Nuevo cruce entre el Gobierno y la Iglesia

BUENOS AIRES.- El obispo de Humahuaca, Pedro Olmedo, advirtió que “no ayuda a solucionar las cosas no reconocer los problemas”, y aseguró que “no se puede tapar el sol con la mano”, cuando los hechos sociales, generados por la ausencia del Estado también generan violencia.

De esta manera, el Gobierno y la Iglesia sumaron ayer un nuevo cruce verbal después del crítico documento de la Conferencia Episcopal en el que se diagnosticó que “la Argentina está enferma de violencia”.

Luego de ese documento, la mandataria había señalado que quienes dicen que “hoy la Argentina es una Argentina violenta” quieren reeditar “viejos enfrentamientos” vividos por el país.

El obispo Olmedo se explayó sobre esos conceptos expresando que “no ayuda a solucionar las cosas no reconocer los problemas”, y dijo que la situación que se vive en Jujuy con la violencia “es un volcán que está en erupción”.

Desde el massismo, el presidente del bloque de diputados por el Frente Renovador, Darío Giustozzi, también se lanzó contra el kirchnerismo, apoyando las afirmaciones del cura, al señalar que “el clima de violencia y stress social no es ajeno a la violencia dialéctica, política e institucional ejercida por la irracionalidad fundamentalista de los ultra K”.

En cuanto a las críticas que lanzó la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, quien cargó contra el Iglesia, recordando que desde institución eclesial “no hablaron cuando la dictadura secuestraba tantísima gente y ahora se asustan porque hay violencia”, el párroco manifestó que “ese no es un motivo para no poder hablar, expresar y advertir sobre determinadas situaciones sociales. “Precisamente por lo contrario es que hay que hablar”, agregó el obispo.

Exclusión social

Olmedo dijo que “un motivo de violencia es la ausencia del Estado”, y enumeró que lo que genera esta problemática “es la exclusión social, la falta de oportunidades, de trabajo, de perspectivas para los jóvenes y la pobreza social”.

El obispo de Humahuaca puntualizó que en esa ciudad existen patotas que generan “violencia y muertes”, y que “en los centros urbanos que están cerca de la ruta, la penetración de la droga es muy fuerte”. “No se puede tapar el sol con la mano”, enfatizó el párroco al salir al cruce a las críticas del Gobierno al documento eclesial ya que, remarcó, “la violencia se ve en todos lados”. (DyN)