacio Cultural Don Bosco, una nueva apuesta para presenciar espectáculos y muestras plásticas en avenida Mitre y San Juan.
La iniciativa atraviesa la actividad privada con la estatal. “La idea surgió en el segundo semestre del año pasado; entonces tomamos contacto con la comunidad salesiana y encontramos en ella una deferencia increíble, un gran entusiasmo, la mejor disponibilidad para trabajar y una decisión de poder colaborar con lo cultural”, explicó el presidente del Ente Cultural de Tucumán, Mauricio Guzman.
El organismo alquiló el salón por tres años, y encaró las obras de acondicionamiento y las refacciones necesarias. En un principio se lo pensó como un espacio de ensayos de los cuerpos estables de música (Banda y Orquesta Sinfónica) y de danza (tanto clásica como contemporánea); pero a medida en que se avanzaba con los trabajos, crecían sus posibilidades de transformarse en una sala de espectáculos abierta al público, como finalmente será.
La inauguración será con un concierto de la Orquesta Sinfónica de la Provincia, con un repertorio clásico del que participarán especialmente invitados los clarinetistas Amalia del Giudice (Buenos Aires) y Evjord Ngieliu (de Albania).
“El espacio no contaba con las condiciones acústicas adecuadas, por lo que el Ente requirió los servicios del arquitecto Guillermo Gonzalo, titular de la cátedra de Acondicionamiento Ambiental y especialista en acústica. Se fabricó una cámara especial para tener un sonido de calidad, que cambió todo el panorama del escenario. También se trabajó con los músicos y con los directores Álvaro García y Jeff Manookian”, explicó Guzman.
En este momento se está trabajando en la pintura de techos y paredes para su apertura; hoy se realizará una visita de inspección, ya pensando en la función del viernes, que está programada para las 21. Si bien es con entrada libre y gratuita, se podrá acceder sólo por invitación oficial, la que podrá ser retirada sin cargo por los interesados desde esta mañana, en la boletería de la sede del Ente, San Martín 251.
El funcionario destacó que el nuevo espacio artístico tendrá un uso multipropósito. “No será sólo de música, sino cultural integral. Vamos a poder encarar muestras plásticas, recitales varios, presentaciones de ballet y demás actividades. Es un lugar que se suma a los otros ya existentes en poder de la Provincia, no sustituye a ninguno. En todo caso, viene para sustituir lo que estaba en el complejo Juan B. Terán, que tuvimos que entregar por la obra para abrir nuevos pasos por las vías del tren. Soy consciente de que hay un déficit de espacios y de la importancia de abrir un lugar fuera del microcentro, pero con fácil acceso y con muy buen estacionamiento”, puntualizó.
Guzman calculó en 550 localidades las disponibles en la platea de este nuevo centro cultural, cantidad apenas menor a la del teatro Alberdi y el doble que la sala Orestes Caviglia. “Todavía no está habilitada la parte superior, donde hay dos pisos de palcos que se van a recuperar a futuro en este emprendimiento donde nos unimos el Estado con una institución privada para bien de toda la comunidad”, concluyó.
La iniciativa atraviesa la actividad privada con la estatal. “La idea surgió en el segundo semestre del año pasado; entonces tomamos contacto con la comunidad salesiana y encontramos en ella una deferencia increíble, un gran entusiasmo, la mejor disponibilidad para trabajar y una decisión de poder colaborar con lo cultural”, explicó el presidente del Ente Cultural de Tucumán, Mauricio Guzman.
El organismo alquiló el salón por tres años, y encaró las obras de acondicionamiento y las refacciones necesarias. En un principio se lo pensó como un espacio de ensayos de los cuerpos estables de música (Banda y Orquesta Sinfónica) y de danza (tanto clásica como contemporánea); pero a medida en que se avanzaba con los trabajos, crecían sus posibilidades de transformarse en una sala de espectáculos abierta al público, como finalmente será.
La inauguración será con un concierto de la Orquesta Sinfónica de la Provincia, con un repertorio clásico del que participarán especialmente invitados los clarinetistas Amalia del Giudice (Buenos Aires) y Evjord Ngieliu (de Albania).
“El espacio no contaba con las condiciones acústicas adecuadas, por lo que el Ente requirió los servicios del arquitecto Guillermo Gonzalo, titular de la cátedra de Acondicionamiento Ambiental y especialista en acústica. Se fabricó una cámara especial para tener un sonido de calidad, que cambió todo el panorama del escenario. También se trabajó con los músicos y con los directores Álvaro García y Jeff Manookian”, explicó Guzman.
En este momento se está trabajando en la pintura de techos y paredes para su apertura; hoy se realizará una visita de inspección, ya pensando en la función del viernes, que está programada para las 21. Si bien es con entrada libre y gratuita, se podrá acceder sólo por invitación oficial, la que podrá ser retirada sin cargo por los interesados desde esta mañana, en la boletería de la sede del Ente, San Martín 251.
El funcionario destacó que el nuevo espacio artístico tendrá un uso multipropósito. “No será sólo de música, sino cultural integral. Vamos a poder encarar muestras plásticas, recitales varios, presentaciones de ballet y demás actividades. Es un lugar que se suma a los otros ya existentes en poder de la Provincia, no sustituye a ninguno. En todo caso, viene para sustituir lo que estaba en el complejo Juan B. Terán, que tuvimos que entregar por la obra para abrir nuevos pasos por las vías del tren. Soy consciente de que hay un déficit de espacios y de la importancia de abrir un lugar fuera del microcentro, pero con fácil acceso y con muy buen estacionamiento”, puntualizó.
Guzman calculó en 550 localidades las disponibles en la platea de este nuevo centro cultural, cantidad apenas menor a la del teatro Alberdi y el doble que la sala Orestes Caviglia. “Todavía no está habilitada la parte superior, donde hay dos pisos de palcos que se van a recuperar a futuro en este emprendimiento donde nos unimos el Estado con una institución privada para bien de toda la comunidad”, concluyó.